En un giro inesperado del destino, Vegeta, el orgulloso príncipe Saiyajin termina llegando a un nuevo mundo donde se convierte en el héroe del escudo. Sin embargo, queriendo aprovechar el momento de que ahora no habia nadie capaz de detenerlo, Veget...
Vegeta se encontraba caminando por los multiples pasillos del castillo, siendo acompañado por Malty y unos pocos guardias.
Vegeta: Entonces, ¿Cuanto mas falta por bajar?
Maty: Un poco mas, esta resguardada en las catacumbas mas solitarias del castillo, Rey Vegeta.
Vegeta: Tch, ¿Y a mi me dicen monstruo? Encerrar a una persona en un sotano tan profundo en este castillo es casi como decirle de una forma poetica que se pudra en el infierno, quizas debí acabar con ese insecto...
Malty: Mi padre no fue el responsable, Rey Vegeta, fue la iglesia.
Vegeta: Pues dame las gracias por no llevarlo al mismisimo infierno, en cambio solo esta en coma por su delicado cuerpo, en cuanto a ti... Sigo sorprendido que hayas preferido seguir a mi lado que escapar junto a los otros heroes pateticos.
Malty: Bueno... Quizas lo que dijo la otra vez era verdad, estoy a su lado por que reconozco su fuerza, es la ley de la supervivencia, ademas ya le dije, yo nunca estuve de acuerdo con ese chantaje de mi padre.
Vegeta: Ya no importa, como rey, necesito una verdadera mano derecha, y tu aunque tienes talento, no eres suficiente, si algo es verdad es que siendo un escudo no seré tan fuerte, por lo que necesito mas aliados, y siento que el Ki de la persona que esta aquí abajo es uno bastante aceptable para los estandares de este mundo.
Malty: ¿Ki?
Vegeta: Asi se llama la energia vital de un ser vivo en mi tierra, el tuyo es bueno, almenos mejor que el de los 2 guardias detras de nosotros, pero el de esa chica es de los mas altos del reino.
Vegeta y Malty llegaron al ultimo piso, siendo alumbrados por antorchas que lograban dibujar la sombra de una mujer de hermoso cabello rosado y ojos azules como el mar pero estando inconsciente.
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Malty: Es ella, Rey Vegeta, Eclair Seatto, la antigua mano derecha de mi madre, la reina Mirelia...
Vegeta se acerca a ella, rompiendo sus cadenas y atrapandola en sus brazos.
Vegeta: Hmm, esta debil, e inconsciente, ¿Hace cuanto que no la alimentan?
Guardia: Ve-vera... la iglesia de los 3 heroes ordenó que solo se le diera de comer una vez cada pocos dias.
Vegeta: Esa maldita iglesia... creo que iré a visitarlos despues. En cualquier caso, debemos llevarla a que descanse... Mein, ¿Puedo confiar en ti...?
Malty asiente con algo de miedo.
Malty: Si, Rey Vegeta.
Vegeta: Consigueme medicina y comida de inmediato, te espero en la antigua habitación que le dieron a esos tontos.
Malty: Si señor.
Vegeta sube denuevo las escaleras pero a una mayor velocidad, llevando a Eclair a descansar a una cama.
