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Salió de su casa a las diez y media, el camino a casa de Beomgyu estuvo tranquilo y libre de tráfico, por lo que llego cinco minutos antes de la hora acordada.

Taehyun no era una persona nerviosa, y si sentía nervios le divertía.

Vio salir al omega justo a las once y sonrío sin que lo viera.

-Hola- saludo tímido Beomgyu.

-Hola ¿Cómo estas?

-Bien... Se ve muy bien.

-Igualmente, podrías dejar de hablarle con formalidad, eres mayor que yo después de todo.

Beomgyu llevaba un pantalón blanco y un cardigan verde, se veía más bonito de lo normal.

-Oh, claro, te diría lo mismo pero veo que ya lo haces.

-Lo siento, costumbre.

Ambos subieron al auto, Taehyun podía oler el nerviosismo de Beomgyu, de cierta manera me gustaba, a decir verdad, no sabía a donde ir, nunca tuvo una cita fuera de su casa o de la casa de Jungwon, por lo que la socializacion para el era un tema complicado, y llevar a Beomgyu a su casa no era una opción.

-¿Desayunaste?

-¿Ah? Claro ¿Y tu?

Taehyun asintió- ¿Te gustaría ir a una cafetería?

Había cierta incomodidad en el ambiente, y una tensión para nada buena, ni siquiera sabía como cortarla, o como iniciar un tema.

-¿Tienes omega?- pregunto el mayor, intentando hacer conversación.

-No- sonrío con amargura- digamos que una experiencia pasada me dejo con una mal visión hacia los omegas.

-Oh, entiendo.

-Pero mi hermano y ahora también tu son la excepción- mintió, claro que lo hizo, pero debería ganarse la confianza del maestro, supo que lo estaba haciendo cuando avergonzado y sonrojado evitó la mirada del alfa.

-¿Qué ocurrió?

-Me traicionó, se embarazo de otro...- solo diría eso, no podía decirle que lo mato y que por su culpa su padre estaba muerto- y se fue, también dejó al otro.

-Lo siento.

-No, yo no, si se fue, fue por que no di lo mejor de mi- y mentía, el Kang Taehyun que conoció Jungwon era el mejor Kang Taehyun que el mundo podía haber visto- ¿Y tu?- Taehyun le abrió la puerta de la cafetería y lo dejo pasar- ayer dijiste que tampoco tenías buenas experiencias con los alfas.

Beomgyu soltó una risita- bueno, no con todos, pero uno me hizo tener una mala visión.

-¿Qué te hizo?

Se sentaron en una mesa, el pelinegro noto que fueron el centro de atención en cuanto llegaron, pero vamos que esperaban, ambos eran alfa y omega puro, y la belleza que irradiaban juntos era majestuosa, simplemente difícil de describir.

-Fue una relación de casi un año, nos conocimos en la universidad...- suspiro, aun tenía un sabor amargo sobre Heesung- y bueno, el era un alfa, supongo que con eso lo digo todo.

-¿Se quiso aprovechar de ti?

-Si... Su celo llego en una cita en su casa, de no haber sido por su hermano lo hubiese logrado, termine con el, pero me siguió acosando, y mis padres... Bueno, soy hijo de dos alfas y al nacer omega fui una decepción- eso explicaba el que fuera un omega puro- así que lo que pasará conmigo no importaba, ni importa para ellos.

-¿Por eso odias a los alfas?

-Mi familia me hizo tener esa ideología, mis padre alfas, me odian, y el único alfa con el que salí, no entendió que aun no estaba listo, el ya quería una familia, yo quería un futuro.

-¿Y ahora?

-¿Eh?

-¿Estas bien ahora?

-Si... Tengo el futuro que quería, cuido niños y aun no tengo una marca en mi cuello, solo quería saber si yo podía ser un buen padre, dicen que los omegas nacen preparados... Pero yo nunca me sentí así.

-También dicen que los alfas nacen preparados para dar bebes, y yo nunca he sentido la necesidad.

-¿Ni con un sobrino tan lindo como Soyun?

-Con ese es más que suficiente.

-Vaya... Eres increíble.

Siguieron hablando de su vida, Taehyun claramente evitando ciertos detalles, aunque Beomgyu prácticamente ya le había contado todo de si, Taehyun se dio cuenta de que le gustaba escuchar hablar al omega, después de todo su personalidad no era tan molesta.

Todo iba bien, hasta que Taehyun sintió el gran golpe de calor, era estúpido por que sabía que su celo llegaría en un mes, por eso invito ese día al omega.

-Creo que es hora de irnos.

-Si, son casi las seis... ¿Te sientes bien? Estas sudando.

-Si... Te dejo en tu casa.

Beomgyu asintió confundido, el camino a la casa del mayor fue eterno para el alfa, y cuando por fin llegaron ni siquiera se quería ir.

-Oye estas bien ¿No quieres pasar por un vaso de agua?- Taehyun negó- Oh... ¿Estas en celo?

-Entra a tu casa por favor- pidió agitado.

-Bien, hasta luego Taehyun... Eres un gran alfa- Choi estaba seguro de eso, cualquier alfa se hubiera aprovechado de su confianza y hubiera terminado abusado y probablemente con cachorros, así que simplemente agradeció al menor y entro a su casa, para ver como se iba el carro, solo rezaba por que llegara con bien a su casa- que día tan más bonito...

Entro rápidamente a su casa, no era alguien que pasara su celo solo, y sin embargo no quería a nadie, el único que en esos momentos lo calmaría lo dejo ir hace unos momentos y le llamo gran alfa por ello.

Llamo a Hueningkai para que no fuera a su casa en los siguientes cinco días y se encerró en su habitación, después de eso, ni siquiera recordó lo que había pasado, probablemente durmió en los tres días siguiente y solo se bañaba, por que ni siquiera comió, y cuando a los tres días se sintió mejor tomo supresores, y se cocinó, para el quinto día ya estaba siendo el mismo.

-Tío ¿Te enfermaste?

-No, pero quería estar solo.

-Ya veo... El maestro Beom olía a ti.

Eso hizo que el ego del alfa se aumentará, Beomgyu no se quito su aroma, y eso le encantaba.

Continuará...

MAESTRO DE PREESCOLAR~TAEGYU  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora