Un accidente interesante

C V

Peter Pettigrew

Estaba nervioso, no porque estuviera haciendo algo malo, que siendo honestos lo estaba haciendo, pero no era ni la primera vez y seguramente no seria la última pero era emocionante.

Así que estaba ahí, infiltrandose -allanando- en la casa de los Weasley ¿Por qué? Porque ahí estaba la rata que necesitaba, tuvo que llevarse al pequeño Dobby consigo para ayudarlo, tenía ya las instrucciones así que no sería mucho problema.

Llegaron hasta el cuarto de Ronald y ahí estaba, la rata durmiendo en los brazos de su amigo... Ahora eso se veía horrible, más que todo porque esa rata era un adulto.

Dobby se hizo cargo y salieron rapido, estaba emocionado por la adrenalina que le había dejado en ese momento así que corrieron hasta ser transportados por el pequeño elfo que durmió a la rata que se había despertado en el proceso.

Llegaron a la mansión Malfoy, se quito la capa de los Potter que logro sacar en su visita al banco la última vez y la guardo, Draco no tardó en aparecer notando de inmediato a la rata inconsciente en la mesa.

"espero una buena explicación" hablo para que sus padres también aparecieran.

"gracias a él conseguiré lo que quiero, pero ahora necesito un par de cosas" hablo tranquilo metiendo en una jaula especial a la rata.

"ya te advierto que si lo quieres de mascota, la mataré" advirtio al sentir el olor peculiar en la rata.

"no es eso, la quiero meter en Azkaban en realidad, lo entenderás pronto, solo necesito... Un par de objetos" recordo lo que necesitaría, paso el último mes buscando el libro de runas de la familia Potter que necesitaba con urgencia para lo que haría, así que tendría que ir a la mansión de los Potter para eso.

No podría hacer lo requerido con los Malfoy y menos con Draco que no lo dejaba hacer mucho.

"¿Puedo ayudar?" se ofreció mirando con curiosidad la jaula, tenía un... Pedido especial en él, era la única manera que consiguió para poder capturar a la rata sin problemas.

"no lo creo, aunque podrías acompañarme" ofreció llevándose a la rata hasta su 'habitación'.

Se preparó lo mejor que pudo en sus vestimentas, tenía que llevar una de las tunicas Potter por sus ancestros y solo consiguió la de uno de ellos, por lo que tenía un hechizo para que fuera más pequeño y usable pero seguía siendo enorme para su actual cuerpo.

No tener su varita era realmente un problema, dependía del pequeño elfo para cualquier hechizo y su transporte. Había logrado practicar su magia y conocimientos pero eso no era suficiente, necesitaba enseñar a su magia a como moverse y enfocarse, no podía hacer eso sin una varita y no conseguiría una hasta al menos en unos años y no podia ir a conseguir otra varita... Ese callejón no es para niños... Y menos para su pequeño e indefenso ser.

Una vez listos le pidió el favor al pequeño elfo y llegaron a la mansión, el lugar estaba lleno de polvo aún, aparte de sus pasos hechos en el suelo no hace mucho.

Llegaron a una sala especial que había preparado para el momento, no podía hacerlo de otra manera, debía colocar las runas necesarias en la jaula para evitar que se escapara la rata, además de poner otras para cuando saliera de la jaula.