sálvame

capitulo 13

                          

                              Jungkook

Jungkook se sentó a la mesa y releyó la nota. Jin no había regresado de su paseo.

Jungkook se despertó tarde, encontró la nota, se duchó, se vistió y calentó el café que Jin había preparado, pero a medida que los minutos se convirtieron en horas, una sensación de inquietud se apoderó de sus entrañas.

¿Quizás Jin se había retrasado en la consulta del médico?

Jungkook no pudo sentarse y esperar un momento más. Salió de la cabaña, salió corriendo del complejo y bajó la calle hacia la casa de la doctora Mia. Le palpitaba la pierna: los analgésicos habían desaparecido durante la noche. Pero eso estaba bien, probablemente encontraría a Jin charlando con Mia, y luego, una vez que tomara los medicamentos, irían a buscar algún lugar para desayunar juntos.

Durante el desayuno, discutían todo . Después de anoche, las cosas habían cambiado para mejor. Finalmente estaban hablando, como deberían haberlo hecho hace semanas..

“¿Tu amigo Jin?” Preguntó Mia, encontrándose con Jungkook en su porche. “No lo he visto. Pero puedo darte la medicación. ¿Cómo te sientes? ¿Algún efecto secundario de los analgésicos que tomó ayer?

Le dio las gracias y esperó a que regresara con las tablillas y entrecerró los ojos hacia la iglesia al otro lado de la calle. Si Jin hubiera regresado al resort, jungkook lo habría visto caminando. ¿Quizás había dado un paseo por la playa?

"Aquí tienes", dijo Mia. "Tomar dos tres veces al día con la comida".

Le dio las gracias de nuevo, le dijo que volvería más tarde y luego se dirigió a la playa, donde tragó las pastillas en seco y cojeó por la arena. Escaneó debajo de cada sombrilla en busca de la figura distintiva de Jin, pero no estaba en la playa. Tampoco estaba en el jeep y tampoco estaba en la casa de la playa.

Jin no estaba por ningún lado.

De pie en la calle frente a la iglesia, calentándose bajo el sol, jungkook volvió a comprobar la nota.

Hola, jungkook.

Estoy dando un paseo.

Tomaré tus medicamentos del doctor.

Seokjin

Amor mío, x

Habían pasado horas.

Y no había llegado a casa de la Doctora Mia.

Algo le había pasado entre el resort y la ciudad. Jungkook podía sentirlo por dentro , podía sentir la ausencia de jin.

"Te ves mejor".

Jungkook entrecerró los ojos hacia las escaleras de la iglesia y vio al hombre de cabello gris que le devolvía la sonrisa. La pestaña blanca en su garganta estabatanto familiar como, en un nivel menor, alarmante, como si este sacerdote supiera instantáneamente todos los pecados que Jungkook había cometido en las últimas semanas y meses. Por supuesto que no podía saber quién o qué era jungkook, ¿verdad? “Oh, sí, padre. Yo uh… ¿Has visto al hombre con el que llegué?

"No desde ayer". Bajó lentamente las escaleras. “Soy el padre Federico. ¿Eres Jungkook?

¿Cómo supo su nombre? Eso estuvo mal, ¿no? Se suponía que no debían usar sus nombres reales. Jin debió habérselo dicho, pero ¿cuándo y por qué?

"No te preocupes." El padre Federico se dio unos golpecitos en la nariz. "Estoy en el negocio de guardar secretos".

Jungkook casi se rió. Pocas personas sabían guardar secretos tan bien como los sacerdotes. Federico parecía amable y había ayudado ayer, pero el padre Davis también parecía amable, haciéndose amigo de jungkook justo antes de entregárselo personalmente a Yoongui.