── ‧ ‹ ᥆ᥒᥣᥡ › ‧ ──

1.5K 60 0
                                    


¡¡Advertencia!!

* Contenido +18.
* Lenguaje vulgar.
* Drogas, alcohol, sexo.
* Boypussy, boytits.

Haz sido advertido, jijiji.

Comí pacientemente ese pastel de vainilla, me lo había comprado hace poco, disfrutaba de estos bocadillos en medio día, pero mi sentido arácnido pronto me advierto peligro detrás mío

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Comí pacientemente ese pastel de vainilla, me lo había comprado hace poco, disfrutaba de estos bocadillos en medio día, pero mi sentido arácnido pronto me advierto peligro detrás mío.

Gire soltando colgando el pastel con telarañas, pronto seguiría comiendo. Lancé una telaraña y jale de esta para atraer el molesto dron hacia mi.

—Que porquería de persona hace esto como para no disimular nada.

Vi aquel sello puesto en la máquina, era el mismo que encontré en los otros drones que destruí. Alguien quería atacarme o vigilarme de esta forma, pero no daba resultado, mi sentido arácnido me alertaba justo a tiempo para destruirlo.

Rompí en trozos el dron y arranque mi pastel de las telarañas, para irme colgando de las telarañas que lanzaba hacia los edificios más resistentes que veía. Observaba a la gente que pasaba y que algunos empezaban a darse cuenta de mi presencia.

Pero no podía distraerme más, era el cumpleaños de alguna amiga de mi tía, el debía ayudarla en su vestimenta y en envolver el regalo, por ser tan atento era de sobrino favorito, claro.

Aunque ahora soy el único sobrino que está más al pendiente de ella.

Al fin pude entrar por la ventana de mi habitación, normalmente entro por otra, pero hoy simplemente la pereza fue más grande sobre mi.

Retire mi traje con mucha rapidez para guardarlo debajo de la cama, lanzando varias telarañas el traje quedó bien oculto. Salí lo más rápido posible y vi a mi tía en la sala con 2 platos servidos de comida, me volteó a ver con una sonrisa brillante y le devolví el gesto.

—Mi pequeño Jungkookie, ¿cómo te fue hoy? ¿Sigue ocurriendo el problema con los drones?

—Hoy hubiera sido increíble si no fuera por esas malditas cosas voladoras, pero aún no encuentro quien es tan molesto como para no parar de enviarlos.

Abracé a mi tía y pude sentarme, pero recibí un suave golpe en el hombro, con la mirada me regaño por la mala forma de expresarme, solo baje mi cabeza y mirada al suelo, estaba desanimado.

—Tengo miedo de que puedan descubrir quien soy y revelarlo ante todos, poniéndote a ti en peligro y a lo-

—Nada de eso pasará, Jungkookie, yo confío en ti y que encontrarás al malhechor.

Esa plática ella la dio por terminada al empezar a comer y poner la novela turca de siempre, a ver si ahora si encuentran a Elif, es como él con el dueño de los drones.

La novela parecía no querer terminar.

Mi tía se despidió de mi, luego de una pelea entre si el vestido rojo era mejor que el vestido azul y el porqué de la existencia del feo amarillo fosforescente.

Super Hero | 𓈒 KV !Donde viven las historias. Descúbrelo ahora