No Te Pertenece (Chestappen)

13. Celebración

Había muchas cosas que molestaban a Max Verstappen y de entre todas ellas, el celebrar un podio ajeno cuando él no había ni acabado la carrera, era una de las que más le calaban, pero ahí estaba, sentado al pie de su cama, vestido con una de sus pocas camisas y pantalones de vestir y esperando a que Checo saliera de la regadera para poder reunirse con el resto de los pilotos en el lobby para salir a beber. No tenía ningún plan de salir esa noche, pero le había aliviado tanto ver esa enorme sonrisa de Checo en el podio después de la dura semana que había tenido, que cuando este había bajado y le había pedido salir a beber para celebrar con esa misma sonrisa pegada en su rostro, no se pudo negar.

Los primeros días después del encuentro con el alfa fueron muy difíciles. Es cierto que Checo salía a entrenar y comía bien, pero se negaba a utilizar otra cosa que no fueran sudaderas de mangas largas, buscando ocultar de la vista las mordidas y a la hora del baño, a pesar de que aceptaba ayuda de Max para tratar con su espalda, Max no podía evitar los leves espasmos cada vez que lo tocaba o su llanto silencioso por las noches cuando creía que Max ya estaba dormido.

Había tratado de animarle y hacer que olvidara lo más posible todo lo ocurrido, entrenando con él, quejándose del coche o viendo sus telenovelas, a pesar de que Checo quería comportarse con la mayor normalidad posible, no le había visto ni el asomo de una verdadera sonrisa antes del podio de ese domingo.

Por ello es por lo que se olvidaría un rato de su orgullo y aprovecharía el renovado buen humor de su compañero para salir a disfrutar un rato en su compañía y la de Charles. No estaba muy seguro cuántos de los pilotos iba a asistir y no es como si le importara, después de todo no se llevaba de maravilla con la mayoría. Desde que había entrado a la Formula Uno, siempre había sentido que no podía conectar realmente con los demás por su diferencia de edad y sus casi nulas habilidades sociales por culpa de su padre que veía toda interacción con otras personas como una distracción de su carrera.

Solo recientemente su relación con Charles había pasado a ser una amistad más que una rivalidad teniendo como base sus años de karting juntos y la nostalgia que aquello traía consigo. Ahora pudiendo añadir su creciente amistad con Checo tras año y poco más de ser compañeros y a Daniel, que a pesar de sus asperezas después de ser compañeros, poco a poco iban recuperando el trato amistoso antes de su rivalidad.

—¿Y bien? ¿Estás listo? —preguntó Checo saliendo del baño vestido de manera similar que Max y examinándolo con la mirada mientras aún pasaba una toalla por su cabello. —¿No es eso lo que usaste cuando fuimos a celebrar tu victoria en Arabia Saudita?

—¿Es malo que lo sea? Nadie se va a dar cuenta, no voy a cargar un vestuario diferente para usar cada vez que gano.

—Bien, es un buen argumento, pero de todas maneras deberías de ampliar tu closet un poco más. —Aventó la toalla que traía en manos a la cama, tomó su billetera y chamarra y se paró al lado de la puerta de la habitación. —Vámonos que nos están esperando abajo y yo tenga ganas de un buen trago.

Max se levantó y abrió la puerta, dejando pasar primero a Checo antes de salir él y cerrar para poder bajar al lobby donde se encontraría la mayoría de los pilotos. Cuando bajaron, pudo distinguir de inmediato al grupo de pilotos sentados en los sillones del lobby que conversaban amenamente y en cuanto estuvieron cerca, tres pilotos salieron al encuentro de ambos.

—¡Checo! ¿Viste mi resultado? —le preguntó Mick mientras se abrazaba de la cintura del nombrado y se restregaba sin pudor alguno contra su cuello. —Estuve a nada de quedar en los puntos. Estoy seguro de que pronto podré pasar de la tabla baja, lo presiento.

—De todas maneras, quedé mejor que tú, Mick. —interrumpió Lance antes de que Checo le pudiera decir algo a Mick y se abrazó del otro lado de Checo, restregándose de igual manera que Mick en la otra curvatura del cuello de Checo. —Fue una carrera solida para mí, ¿verdad, Checo?