Una flor de loto en un estanque de agua

Capítulo 03 | Fantasmas

FANTASMAS

🌸✧―――✧ BECKY ✧―――✧🌸

Unas manos tapan mis ojos de repente.

―Hola, baby ―susurra en mi oído.

Freen besa mi cabeza y luego quita sus manos para sentarse a mi lado. Me hace sonreír como tonta.

―Hola ―digo robándole un beso en los labios.

Ya no me avergüenza mostrarle mi amor en público, aunque Irin y Min no pierden oportunidad de burlarse de nosotras cada vez que nos ven hacer algo como esto.

―¿Quién diría que convertirías a mi amiga en esto? ―acusa Irin a Freen, sacándole una sonrisa.

―Todavía pienso que estoy soñando ―dice ella mirándome de esa forma que me deja ver lo enamorada que está de mí.

―¡Hola chicas! ―saludan a nuestras espaldas.

Son Nam, Baitoey y Noey. Irin se pone muy feliz con solo verla, estira sus brazos como una bebé hasta ella y la obliga a sentarse a su lado, es peor que yo y se atreve a burlarse de mí.

―¡Listas para la noche de karaoke! ―dice Nam levantando sus manos como si fuera una porrista.

―¿Quién quiere oírte cantar? ―dice Baitoey.

―El dueño de The roof cerrará el lugar con tal de no oírte jamás ―continua Noey.

Todas ríen en la mesa, incluso Nam, aunque no sin antes golpear a sus amigas.

―Yo no podré acompañarlas ―dice Freen tomándome de la mano.

―¿Qué? ¿Por qué no? ―pregunto decepcionada.

Está salida era precisamente para poder estar todas juntas.

―En un par de días sale nuestro a autobús para Isan, y aún no acabo mi trabajo, trabajaré en ello toda la noche.

No me gusta como suena eso, entiendo que este evento es importante para ella, pero tiene semanas trabajando en las pinturas que va a presentar, hasta donde tenía entendido ya las había terminado.

―¿No las habías terminado ya? ¿Por qué hacer todo en una sola noche? ―suelto sin disfrazar mi decepción y preocupación.

―No estaba satisfecha, empecé de nuevo y no he terminado ―dice con pesadumbre.

La miro con detenimiento, sus ojos parecen cansados.

―Freen...

―Te has estado exigiendo demasiado ―reprende Baitoey―. Las pinturas eran excelentes.

―No lo eran ―dice ella.

―No puedes desvelarte tanto, te vas a enfermar ―digo.

―Pronto acabará, dormiré cuando regrese ―dice con una sonrisa cansada.

―¿Y has comido al menos? ―ella esquiva mi mirada, asiente pero sé que es mentira―. Freen...

―Estoy bien ―contesta tajante.

―Pareces un zombi ―dice Nam.

―Dejémoslo para mañana ―dice Noey―. Así Becky puede convencerla de acompañarnos.

―En verdad no tengo tiempo chicas ―insiste Freen.

Noey me dedica una mirada especifica que entiendo a la perfección. A pesar de lo que diga, debo convencerla, por el bien de su estado emocional. Necesita descansar y distraerse.