Ash es una chica comun, de estatura mediana, con el cabello castaño claro, y unos hermosos ojos cafés que a la luz del sol dan un aire a verde. Ash asistía a la universidad; como la mayoría de sus amigas, estudiaba audiovisuales, la mejor carrera que una chica como ella pudiera pedir, Ash tenía tres nacionalidades, mexicana, española e inglesa; en su juventud, su madre, cuyo nombre es Sofía, asistía a un internado en Barcelona, al que iban muchísimos chicos de todo el mundo, en busca de una nueva aventura. Así fue como su madre y su padre se conocieron, Sofía, de nacionalidad mexicana y Louis, que era inglés (londinense, para ser exactos), se conocieron, se enamoraron, y tuvieron una preciosa hija a la cual llamaron Ashley, pues ese era el nombre de la protagonista de la obra de teatro favorita de los dos. Los jóvenes terminaron sus estudios y se fueron a vivir a Madrid España, en donde durante 3 preciosos años criaron a su hija. Cuando Ash cumplió 4 años, su padre tuvo un accidente automovilístico y murió... Las últimas palabras que Louis susurro al oído de Ashley quedaron gravadas en la memoria de la niña para siempre, "Ashley, recuerda siempre ser feliz y disfrutar de la vida, sueña y no dejes que nadie destruya tus sueños, haz todo lo que esté en tus manos para que se cumplan y siempre se buena con los demás, nunca lo olvides"
Después de que su padre murió, Ash y su madre se fueron a México, donde la niña creció sana hasta los 15 años, cuando decidió volver a España para estudiar una carrera que realmente la llenara.
En España compartía piso con su mejor amiga, Candy, quien estudiaba gastronomía en la misma universidad que Ash y era 1 año mayor que ella.
Candy era una chica increíblemente diferente a Ash, era demasiado temerosa de todo, y era la típica persona que prefería no tomar riesgo alguno. A decir verdad, ella y Ash se complementaban bien, pues Candy detenía a Ash de hacer muchas locuras que podrían ponerla en peligro o causarle problemas, y Ash hacia que Candy fuera más abierta y alegre de lo que era realmente.
En cuestión familiar, Ash visitaba muy frecuentemente a su familia, a la de Inglaterra como la de México, se turnaba las navidades, una la pasaba con su madre y otra la pasaba con su familia paterna. Como era de esperarse, Ash dominaba perfectamente tanto el inglés como el español, y también hablaba catalán, por el tiempo que vivió en Barcelona con sus padres.
A Ash la podían describir 3 palabras: sueños, diversión, vida.
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Un millón de galaxias
Teen FictionAsh Laurent es una chica normal de 17 años, la única cosa que la hace diferente es su manera tan fascinante de ver el mundo. Su vida se basa en disfrutar, seguir sus sueños, ser feliz y vivir el momento. Su vida da un giro impresionante cuando una...