El examen de admisión

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Joshua: Tengo ambre

Cerebro: Trabaja, esclavo *Lo azota*

Joshua: Coño, chamo. Tengo ambre

Cerebro: ¡¡MORITE, POBREEE!!

Bueno, obviando la esquizo ¿Como anda la cosa :D?

*Nadie le responde*

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Un almacén abandonado era visible en el centró de un bosque, del dichoso almacén, la puerta metálica fue abierta con algo de cuidado por un adolescente con un sacó y pantalones negros, este mismo se acomodó una corbata roja que estaba sujeta en su cuello y dio un largo suspiró, mirando a lo lejos el amanecer a la distancia.


Yamikumo: Bien... Es mi turno de actuar ¡Animos! -Dándose ánimos a si mismo, emprendió su largo viaje hasta Musutafu... Tardaría bastante en llegar, pero no había prisa. El examen comenzaría en tres horas-


Narra Yamikumo:


"Mi nombre es Atakani Mikumo, tengo 15 años y mi estatura es 1,73.... Un centímetro más que el promedió en Japón, con eso me basta."


El pelimorado caminaba a paso tranquilo por un sendero aplanado y remodelado que daba caminó a la salida del bosque. dicho caminó fue hecho gracias a varios Alternos del Izuku Raíz.


Trabajaron día y noche para aplanar, despejar y nivelar el caminó... De regaló, todos obtuvieron una paleta de hielo con sabor a frutillas.


"Vivo en el bosque Otainai Seikoen en la prefectura de Shizouka, se cuenta que hace años que el lugar dejo de ser transcurrido por visitantes, gracias a las historias que se cuentan de allí, se volvió un buen lugar para la Base fuera del ojo público... Al menos, eso me contó el Izuku Raíz"


El pelimorado salió del profundo bosque, inhalando profundamente el aire a sus alrededores para así, comenzar a dirigirse hacía la ciudad, a su vez, ignorando a las personas y estudiantes que pasaban a su lado, siendo que todos se dirigían al mismo destinó.


"Mi vida antes era simple bastante, siendo un esbirro de All For One, fui un infiltrado en la U.A como su segundo espía de confianza para estar listo en el exterminio de los héroes, una guerra que jamás llegó para mí debido a mis situación actual, sin embargo, lo prefiero así. Mi vida en mi antiguo hogar se había vuelto la de un típico escolar con sus compañeros castrosos"


El pelimorado, al igual que muchos estudiantes a su alrededor, estaban esperando pacientemente en una estación de metro, notando como algunos juguetean y hablan entre ellos.

Deseo de un país igual para todosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora