꒰ Day 9 ꒱

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꒰ 🎂 ꒱✧ Misionero꒱۰ᵔ͈₎

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Finalmente el sol comenzaba a salir de las montañas, un Chester se encontraba sentado en una gran cama, mientras que su compañera estaba en otro lugar, haciendo sus deberes de reina, a juzgar por la apariencia del bufón, se encontraba frustrado y confundido, tenía sus obvias razones para estarlo.

Lo habían criado con la idea de que las mujeres debían ser amas de casa, que ellas eran delicadas, femeninas, débiles, sumisas, que ellas siempre iban a necesitar de un gran y fuerte hombre que las proteja, toda su vida creyó eso hasta que conoció a la morena.
Ella había llamado su atención en un instante, no era para nada delicada, era dueña de un gran castillo y una tienda, no era demasiado femenina, cero porciento sumisa, y por supuesto, NO es alguien débil, definitivamente su amiga jamás necesitaría un hombre para sostenerse.

Ella no es la villana solo porque no quiere.

Algo que le avergonzaba, era cuando ella tomaba el control de toda la situación, ni siquiera puede entender como dos simples toques de la peliverde lo hacían temblar, trataba de ser fuerte, trataba de dominar a esa mujer y así poder hacer a su difunto padre, un hombre orgulloso.
Y ahí está el problema, Mandy es una mujer fuerte, jamás iba a poder dominarla, aún así el no admitiría ser el Sumiso.

En si, a el no le importaba mandar a la mierda las creencias de su cristiana familia y perder su virginidad con la morena (jamás le agrado la religión, es un hecho que hasta hoy en día lo demuestra), lo que si le importaba es el tema de quién lleva las riendas de la relación, ¿Como no importarle? Lo habían criado con el pensamiento de los años 80's, era obvio que le iba a importar quien mandaba y quién no.

Decidió dejar esos pensamientos de lado y levantarse de una vez por todas, el sería el encargado de Candyland mientras que la Reina estaba ausente, Mandy específico muy bien:

“Este lugar debe estar impecable para cuándo vuelva, si escuchó algo como: Ese payaso del Candyland es molesto, este lugar es un asco, vámonos de aquí, jamás vuelvo a Candyland, etc... O siquiera veo: algo roto, cosas fuera de su lugar, guardias lastimados, a ti lastimado, o cualquier cosa de ese estilo... ¡Lo lamentaras como nunca antes lo habías lamentado!”

No sabía el porqué, pero sentía una necesidad inmensa de hacer de esa mujer, una mujer orgullosa, el podía pasar un día sin destrozar nada, el podía demostrar que se merece ser llamado Bufón real de Candyland, iba a demostrar que merecía estar al lado de la Reina.

Hizo su rutina diaria antes de abrir Candyland, tomo una ducha con su magnífico y genial Shampoo con olor a goma de mascar, lavó sus dientes, se vistió con su característica ropa, pinto sus ojos con su delineador, se puso sus botas, no iba a olvidar su caja de sorpresas, y se colocó su sombrero. Le dió una última mirada al espejo, admirandose a si mismo.

“Que guapo estás hoy, Chester” Dijo lanzando un beso al espejo, finalmente soltó una carcajada y salió del baño, sin antes echarse un poco de perfume de caramelo, IBA a hacer que la morena este orgullosa de el, debe estar presentable.

Bajo las escaleras con rapidez, casi cayéndose, los guardias lo miraron confundidos, no había bromeado con ellos durante más de 5 segundos, un nuevo récord, comenzaron a preguntarse la razón por la cual el Bufón estaba decidido a ser una persona civilizada el día de hoy.

“Lilith, necesito que abras la tienda ahora mismo, por favorcito” Sonrió el pelirrosa, cosa que causó que la guardia simplemente rodará los ojos, abriendo la tienda, y quedándose a hacer guardia en la puerta, como todos los días.

𔘓 ﹏ 30 Days OTP ๑ ִֶָ ❀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora