Capítulo único.

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Checo no era celoso, para nada. Podría decirse que su antiguo yo era posesivo y muy celosos con sus ex-parejas, pero había madurado lo suficiente para dejar de celar. Había aprendido que ser celoso era desconfiar de su pareja y él no desconfiaba de Max, ambos se amaban mucho como para incluir un tercero.


Aun que a Max le pasaba diferente, él no desconfiaba de Sergio, nunca lo haría. Pero si tenía miedo que alguien más llegará y se lo quitará, checo le dijo que sólo lo iba amar a él y a nadie más...Pero puede cambiar de opinión, aún que si llegará a pasar Max lo dejaría ir con todo el dolor de su alma, si otra persona lo haría feliz el no podía negarse a no soltarlo.


Posiblemente no al momento pero si lo haría.


La temporada había comenzado y los red bull causando terror con el inicio, la diferencia con otras escuderías eran abismal. El monoplaza de los toros parecía estar ha años de Ferrari y los demás, aún que podían darle batalla.


La carrera de jeddah había concluido y con 1-2 de la escudería red bull. Max parecía estar a otro nivel al igual que su novio, que fue penalizado injustamente pero igual lo dio todo quedando segundo. Checo y max tuvieron que hacer su deberes con la prensa, después marketing y ver las estadísticas de la carrera, fue un día agotado y no daba tiempo de celebrar nada. Todavía le falta una entrevista más, pero esta iba hacer al aire libre y más tranquilos.


Era una chica que iba hacer las preguntas, Sergio se bajo el cierre para que el mono ignifugo cayera hasta su caderas y se quedará ahí, con la camisa negra de red bull abajo. Esas camisas no le gustaba mucho al mexicano, se le pegaban demasiado a su cuerpo...a sus pechos más que todo. Pero a Max le encantaba, como deseaba poner sus manos encima de Sergio y volverlo suyo de nuevo, pero no podían, tenían que terminar esa entrevista.


Los dos pilotos se apoyaron en un barandal y comenzaron la entrevista, las mayoría de las cosas que pregunto la chica ya lo habían respondido antes a la prensa. Sergio quería que terminará de una vez para irse a dormir, paso una mano por su rizos negros y la otra tenía aguantado un mini microfono, era lindo, pero a su novio le parecía gustar más. Max parecía escuchar a la mujer atentamente pero movía su dedos pasando por la fibra suave que tenia el micrófono, Sergio alzó una ceja, pero volvió a su atención a la chica rubia.


No tardo mucho en desviar su mirada a las manos de su novio que todavía seguía tocando el micrófono, checo sólo apretó los labios. ¿Que diablos? ¿Estaba sintiendo celos de un micrófono?, respiro y trató de no ver más las manos de Max. Pero el holandés seguía respondiendo las preguntas y al mismo tiempo tocando el mini microfono, parecía estar tan concentrado en eso que ni lo miraba.


Maldito micrófono le estaba quitando la atención de su novio.


La entrevista estaba llegando a su fin y la entrevistadora le pregunto a Max si le habia gustado el mini microfono.


—Si, es suave como un hámster —, le dice a la chica para después sonreír y alejarse, pero antes devolver el micrófono a la rubia. La entrevista estaba concluyendo. Pero todavía no habían apagado la cámara y asi quedó grabado en video el comentario que dijo el mexicano —Es que se enamoró del micrófono —, lo dijo con un poco de recelos en su voz.


Checo siguió a Max.


El holandés ver que estaban lo suficiente lejos de algunas cámaras se le acerco un poco. —¿Es enserio? ¿Te pusiste celoso de un micrófono? —, checo lo miro con una ceja alzada y desvió sus ojos haciendo un mini puchero, para despues caminar más rápido y desaparecer de la vista del holandés. Max se quedo aturdido por unos segundos, nunca había visto a checo celoso ¿Y sólo por un objeto?. Se rió. Le pareció un poco divertido y adorable.


Sergio paso por su sala de conductor para recoger algunas cosas y irse al hotel, al llegar a su habitación compartida con su pareja. Lo primero que hizo fue irse a bañar antes que Max llegará, quería dormirse y esquivar cualquier pregunta o burla de su novio. Terminó de tomarse una ducha y se metió entre las sábanas del hotel, hundiendo su cuerpo en ella.


No pasó más de diez minuto para escuchar un clic y después la puerta abrirse, Sergio sólo apretó sus ojos y se hizo el dormido.


El holandés miro la silueta de su novio pero no se acercó, primero tomo una ducha y se cepillo los dientes.


Sergio sólo sintió como la cama se hundía detrás de él y un cuerpo se acercaba al suyo, haciendo contacto, y las manos de Maxie rodeaban su cuerpo. Checo soltó un suspiro y inclino su cuello a un lado, invitando a máx a meterse en él. El holandés no desaprovechó la invitación pero también comenzó a dejar beso en la nuca y cabello del mexicano, los celos habían pasado pero no del todo.


—Te amo, ¿Lo sabes, verdad? —, le dice a Sergio contra su nuca. El mexicano no tarda en girar su cuerpo y aferrarse al holandés como un Koala, metiendo su rostro en el cuello de Max y comenzar a besar, todavía podía sentir el olor del jabón en él. —Si, lo sé.


Hubo un silencio cómodo entre los dos, sólo se podían escuchar el aire acondicionado y sus respiraciones sincronizadas.


—¿Sigues molesto? —, le preguntó a Sergio. Hubo una pequeña risa que provenía del mexicano, Max lo alejó y miro el rostro lleno de pecas de su novio, como amaba eso de él. Sergio miro los ojos verdes que le encantaba para después negar. —No, ya no. —volvió a meter su rostro en el cuello de su novio, max sólo lo acerco más a él.


—Me parece curioso, que no nunca me celaste con una persona, pero con un objeto, si —, se echó a reír, Sergio se quejó, no le gustaba que se burlara de él. —Me estaba quitando toda tu atención, estúpido micrófono, la próxima vez lo quemó.


Max se volvió a reír y comenzó a pasar su dedos por el cabello de su novio.


—Nadie te quitaría mi atención, cariño, nadie —, lo volvió a apartar pero esta vez para mirarlo a sus ojos marrones, y darle un pequeño beso en los labios. —Claro, pero esa cosa parecía que si quería tu atención.


—Eres tan lindo cuando estas celoso, celame más seguido.


Sergio se intentó apartar por la pena que estaba sintiendo pero esté sólo lo acerco de nuevo para besarlo, después besar sus mejillas, pecas, frente, cuello. —Vamos a dormir mejor, esto cansado, mañana sigues con tu celos por el micrófono.


—¿Te estas burlando de mi?

—No

—Si lo estas haciendo

—No lo hago


Después de un rato de "Si" y "No" no se escucho respuestas de Sergio, Max después de unos minutos sólo escuchó pequeños ronquidos. Abrazó al mexicano más hacia él, debió de estar demasiado cansado, lo besó por última vez y se dejo llevar también por el sueño.

The mini microphone / ChestappenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora