Instituto para rebeldes¹ | KookTae

Capítulo XXVIII

Días después

Los besos de Jungkook se regaban por todo su hombro, mientras ambos estaban abrazados en forma de cucharita, Jungkook se movía lentamente en el interior de Taehyung, era la segunda vez que lo hacían esa madrugada ya eran las 2am y en el dormitorio de Taehyung solo se podían oír los gemidos bajos de ambos entregándose al placer.

¿Dónde estaba SeokJin? Durmiendo bastante relajado en el dormitorio de Jimin, porque había una cama vacía desde que Baekhyun había sido expulsado.

"Eres hermoso" le susurró Jungkook sin dejar de moverse mientras lo abrazaba con fuerza.

Taehyung se sentía abrumado por tantos sentimientos, mientras Jungkook le decía cosas bonitas lo follaba lentamente, era bastante para él y sobre todo cuando a su vista estaba el menor con su cuerpo envidiable y bastante fornido volviendolo loco completamente.

"Kook..."

"¿Si mi amor?" le dejaba besos en su hombro y cuello succionando levemente.

"M-más duro."

Jungkook sonrió en su cuello para empezar a estrellar su cadera con fuerza en el trasero de Taehyung provocando sonidos secos en todo el dormitorio, su mano dejo de abrazar el abdomen de Taehyung y subió a su boca para taparla, el mayor era un tanto escandaloso pero a él le gustaba.

Taehyung miro sobre su hombro y aquella imagen fue suficiente para correrse por tercera vez esa madrugada, Jungkook miraba hacia abajo como su pene entraba y salía con rapidez, su mandíbula estaba apretada al igual que su labio inferior por sus dientes, los músculos de sus brazos se tensaban y las venas sobre salían al igual que su abdomen marcado. Taehyung lagrimeo por el placer que le otorgaba mirarlo de esa manera porque le encantaba y le llenaba de orgullo ser él quien hacia ver al menor de esa manera.

Jungkook levantó la vista viendo como Taehyung lo miraba con ojos brillantes y paro de inmediato quitando la mano de su boca.

"¿Que pasa? ¿Que tienes? ¿Estás bien?"

Taehyung sonrió y lo beso con tanta ternura.

"Estoy bien ahora, estoy mejor que nunca."

Jungkook sonrió y lo beso una vez más, ahora estaban bien.

[...]

Jungkook entro a su dormitorio, ya eran las 4am, se sentía un poco cansado de tanta acción, así que ni siquiera pensaba darse un baño, solo quería dormir, pero sus planes fueron interrumpidos por aquella mujer que lo esperaba cruzada de brazos resonando su tacón en el piso.

"¿Dónde estabas?"

"¿Mamá?"

"Te hice una pregunta."

"Y-yo estaba eh... en los jardines, no podía dormir" sus manos empezaron a temblar.

"¿Ah sí? ¿Sabes mi amor? E estado aquí por varias horas y además no te toca vigilancia hoy entonces ¿Por que mierda saliste?"

"Lo siento mamá."

La mujer descruzo sus brazos acercándose a él.

"No Jungkook, rompiste una regla y lo sabes."

Jungkook trago grueso, la mujer sonrió con malicia y estrelló su mano en la mejilla de su hijo.

Jungkook apretó sus ojos tratando de no perder la compostura, su madre tomo su mandíbula para hacerlo mirarla, pues la bofetada le había volteado la cara, con cuidado acarició la mejilla impactada.

"Mi pequeño, mi vida a mamá no le gusta las cosas mal hechas lo sabes ¿No?"

Jungkook asintió sintiendo el nudo en su garganta.

"No te castigare está vez pero la próxima vez no tendré compasión" soltó su mandíbula de manera brusca "Y duerme un poco, invite a la señorita Ji-eun a desayunar en nuestra mesa mañana es mejor que te acostumbres a su cercanía no sabemos lo que nos repara el futuro hijito."

Jungkook asintió perdido en algún punto en el piso de madera.

La mujer salió dando un portazo y solo ahí Jungkook entendió lo grave de aquellas palabras, su madre tenía algo planeado para él con respecto a aquella chica.

Paso las manos frustrado por su cabello sentándose en el borde de la cama.

Estaba jodido.

[...]

•Pov Taehyung.

Decir que no me levanté del mejor ánimo sería una completa mentira, estaba de maravilla renovado y feliz, claro que sí.

De camino a aquel comedor con mis dos amigos escandalosos.

No podía quejarme, este par de imbeciles era todo lo que estaba bien para mí, ellos y mi lindo conejito.

Entramos al comedor como siempre llamando la atención de varios, nos fuimos a una mesa mientras decidíamos que comer hoy porque si algo estaba bien en está cárcel es que la comida era variada y muy buena.

Tenía una sonrisa en mi rostro que nadie podía quitar nadie excepto aquella chica que ví junto a mi lindo conejito, esa que reía tocando su brazo como si se conocieran de toda la vida.

Está vez no perra.

Sentí la mirada penetrante de alguien sobre mi, voltee hacia aquellos ojos que me miraban con una sonrisa malévola, ¿Crees que me intimidas? Por favor.

La señora Jeon no dejaba de mirarme y yo a ella tampoco, entonces le guiñe el ojo con una sonrisa en mis labios, pude ver cómo su sonrisa se desvanecía lentamente.

Mire a Jungkook nuevamente él me miro con una tierna sonrisa y yo le guiñe pícaramente, todo bajo la atenta mirada de aquella mujer.

Conmigo no perra.