13-Un amor de loba (+18)

2.1K 109 17
                                    

El ambiente no podía ser mejor para la pareja. Enid suspiraba con cada beso que le daba en el cuello su chico. Tn acariciaba su piel de tal forma que la loba sentía una sensación única. No era un experto en ello, pero trataba de hacer lo mejor posible esos mimos. Enid al notar las manos de su pareja solamente dejaba escapar suspiros. 

—Enid...te quiero—susurraba en su oído haciendo que ella se mordiera la oreja.

Luego, acarició sus muslos mientras bajaba y subía por la zona. La loba se quitó la camiseta dejando ver su sujetador que no tardó en desprenderse de el. Normalmente cubriría con su brazo sus pechos, pero en esa ocasión no. El chico también se quedó desnudo de cintura para arriba antes de ponerse a succionar ambos pezones.

—Dios...Tn...eres tan...—se mordía la mano mientras con la otra le mantenía el agarre de la cabeza a su pecho.

Durante largo rato estuvo allí hasta que la rubia le tumbó para colocarse encima ya sin ropa pues Tn se lo quitó aprovechando su posición. Él hizo lo mismo, ambos estaban desnudos. La piel desnuda de los dos frotándose el uno con el otro era maravillosa. Pero Enid, que sentía como estaba empapada y excitada debido a la situación y estado de celo, deseaba llegar hasta el final. El chico, ruborizado por la imagen, sentía que iba a estallar. Necesitaba amarla, besarla y comerse a esa mujer que tenía por novia.

La joven estaba mirando a su chico, se retiró unos mechones sudados que se habían pegado a su frente. El chico alargó la mano y sacó del bolsillo con las manos algo temblorosas un preservativo. Estaba nervioso, su corazón latía con fuerza y a ritmo rápido.

—Tranquilo—dijo ella tomando sus manos—relájate—su sonrisa calmó un poco al chico.

—Si...si...yo...¿Enid?—el chico vio a la loba bajar lentamente su cuerpo hasta su entrepierna—¿qué vas a...?—dio un pequeño grito ahogado.

Nunca pensó en que Enid haría tal cosa, sus piernas temblaban y sus ojos que apenas le dejaban ver, contemplaron la cabeza de la loba subir y bajar con ritmo. El chico pensaba que su alma iba a salirse de su cuerpo y morir.

Dejó el preservativo a un lado y colocó sus brazos sobre su rostro para taparlo. Le daba mucha vergüenza la situación.

—Me encanta las caras que pones—escuchó decir antes de seguir de nuevo.

Tras un rato que se le hizo glorioso, ella se colocó encima de él y con el dedo en la boca, le pidió tiernamente si podía comerla allí abajo.

—Sino quieres lo entenderé porque...—el chico no le dejó seguir y ahora hizo lo suyo.

El amor que sentía por él, el estado de celo y la excitación del momento hicieron que Enid tuviera unas ganas locas de gritar muy fuerte de placer. Pero no podía hacerlo así que se apoyó en el cabezal de la cama mientras toda su fuerza la enviaba a no gemir y que la escuchasen en el lugar. El chico dio todo para complacer a su loba.

—Bien, ya está—dijo Enid retirándose, aunque no quería ya que le encantaba sentir la lengua del joven en su entrepierna.

Tn se colocó el condón y luego, ella se puso encima. Ahora eran uno. Ella lo besaba mientras movían sus caderas. Entre beso y beso, cuando se producía ese pequeño espacio de milímetros, los dos dejaban escapar sus gemidos antes de volver a besarse.

La chica movía sus caderas con intensidad, el chico sentía que moriría de placer. 

Así estuvieron un buen rato, frotándose piel con piel hasta que éste avisó que iba a llegar a lo que ella le mordió lentamente su labio y le dijo que adelante, que lo hiciera. Tras unos cuantos embistes más, apretó los dientes mientras dejaba salir todo.

Ahora, sudados, ella sobre él, sintiendo el corazón latir del otro, descansaban.

—Ha sido...maravilloso—decía Tn recobrando el aire.

—Para mí igual...y quiero hacerlo de nuevo

—¿Eh?

—Anda...necesito una buena sesión de mimos.

El chico miraba esos ojos, esa carita y esa sonrisa...no podía negarse, aunque su salud estuviera en juego por la pasión que mostraba la loba cada vez que movía sus caderas.

—Bueno...supongo que podemos hacerlo...

—¡Ese es mi chico!—le dio un sonoro beso en los labios—prepárate porque te voy a comer y hacer el amor de una forma...lo voy a gozar...como no puedes imaginar...

—¿Enid?—ella se abalanzó sobre él.

Al cabo de un par de horas, la loba dormía plácidamente sobre su chico con una sonrisa mientras que el joven estaba completamente agotado. En los muslos tenía agujetas y apenas podía moverse sin sentir un pequeño dolor. La cadera también había sufrido un poco.

En la mañana, Tn despertó poco a poco cuando sintió algo en su mejilla. La loba le estaba dando muchos besos de buena mañana.

—Holiii—estaba muy feliz.

—Buenos días—al intentar moverse sintió un dolor—uff...

—Lo siento, fui muy bruta en nuestro...¿cuántas veces lo hicimos?, no sé, perdí la cuenta en la tercera—dijo feliz—ay, no te preocupes, solamente necesitas descansar.

Esa mañana la pasaron en la cama viendo películas, principalmente porque el pobre no se podía apenas mover y tuvo incluso que comer ahí. 

Ella estaba abrazada al chico mientras disfrutaba de su compañía. Mientras que él estaba agotado, la loba parecía tener mucha energía de buena mañana.

—Ahora clases—dijo tras la llegada de nuevo de clases.

Miércoles miraba a Tn quien estaba caminando con dificultad y a paso lento.

—Deberías cuidar tu salud o morirás. Y yo que pensaba que morirías de manera brutal y sangrienta—comentó la pelinegra.

—No seas mala con él—dijo Enid ruborizada—lo da todo en nuestra relación.

—Deberías tratar mejor a tu juguete o morirá

—No es mi juguete, es mi chico—abrazó a éste—y es el mejor novio del mundo.

Ambos continuaron caminando hasta las clases mientras Miércoles miraba a los dos desde unos cuantos pasos más atrás. Entonces sintió a la mano salir de su mochila y colocarse en su hombro.

—Le doy tres días a este paso. Pero mira, podremos enterrar un cuerpo. Aunque de momento es bueno para nosotros porque así la loba está ocupada y tenemos tranquilidad en la habitación, ¿no piensas igual que yo?—la mano levantó el pulgar—en fin, otro día de aburridas clases con sus estúpidas preguntas.

Continuará...

El chico nuevo-Enid x TnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora