Radioapple: one-shots y Short tales

Desayuno

Pasó mucho tiempo antes de volver a confiar en alguien, en dejarle ver mi verdad. Tuve miedo de que al hacerlo, hubiera decidido irse porque la mierda lo superaba, pero no fue así, se quedó, me trató bien y me hizo sentir de nuevo. Él también tuvo que abirse conmigo, el contarme de su sexualidad y conflictos con su alma, al final eso nos unió aún más.

Aun recuerdo cuando apenas nos conocimos, me caía mal por el simple hecho de haber hecho lo que yo no, ayudar a mi hija. No lo odiaba ni nada parecido, sino que sentía que era mucho más para Charlie que un padre depresivo y compulsivo. CharChar jamás me culpo por eso, es más, me perdonó sin siquiera yo pedir perdón, porque me amá demasiado como para dejarse guiar por el pasado, sabe que quiero un futuro en el que ella esté presente. Ahora, luego de algunos años de idas y vueltas, de sentir en silencio, de sonrojos ocultos y anhelos infinitos, Alastor dio el primer pasó declarandome su amor. Fue un bello momento, Charlie no dejaba de llorar alegando que estaba muy feliz por mi.

Supongo que dentro de un lugar lleno de piezas de rompecabezas, él es la pieza con la que encajé. Es una mierda cursi, estoy consciente.

No tenemos muchas relaciones sexuales, ya que Alastor es asexual, pero hay ocasiones en que si, como lo fue anoche. Él se me acercó estando preocupado porque había escuchado a Angel y Husk hablar sobre lo importantes que son ese tipo de relaciones para una pareja, se preocupó. No pude más que abrazarlo por la cintura y explicarle que yo lo amaba a él, con todo lo que tuviera para darme y eso lo relajó. Luego me di cuenta de que fue no solo por lo que dije, sino que era la primera vez que lo decía en voz alta.

Es normal preocuparse por las posibles fallas, por posibles errores, el queres ser perfecto para tu persona especial, pero así es como cometemos el fallo más grande, el no ser auténticos y sinceros. Yo abrí mi corazón cuando él preguntó con inocencia sobre mis patitos y el fue amable en contarme en porque comía solo en su habitación. Fue algo impactante en un principio pero luego entendí que es su forma de ser, sus amigos más cercanos son de esa forma y el trata de ser un poquito mejor que eso, aunque sigue siendo complicado para nosotros el comer juntos.

Por eso despertarme y que la cama esté fría a mi lado luego de una noche de amarnos me parece extraño. El patito que Alastor me consiguió sigue aquí, tiene su olor, pero algo diferente está en el aire. Camino por los pasillos cruzandome con Niffty, quien me hace una reverencia (no por ser el puto Rey del Infierno, sino por ser el cónyuge del "Rey Cucaracha"), en las escaleras me percato de que ese olor es dulce y acaramelado, me imagino que es Charlie haciendo algo para Vaggie, pero no, es Alastor.

Al percatarse de nuestra presencia (nuestro patito de felpa y yo), sonríe de una manera amorosa.

_Buenos días, su majestad_ con una mano sostiene un plato de hotcakes y con la otra me acomoda el cabello mañanero.

_Que estas haciendo?.

_Oh, bueno, yo quise sorprenderte con el desayuno en la cama pero eres más escurridizo de lo que pensé.

Beso su mano antes de sentarme en la silla de la isla, colocó el peluche en la silla contigua. Alastor coloca un café frente a mi, también el plato de hotcakes y utensilios.

_Espero que estén buenos, no me atreví a probarlos.

_Lo se, amor, agradezco tu esfuerzo y huelen delicioso.

Comencé a comer y por el jodido Dios, estaban buenísimos. Su sonrisa ahora era de suficiencia y orgullo.

_Gracias por hacerlos para mi, bebé.

_Cualquier cosa para mi manzanita.

Este hombre, que detesta comer frente a los demás por el miedo a que pensaran, se esforzó en hacer algo especial para mí, aunque el no sepa nada de cocina. Como no voy a amarlo?.