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----Ya llegamos---- Dejando tirado a el menor a un costado de la puerta, y dandose cuenta que ya se había dormido después de ser ramiado por el suelo un largo rato.

----Buenas noches joven ¿Quiere que prepare otro futón para su compañero?---- Preguntaba la anciana dueña de la casa, que trabajaba para la compañía cazademonios.

----Si porfavor---- Empezó a desatar las cuerdas del cuerpo de Iguro y procedió a sacarle los zori (es un tipo de zapato japonés pueden ser de madera o de goma y tela).

----Ya está listo joven, que duerma bien---Y se retiró.

Giyuu recostó a Iguro sobre el futón mientras este se iba despertando y procedió a cambiarse de ropa.

----¿Despertaste tan rápido?---- Decía mientras se desvestía.

----¡Qué estás haciendo!¿Al menos podrías ir a cambiarte a otra parte?----

----Entonces no mires, ah y por cierto, también deberías ir a cambiarte estas lleno de tierra----

----Eres un idiota la próxima vez serás tú quien ramiará por el suelo----Dijo último y se fue al baño de la habitación llevándose su ropa y a Kaburamaru consigo.

NARRA GIYUU

Se que Oyakata-sama quiere que Obanai y yo nos llevemos bien, pero el lo está haciendo todo más difícil. Ya he aguantado los insultos de Shinazugawa y Obanai por mucho tiempo ¿Podré soportarlos más?. No importa, por Oyakata-sama...haré todo lo posible para llevarme bien con al menos uno de los dos para que pueda estar contento, lo hago por el...solo...por el.

----Nos turnaremos todas las noches para recolectar información sobre los demonios, yo iré esta noche y tú irás mañana.

----Si ---- Iguro se fue y Giyuu se quedó tranquilo al ver que no le había gritado ni insultado y sobre todo que esa noche no iba a ser tan incómoda. La casa en donde se quedarían no era muy grande pero tampoco muy pequeña, tenía una habitación para tres con baño y una habitación con baño que quedaba en la parte tracera que le pertenecía a la anciana, una cocina y el comedor, la sala y un patio espacioso.



Dos semanas ya habían pasado desde que llgaron y ahora le tocaba a Giyuu recolectar información

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Dos semanas ya habían pasado desde que llgaron y ahora le tocaba a Giyuu recolectar información. El seguía durmiendo por las tardes gracias a las pastillas que le había pedido a Kocho aunque...se le empezaban a acabar muy rápido. Obanai, por lo que veía trataba de comportarse mejor con él y Giyuu sabía perfectamente que también lo estaba haciendo por el patrón.

Esa noche Giyuu se enfrentó a varios demonios de bajo rango, lo cual no fue problema y los derrotó en un abrir y cerrar de ojos, pero en el proceso, se le cayó el frasquito que contenía las pastillas.
Sin darse cuenta, continuó con su deber.




Al otro día, Iguro se encontraba acostado en el futón con Kaburamaru dormido en su pecho, Giyuu ya terminaba de desayunar y ahora estaba listo para irse a dormir tranquilo.

Mis Pesadillas Se Fueron Y Ahora Estoy En Un Hermoso SueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora