✰꒷ᨒ; 30 días de mi ship OTP ꒷꒦♡✰꒷ᨒ;！
"Donde Chester recibe amor de su Dulce Reina, un dulce amor que le daría diabetes a cualquiera, 30 días, 30 formas distintas de demostrar afecto hacia el bufón, ¿Cuánto podría soportar?"
─────✿◦✿◦✿─────
-> *·˚◡Ma...
Mandy se sentía satisfecha después de haber terminado su trabajo con aquel molesto bufón, ahora tenía claro quien mandaba y quién obedecía... ¡Le encantaba recibir ese poder entre sus dos manos!
Claro, eso le lleva a recordar que Chester siempre la molestaba, diciendo frases como: “En mis tiempos, los negros no tenían/los negros eran...” y comentando un sin fin de cosas sobre la esclavitud, los derechos, y el racismo... ¡Chúpate esa Chester! Todas sus palabras fueron en vano, pues ahora mismo acaba de ser dominado por una mujer de un color distinto de piel al suyo.
Y para el era inaceptable, como el buen fan de Temach que era, luego de estar parado como imbécil con las mejillas coloradas, se vistió rápidamente y salió de la habitación, un poco molesto, pues no podía aceptar que había sido dominado por una mujer... ¡Y negra!
Sabía dónde encontrar a la Reina, apenas eran las tres de la tarde, debería estar atendiendo la tienda, y claramente eso hacia, pues pudo ver a la morena saludando con su mejor sonrisa a sus clientes, entregando dulces, riendo con los niños a veces se preguntaba como esa mujer irritada y enojona podía transformarse en un angelito puro incapaz de dañar incluso a una mosca.
“¡Gracias por elegir Candyland! Tenga un cupón por su gran pedido, ¡Cupón especial solo válido para Candyland! ¡Compré uno de nuestros dulces más caros, y reciba a cambio todas las golosinas que desee, sin límites!” Mandy básicamente grito, no quería seguir oyendo las conversaciones de sus clientes, le entrego los dulces a una chica zombie, a un emo y a un esqueleto para poder despedirse “¡Hasta la próxima!”
No dejo de sonreír hasta que los clientes se fueron, apenas escucho la campanita que daba a conocer que se iban, soltó un gran suspiró, estaba aburrida, y un poco enojada.
“Mina, cierra la tienda por mi... Necesito terminar este papeleo, no podré hacerlo si más clientes entran” Ordenó la reina a una de sus guardias, quien asintió y simplemente hizo lo ordenado.
Mientras todo eso ocurría, un bufón salió de entremedio de los dulces, causando que se cayeran al suelo, la morena soltó un gran gruñido, comenzando a gritarle al bufón sobre el desorden, obviamente el pelirrosa no le hizo caso, estaba bastante frustrado... Si Mandy ya lo había tocado para 'enseñarle una lección', ¿Porqué el no podía hacer lo mismo? ¡Estaba en su derecho, Diosito no lo educó para dejar que una mujer lo dominé!
“¡Chester, eres un malparido pendejo imbécil! Ordena lo que desordenaste ahora mismo, maldito maricon hijo de perr-”
El bufón no dijo nada, simplemente se lanzó arriba de la reina, riéndose bastante fuerte, parecía trastornado, posó su boca en la clavícula de la morena, comenzando a pasar sus manos por la espalda de la contraria, con una mano le quitó su capa, ¿Fue difícil? Claro que sí.
La peliverde estaba confundida, y molesta, muy molesta, iba a golpear a ese bufón si no se quitaba de encima de ella, cosa que Chester ignoro completamente, llevo sus manos al inicio del traje de su amada reina y lo desgarro como si fuera papel, bajando la tela que quedó intacta.
“¿¡Que mierda haces?!” Grito Mandy molesta, iba a atacarlo con su arma cuando se dió cuenta que no la tenía en sus manos, había caído al suelo, convenientemente lejos de ella cuando Chester se lanzó encima “¡Quítate ahora!”
“Mmnh~ ¡No es justo, tu me tocaste como quisiste, es mi turno!” Fue lo que dijo, bajando su cabeza de forma lenta para darle unos pequeños besos a la morena en su pecho, no podía hacer mucho ahí, aún llevaba su sostén.
La mujer solo podía jadear en respuesta, tampoco le disgustaba, pero no iba a permitir que ese bufón la dominará, ella es la reina, no el.
─────★◦♪◦★─────
“Eres un tonto” Hablo una Mandy cruzada de brazos, viendo a un Chester con una mano marcada en su mejilla, así es, Mandy realmente le dió una cachetada a ese bufón por tratar de pasarse de listo.
“¡No es justo, y la cachetada fue innecesaria! Se supone que en una relación, ambas partes deben disfrutar, no solo una... Además eres mujer”
“Pendejo de mierda, solo por ese comentario no te dejare hacer nada”
“¡Mandarina! Era broma, déjame tocarte también... te haré sentir bien, lo prometo”
La morena pensó en esas palabras por un momento, después de un agotado día de trabajo, merecía que la hicieran sentir bien, definitivamente se merecía eso, no hizo más que suspirar, dándose una palmada en la cara.
“¡Bien! Demuestra que puedes hacerme sentir bien” Dijo la peliverde, jura que pudo sentir como se le iluminó la cara al pelirrosa, quien rápidamente se levantó del sueño, recargando su cuerpo en la contraria.
“Dejamelo a mi, no te vas a arrepentir~” Sonrió el bufón de forma maliciosa, su mano hizo un recorrido por el cuerpo de la reina, hasta que llegó a su zona íntima.
─────★◦♪◦★─────
No lo odiaba, para nada estaba disgustada, su boca se cerraba y se abría como un pez fuera del agua tratando de buscar un poco de oxígeno, ya ni siquiera estaban en la 'tienda', estaban en la habitación de la morena, ni hablar de la ropa, pues las ropas de la mujer estaban rotas, y el bufón había lanzado su ropa al pasillo.
Jadeos y gemidos salieron de la boca de la Reina, mientras que un pulgar jugaba con su clítoris, y los demás dedos se retorcían en su interior, tocando uno de sus puntos más dulces, no lo iba a negar, Chester estaba haciendo un buen trabajo, pero la sobreestimulación era demasiada, deseaba alejarse de su lado de una vez solo por eso.
Otro gemido salió de su boca cuando el pelirrosa se atrevió a agregar otro dedo más y luego empujarlos aún más profundo, iniciando unas simuladas embestidas, los dedos del bufón entraban y salían de la vagina de Mandy, la cual estaba bastante mojada, húmeda y dilatada.
“¡Ah~! C-Chester, ugh, carajo...”
“Mandy, cállate o te juro que te voy a subir a mi canal de Youtube” No tenía claro por qué había dicho eso, más bien por la emoción de escuchar a su querida amiga gemir su nombre.
“E-Eres un pendejo...~” Jadeó Mandy molesta, enseñándole su dedo de enmedio al molesto bufón, retiraba todos sus pensamientos, odiaba todo.
Chester simplemente se rió de manera burlona, moviendo sus dedos aún más rápido que antes, solo para ver a la morena retorcerse debajo de su toque, finalmente uso su otra mano para estimular los pezones de su amada, apretandolos y jugueteando con ellos, estaba claro que eso era demasiado para ella, no pensaba en detenerse.
Por otro lado, la peliverde ya estaba sufriendo unos pequeños espasmos por el placer, levantando sus caderas cada vez más, quería correrse, necesitaba hacerlo o explotaría ahora mismo... Sin siquiera avisar, sus caderas se levantaron hasta su límite, todo su cuerpo temblaba a más no poder, no pudo hacer nada más que soltar un gran y audible gemido.
“Ow ¿Ya acabaste, Mandarina?” Chester pregunto lo obvio, eso causó que la agotada reina reuniera fuerzas para patearlo, causando que se caiga de la cama “¡Hey!”
─────★◦♪◦★───── Merezco sus mejores insultos
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
