Empieza la pesadilla

5 0 0
                                    


DÍA 1

-Venga ya! Solo un ratito vengaaa, ya me duelen bastante!

-Que no Lee, eres un pesado- Era el primer día que pasaba en aquel lugar, encerrado con su secuestrador. Obviamente no le tenía ningún miedo ni respeto, pue él había sido capaz de matar a sangre fría, ahora no iba a tenerle miedo a un chico de unos meses mayor que él que le mantenía atado en una silla.

-Venga, porfii. Solo un minuto, mira como tengo las muñecas, me duele... Vamos, desátame un rato, don aburrido

-Yongbok te he dicho que no te voy a soltar, y como sigas así te vas a arrepentir.

-Solo un ratito, y me porto bien!

-Mentira. No has cerrado la boca desde que te pillé

-Solo para molestarte. Si te hartas de mi, me soltarás

-Muy inteligente de tu parte contarme tu plan, no crees?

-Venga Hwang... Sueltamee

-Que no pesado. Y ya cállate si no quieres que te deje sin comer

-Si señor- Cerró la boca, apretando los labios en signo ed silencio

-Así me gusta, obediente

-Te gustan obedientes?- Sonrió

-Félix! Pedazo ed guarro...Cállate de una vez- Suspiró con resignación cuando vió que al fin se callaba.

Se encontraban en una casa amplia pero simple. El salón y la cocina estaban conectados; un pasillo daba a una puerta entreabierta, era una habitación. Había otra puerta que supuso que era el baño. En el salón, dónde estaban, se basaba en una pequeña mesa de café y un sofá que visiblemente era antiguo, parecía que era de los que crujían cuando te sentabas o te movías. La cocina era simple, contaba con una encimera pequeña, que en el centro tenía 4 fuegos y un fregadero.

En la nevera habían papeles de direcciones y mapas de distintos distritos de Seúl. Habían platos en el fregadero por lavar, y restos de haber cocinado algo por la encimera.

En el salón también había algo de desastre, habían libros desordenados por la sala, todos eran novelas sobre asesinatos, secuestros y manuales de defensa personal.

Hyunjin le mantenía atado a una silla, que estaba atada a una columna.

-Oye, me estoy planteando una duda

-Agh, callateee

-Pero es importante, jinnie...

-1. No me llames así  2.Que te pasa ahora?

-Cuando cocinas, no te ralla que huela el salón a comida? Quiero decir, como está conectado con la cocina

-A eso lo llamas importante? Enserio?

-Si, que pasa?

-Que eres increíble

-Vaya, gracias hombre

-No era en el buen sentido

-Ush...- Hyunjin resopló, cansado el rubio. Tan solo llevaban unas horas juntos y ya quería librarse de él. Eso iba a ser difícil, o divertido, quien sabía?

Lo que sí sabía era que si aún no habían reclamado por él, no se lo iban a poner fácil, al menos no se rendirían rápido y eso le molestaba, no quería tener que aguantar al chico por mucho tiempo.


Be My MistakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora