Capítulo 28: Billar

69 14 12
                                    

<< Mi deber es protegerte de todos, no permitiría que nadie te hiciera daño, Mila .>>

Yanel

Morí de la risa con toda la actuación.
Pero lo que más gracia me dió fue la actitud de Max .

En la noche...

Max llegó a mi casa en su coche .

—¿Qué te parece?¿Cómo estoy?—le pregunté .

—Estas bien, no te preocupes te vistas como te vistas a Miranda siempre le vas a gustar.

—A que si, pues nos vamos.

Le dí un beso en la frente a mi mamá y salí a mi destino.

Me senté en el asiento del copiloto hasta llegar a casa de Miranda de ahí me sentaría atrás con ella, para dejar a Max con Loreta .

Casa de Miranda...

Toqué la puerta y salió Loreta .

—Hola Yanel —me da dos besos en la mejilla.

—Hola y Miranda .

—Está pintándose los labios aún .

Loreta se fue a hablar con Max .

Entré a la casa .

Ví el peluche que le había regalado encima del sofá, lo cojí y lo abracé .

—Por favor puedes soltar a "Celosito" .

Me río —¿Qué clase de nombre es ese? Por favor.

— Bueno ya estoy lista, ponlo en su lugar y marchémonos .

—¿Se puede saber a dónde vas con tanto maquillaje?

Me da un beso en la mejilla—no tengo por qué darte explicaciones —me susurró en el oído mientras sentía un leve escalofrío, su presencia me hacía temblar.

Miranda salió de la casa . Ella andaba con un vestido en azul con escote drapeado y de tirantes, algo corto, se le notaban más de lo normal sus senos—Dios mío sus tetas se veían tan sexis, estaban tan apretadas que resaltaban más que toda la otra parte de su cuerpo.

Sonreí, pase mi mano por mi oreja y también salí de la casa.

Cerramos la puerta y nos fuimos para el auto .

—Bueno Loreta creía que ibas a estar adentro ya sentada .—le contesté .

—No, estoy esperando que Max se acabe de levantar para yo conducir.

—Ya te dije que no, o acaso estás loca .—contestó Max .

—Max por favor es solo un momento a la vuelta nos traes tu —dijo Miranda.

—Vale pero solo porque me tienes cansado de tanto insistir.

—Genial —dijo Loreta contenta .

Max abrió la puerta se bajó de su auto y se montó en el asiento de copiloto, Loreta se sentó en el asiento del conductor. Yo y Miranda simplemente nos sentamos atrás como lo había pensado.

Loreta arrancó el coche y luego lo frenó bruscamente, de camino había muchísimo tráfico, lo que era normal, así que Loreta aceleró el auto, y fue entrando en cada espacio que dejaban los coches al pasar .

—Puedes ir despacio te recuerdo que el coche es mío.—dijo Max.

—Ya comenzó el señorito payaso a reclamar sus pertenencias .

Se ríe —Mira muchacha malcriada, vamos suave o ahora mismo te bajas de mi auto .

—Calma por favor —contesté .

Conocidos Desconocidos 1 © [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora