Academia para hombres (Jelsa/yaoi)

Cap. 1 "Llegada a la Academia"

Cap. 1 ¨llegada a la academia¨

Jack P.O.V.

La verdad soy muy parecido a él, claro, solo por el cabello y que el tenía los ojos cafés y yo gris-azules. Mi nombre es Jackson Overland Frost príncipe y futuro rey de bla, bla, bla...

- Me entendiste Jackson? Jackson? Guarda esa foto es una orden.

Bufé, mientras guardaba la foto de mi padre en el bolsillo de mi saco, ella es mi madre Meredith Clarisse Overland viuda de Frost y reina de Raimond. Lo que tiene de hermosa lo tiene de exigente, ha sido así desde que mi padre murió, pero no la culpo, eso nos cambió a todos.

- Repíteme lo que te dije.- dijo ella con esa voz llena de autoridad, mientras, alisaba la falda de su vestido entubado azul y se acomodaba su cabello platinado corto hasta la barbilla.

- Jackson, ya estoy cansada de los alborotos que provocas, si quieres ser el mejor rey, debes ser de todo el mejor. Y no quiero que en el primer semestre te expulsen- exhalé- no tengo otra opción.

Hubo otro silencio entre nosotros.

- Enserio, no sé por qué no te quedas en la casa de la fraternidad, ahí está tu hermano.

- No es eso, tengo mis propios asuntos y además no quiero compartir cuarto con él.

Mi hermano. Aster. La verdad ya tenía que venir a esta escuela por obligación, pero ahora por culpa de él y su "amor verdadero" yo tengo que dirigir como futuro rey nuestra nación, mientras que él dirige Firestone con su esposa Thootiana Fairy.

Minutos después pude divisar la academia tras unos árboles, no lo voy a demostrar pero estoy nervioso, mi padre ha sido de los mejores reyes; el mejor amigo, estudiante, deportista y... padre, todos quieren que sea como él pero... ¿Quién quiere que sea yo en realidad?

Elliot P. O. V.

- Demonios- dije mientras intentaba ajustar la corbata.

- Vamos, te ayudo- dijo Anna- listo.

- Gracias, Anna.

- Príncipe Elliot, estamos a punto de llegar- dijo el chofer.

- Elliot?

- ¿Sí?

- ¿Crees que podremos vernos mientras estamos aquí? - dijo a punto de llorar.

- Claro que sí, te veré todo el tiempo que pueda o solo llámame.

Nos acercábamos a la academia. No quería ir, no ahora, hoy se cumple un año de la muerte de mis padres. "No puedo" es lo que decía desde los 17 años, había hecho un desastre mi habitación ese día. Mis padres dejaron los papeles listos para mi inscripción académica antes de su muerte, y todavía siento que es mi culpa.

Sentí unos brazos rodearme, cuando volví la vista lo único que me mantenía a flote en esta vida me estaba abrazando, Anna.

- No sé por qué todavía usas esos guantes - decía mientras trataba de quitármelos, pero los aparte.- No le harás daño a nadie.

- Eso lo sé, pero es por seguridad... y además...- alargue la palabra mientras me rascaba la nuca, y ella comenzó a reír.

- Elliot, ¿no te has quitado la pintura de...?

- Shhh! - le chisté - no, no me lo he quitado, la verdad es que me gusta.

- Oh, entonces ...- empezó a rebuscar en su bolso y saco un esmalte de uñas color azul rey- ten.

- Emmm...gracias.

Pasaron unos segundos y nos detuvimos, esperando a que las rejas de la academia abrieran.