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Se podía ver a una joven de cabello rosado estar sentada en la biblioteca estudiando ciencias,siendo interumpida por su "amiga".
— Alteza, puedo pasar — hablo desde afuera una rubia mientras la joven despegaba, la mirada del libro para permitir la entrada.
— Su alteza, no se imagina lo que acaba de pasar — dijo la rubia emocionada, poniendo los bocadillos en la mesa, para abrazar a la ojiazul mientras respiraba su ¿olor? Haciendo que se sintiera perturbada.
— Su alteza ¿esta bien? — Pregunto la joven viendo como la persona que ella servía y que siempre, estaba tranquila y relajada se veía temblorosa y un poco ¿agitada? Mientras le salían lágrimas de sus hermosos ojos e intentaba calmarse....
— Calmate, todo esta bien, ya paso — pensaba mientras se tapaba la cara con las manos, intentandos controlar sus emociones y no pensar tanto en el pasado....
Sin embargo la rubia que veía esto no sabía que hacer,ya su amada señora, que siempre era tan dulce y gentil..... Ahora estaba temblando y asustada.....
Ella no sabía ¿que había hecho mal?... Cuando de repente Aria con una sonrisa entró...
— A la señorita, de seguro le gustara — pensó mientras veía las flores azules qué había conseguido,deteniendose por la escena de su "amada" llorando mientras la rubia veía con un poco desconcertada y lastimada a la ojiazul...
— ¿¡Que le hiciste!? — grito la ojiesmeralda dejando caer la flores siendo esta aplastada en el proceso, mientras corría y le jalaba el cabello a rubia. Dejando un poco desconcertada a la de cabello rosado, que nunca había visto a la castaña actuar así, mientras la rubia gritaba arañando la mano de la castaña intentandose soltar de su agarre....
— ¡Suéltame! — le grito exigiendole a la castaña, mientras esta la veía con una sonrisa burlona y la ojiazul veía aún todo muy sorprendida y sobretodo asustada...
Aurora temía por la vida de stella... Pero ella sabía que debía intervenir, si no quería que rubia acabará, como lo había hecho su anterior dama de compañía.
— ¡Deténte Aria! — ordenó, haciendo que las dos la mirara y se detuvieran admirandola...
— A un llorando, se ve tan hermosa — pensaban ambas admirando la razón por la que se estaban peliando...
—Pero, su alteza — dijo la castaña intentando replicar, mirando a la ojiazul, que solamente con la mirada le decía "que se detuviera", haciendo que está soltara el cuello de la rubia y Aurora suspirara de alivio mentalmente mirando como ambas tenían heridas en la cara y en las manos, aunque la que más tenía era obviamente stella...
Preguntadose mentalmente qué hubiera pasado si no le fuera dicho a Aria que se detuviera y la repuesta era obvia, hubiera acaba con la vi** de la rubia.
