¿PUEDES SANARME? [KOOKV]

Capítulo 5

En el siguiente capítulo habrán diferentes tipos de narraciones:

-Narrador omnisciente.
-Jeon Jungkook P.O.V.
-Kim Taehyung P.O.V.

Esto será para que puedan comprender un poco más a cada personaje.

Narrador omnisciente

Viajar hasta el edificio en construcción, en medio de la madrugada, no le pareció  tan mal idea al pelinegro.

Era algo fácil. Tomar su auto, manejar unos largos minutos, llegar, dar un vistazo al lugar y asegurarse que muy pronto podría comenzar la venta o alquileres de esos lujosos apartamentos.

Él era un Alfa llamado Jeon JungKook, dueño de los edificios y emprendimientos "Jeon".

Todos de alta gama, los mejores de Corea del Sur, y también podría decirse de Asia entera.

Al principio comenzó como una herencia de su padre, luego él se encargó de expandirse. Y por supuesto hizo un muy buen trabajo.

A sus casi veintinueve años era un Alfa que se daba a respetar, imponente y dominante. No hace falta aclarar que era uno de los más ricos.

La palabra "millonario"  le quedaba corta.

Una vez que revisó el lugar, se tomó unos cortos momentos para ir a la terraza y poder observar desde allí la vista que le otorgaba de la ciudad.

Debía y quería tener unos momentos de paz y tranquilidad. Pues no dormía bien hace dos meses aproximadamente. Entonces tomó varias bocanadas de aires, respiró profundo, y se deleitó con la hermosa vista de la ciudad nocturna.

Estaba por salir de allí cuando un aroma llamó su atención. Eran feromonas de tristeza, de algún Omega que seguramente andaba cerca. De otra forma se estaría imaginando todo.

Se dejó guiar por ese olor y segundos después quedó detrás de un joven peli rubio.

En su pecho, el corazón latió desesperado. Su lobo comenzó a saltar y correr de un lado a otro y su cuerpo se tensó.

El chico había atravesado la baranda y estaba, si no se equivocaba, a punto de saltar.

"No lo hagas"

Fue lo primero que se le ocurrió decir.

Lo primero fue racional, pues cualquier persona que estuviese frente a alguien que quería dañarse trataría de detenerlo, al menos con palabras. Pero había algo más, no tenía idea el porqué, pero tenía miedo de lo que le pudiese pasar a ese Omega. Era como una opresión en su pecho de tan sólo imaginarlo.

Más allá de los problemas que tendría si un cuerpo aparecía en el terreno del edificio.

Esto último ni si quiera pasó por su mente.

El rubio giró su cabeza y JungKook lo observó.

Tenía unas marcas de golpes en su rostro, sus mejillas húmedas, porque seguramente había estado llorando y sus labios partidos. Unas ojeras grandes se decoraban debajo de sus ojos, y estaba pálido, se notaba que había bajado de peso repentinamente.

Pero con todo eso, era la persona más bella que había visto a lo largo de su vida.

Y Jeon JungKook conocía a muchas personas y alrededor del mundo.

-Por favor- Habló el Omega con la voz temblorosa -Déjeme en paz-

Por más que el lobo de TaeHyung estaba tratando de responder, nada cambiaba demasiado.

Llegó hasta allí y debía hacerlo. No había ni habrá vuelta atrás.

Kook se acercó, sólo un paso, para no precipitar al contrario.