Un millón de galaxias

CAP. 1 MENSAJES NARRADO DESDE EL PUNTO DE VISTA DE ASH

Era un domingo a las 7 de la noche, Candy estaba sentada en el desgarrado sofá color púrpura con su laptop en las piernas y yo estaba en la cocina preparando palomitas.
-¿Que haces Cand? te ves muy concentrada.
Le dije a Candy mientras caminaba hacia el sofá ya con las palomitas listas.
-Es un ensayo, es para la escuela, llevo más de dos días y aún no puedo terminarlo.
-¿Entonces no vas a ver la película?
-Si, ya estoy harta, a fin de cuentas, ¿para que fluyan las ideas uno debe relajarse no?
Dijo mientras cerraba su computadora y la ponía en la pequeña mesa de madera que teníamos en la sala.
Empezamos a ver la película, pero a decir verdad a las dos ya nos había aburrido, comenzamos a hablar.
-Oye Ash
-¿Que pasa?
-He ido al centro comercial el otro día por unas cosas y he visto unos vestidos increíbles.
-¿Encerio? Vamos, estoy demasiado aburrida.
-Somos las únicas personas que no tienen planes el domingo en la noche.
Dijo Candy entre risas.

Fuimos al centro comercial, Candy compro uno de los vestidos pero yo no compre nada. Después fuimos a cenar a un restaurante de ensaladas que había por la zona, y volvimos a casa.
Eran ya como las 10, Candy se fue a dormir y yo me quede en la sala viendo series.
De repente mi teléfono soñó, era un número desconocido así que preferí no contestar. Unos 5 minutos después, me llego un mensaje de texto del mismo número que había llamado antes. El mensaje decía:
"Ashley Laurent, te he estado observando"
Al leer esto la sangre se me congeló, pero después pensé que pudo haber sido una broma de cualquiera y me fui a dormir.
Durante toda la noche no puede evitar pensar en por que alguien me haría una broma tan pesada, "La única que la pudo haber hecho es Candy, y ella estaba dormida" pensé.

A la mañana siguiente desperté con el dulce sonido de "Learn on" que había puesto como alarma. El teléfono me había pegado un buen susto.
-Vámonos!
Grito Candy desde la sala.
En ese momento recordé que que era viernes, lo cual significaba que Candy me daba un aventón a la escuela.
Me levanté de la cama como si las cobijas fueran de fuego, y me dirigí hacia el armario para sacar algo de ropa.
Baje rápido a la cocina y tome algo de café que había en una taza, estaba frío, pero a esas instancias no tenía tiempo de sobra para preocuparme por el café.
-Corre anda! No vas a llegar!
Me decía Candy mientras yo bebía el café a una velocidad que se podría considerar como peligrosa.

Las dos salimos y yo cerré la puerta. Nos montamos en su motocicleta color rosa pastel y partimos.
-Ayer me llego un mensaje bastante raro... No fuiste tu? Verdad?
Le dije mientras me sujetaba con la mano mi gorro para que no volará con el viento.
-Mensaje raro? Que decía?
-Decía "Te he observado" o algo así.
-¿Te he observado?
-O algo así.
-Wow, que mal rollo. No, no fui yo.
-¿Debería preocuparme?
-No lo creo, pudo haber sido una broma de Oliver, o de Mane.
-Cierto. No le haré caso.
-Hemos llegado.
Candy paro frente a la puerta del campus. Baje de la motocicleta y camine hacia la entrada. De repente por un lado mío salió una chica con cabello rubio y un cigarro a medio acabar en la mano.
-Hola hola!
Gritó mientras me abrazaba. Tardé un rato en descubrir quien era, después de un medio minuto, vi que era Mane. Mane era una muy buena amiga mía, la había conocido por el tiempo en el que salió con Oliver (mi mejor amigo) que fueron más o menos unos meses; después de que terminaron, ella se hizo amiga de Candy, y después mía; lo que causo que Oliver y ella mantuvieran una relación de amistad muy especial.

-Hola hola. ¿Por qué esa felicidad tan grande?
Le dije con un tono de voz no tan entusiasmado como el que ella había usado.
-¿Que? ¿Esto? ¿Qué ya no puedo saludarte con euforia sin que pienses que me pasa algo?
-Ja ja, muy bien. Entonces corre y vamos a clase.
Entramos a la primera clase. En el instituto, el día se dividía en periodos, para los alumnos "principiantes" como Mane y yo, el día se dividía en 4: 1) Comunicación escrita 2) Teorías de la imagen 3) Lengua 4) Sociología y cambio cultural
Mi carrera me encantaba.
Había empezado ya el segundo periodo. Mane me miraba con ojos perdidos, y me hacia señas para que mirará a algunos chicos y chicas.
Ya se habían terminado las clases, salimos del aula y mientras caminábamos a la entrada, de la nada una alguien se me acerco y me dijo:
-¿Ashley, no recibiste... No se... Un mensaje extraño ayer?
Me dijo con un tono burlón.
En ese momento lo entendí, Caroline Gómez, una niña odiosa y tonta que por alguna razón me odiaba... Había sido la que mandó el mensaje.
-¿Crees que voy a caer en tus estupideces Caroline? No tengo 11 años.
Me miro, frunció el ceño, se dio media vuelta y se fue.
-Es una inmadura.
Me dijo Mane mientras salíamos del campus.
-Hey, ¿Quieres ir a casa?
Le dije.
-Si, por que no.
Entonces caminamos hacia mi apartamento (que también era de Candy).

Al llegar vimos a Oliver sentado en el sofá y a Candy preparando algo en la cocina.
-Hola chicas.
Dijo Oliver mientras daba pequeños golpes en el sofá para que nos sentáramos.
-Hola hola.
Dijo Mane mientras dejaba su bolso y su laptop en una silla.
Me senté al lado de Oliver, Mane se sentó en el sillón individual y Candy llego después con unas palomitas de maíz acarameladas.
-Antencion, mañana es el cumpleaños de Ash, ¿Que vamos a hacer?
Dijo Oliver con voz entusiasmada.
La verdad es que lo de mi cumpleaños me tenía realmente despreocupada; sabía que planearían algo, o que en algún momento sacarían el tema.
-Ni idea, ¿Que quieres hacer eh cumpleañera?
-Mmm... No lo se... ¿LARRY'S?
-¡LARRY'S!
Gritaron todos al mismo tiempo.

Larry's era una especie de café-bar-centro de videojuegos-club de poesía todo en uno. Íbamos juntos ahí cuando había una fecha importante, por la noche se presentaban grupos musicales... En fin, era increíble.