Capitulo 4: El inicio inesperado de algo nuevo

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Un encuentro inesperado

En un día aparentemente ordinario para Leidy Jazmín, donde parecía que nada nuevo iba a suceder, ocurrió lo inesperado. ¿Qué fue, se preguntarán ustedes? La gran mayoría de lectores ya se imaginará que se encontró con Tomás, pero vamos a contar desde el principio...

Después de leer unas páginas del libro "Basta de amores de mierda", como solía hacer en sus tardes, Leidy Jazmín fue al supermercado porque su abuelo le pidió que comprara bombillos para su casa. Entró con un poco de desánimo, sin comprender por qué se sentía así esos días. Al llegar, vio a lo lejos a un chico que le sonreía. Ella continuó como si nada, buscando los bombillos, sin prestar mucha atención al chico. Al no encontrarlos, preguntó a la cajera; esta le dijo que se encontraban al fondo, al pie de los jabones. Leidy Jazmín seguía caminando en el supermercado y el chico no le quitaba la mirada de encima. Al encontrar y elegir los bombillos que iba a comprar, se acercó a la caja y allí vio que el chico que tanto le sonreía de lejos se acercó a ella. A pesar de ello, ella continuó sin prestarle atención y pensó: "ese chico también va a llevar un producto del supermercado". Pero al ver que se acercaba tanto, ella dio un paso a un lado. Recordemos que Leidy Jazmín no le prestó mucho cuidado desde el comienzo. En la caja, vio que la cajera lo estaba mirando a los ojos y le dijo: "Oye, ¿Qué haces aquí parado si no vas a comprar nada?" El chico le contestó: "Oye, pero si estoy derecho". Leidy Jazmín, toda tímida, ni lo miró; solo se alejó, dio el dinero, recibió los bombillos y le dio las gracias a la cajera por atenderla, y se fue. Le pareció rara la actitud del chico, pero no le prestó mucha atención porque en el pueblo donde vive con su madre solía ser mirada y pispeada por muchos debido a su físico, por eso no le dio mucha importancia a ese acto en ese momento.

Leidy Jazmín siguió con normalidad su día: entregó los bombillos a su abuelo, cenó, vio una película, luego se fue a dormir, etc. Al día siguiente, por la mañana, se levantó pensando en la actitud del chico. Le escribió a su amiga Verónica contándole todo lo sucedido y expresando que posiblemente le estaban coqueteando, pero por su inexperiencia en el amor no se había dado cuenta. Su amiga, emocionada por el suceso, se imaginó la escena y se alegró mucho por ella, al ver que después de un tiempo la veía emocionada por otro chico, aunque ni siquiera todavía se conociera su nombre. Este suceso le ayudó a encender una chispa en su corazón, que al parecer se había apagado bruscamente con actitudes y hechos nada agradables.

Obviamente, Leidy Jazmín no creía que algo así le pudiera volver a pasar a ella y pensaba que todo lo estaba imaginando, ya que ella tenía mucha imaginación y solía ilusionarse sola con cualquier chico.

Pero ustedes, ¿Qué opinan? ¿Creen que todo fue producto de un sueño? o ¿Qué este suceso, aunque fuera pequeño, si le pudo haber pasado a Leidy Jazmín?...


Continuará...

Con la confirmación del encuentro, Leidy Jazmín se encuentra ante una nueva y emocionante posibilidad en su vida amorosa. ¿Será este el comienzo de una historia de amor inesperada? ¿O simplemente un breve pero significativo momento en su camino hacia la sanación y el crecimiento personal? Acompáñala en el próximo capítulo mientras explora esta nueva atracción y las emociones que despierta en su corazón, navegando entre la incertidumbre y la esperanza en busca de la verdadera felicidad.  

A Través de tus Ojos: El Amor en Cada MiradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora