Cuando la razón falla libro III

Capítulo 131 : Dolor y horror

Notas:

Lanzamiento anticipado aleatorio jajaja.
No hay ETS esta semana, lo siento, me involucré demasiado en escribir TCP.

Honestamente, Izuku debería haber esperado que esto sucediera eventualmente. Estaban casi seguros de que Malicia lo notó cuando entraron a su lugar especial (estaba deseando llamarlo así en su cara), y si lo hizo, entonces mostrarles su disgusto era natural.

En todo caso, probablemente deberían considerarse afortunados de que la blasfema fuente de energía de esta instalación se haya quedado sin energía hace mucho tiempo. De lo contrario, Malice probablemente encontraría una forma más directa de arruinarles el día.

En cambio, envió a sus lacayos. Cualquiera que sea el abominable lugar al que los envió, se movieron rápido y llegaron a las instalaciones poco después de su fiesta. Y una vez que llegaron, se pusieron manos a la obra.

El primero en verlos fue Oracle, quien casualmente miró hacia el pasillo lateral cuando sus ángulos de repente se hicieron más anchos, expandiendo el espacio tridimensional más allá de su tamaño natural, permitiendo que los demonios inundaran el enorme agujero en el tejido de la Realidad.

Gritó una advertencia e inmediatamente abrió fuego. Él, como la mayoría de ellos, cambió a un armamento de la era de Dawn War. El arma que portaba se describe mejor como los ancestros olvidados de los rifles de asalto.

Y tuvo un gran impacto. Los dos primeros demonios murieron casi instantáneamente, las balas dejaron agujeros en sus cuerpos que eran mucho más anchos de lo que deberían ser para su calibre. Pero a Malice poco le importaban otras cosas, incluso aquellos que por alguna razón lucharían junto a él. Y sus demonios reflejaban esa naturaleza.

No les importó y cargaron hacia adelante, cruzando la distancia en menos de dos segundos. Midoriya se giró al escuchar el grito y los disparos, justo a tiempo para ver a un demonio agarrar la cabeza de Oracle, Yoshihiro disparando balas en su pecho a quemarropa, antes de que el impulso del demonio lo derribara hacia atrás, los dos desaparecieron en una distancia absurdamente amplia ángulo que volvió a la normalidad un segundo después.

No no .

Fuyumi Todoroki estaba más cerca de eso cuando sucedió y llegó más rápido que él, doblando la esquina y disparando el proyector Death Ray.

Izuku pudo ver una explosión de luz oscura (no se le ocurrieron otras palabras al tratar de describirla), ahogando brevemente toda la luz frente a ella. Un momento después, todos los sonidos provenientes del pasillo se extinguieron brevemente.

La mitad superior de un demonio que sobresalía de dicho corredor, tendido en el suelo de cara, dejaba pocas dudas sobre lo que acababa de suceder. Mierda, el proyector era increíblemente genial.

"¿Qué es..." Izuku estaba a punto de preguntar, cuando Hatsume de repente miró en una dirección que no debería ser posible y que no tenía idea de cómo describir. Él la miró fijamente por un breve segundo, en total shock, pero fue entonces cuando su cuello se soltó.

"Vienen más, ¡prepárense!" Ella grita, Izuku inmediatamente comienza a ladrar órdenes. La situación no era buena, estaban en medio de esta maldita instalación, el enemigo podía atacarlos literalmente desde cualquier rincón y...

Izuku inmediatamente deja caer su mochila al suelo y saca una espada. Era una especie de plan de contingencia, tomó una espada de la armería en caso de encontrarse con demonios.

Después de todo, su principal forma de ataque era golpear cosas. Y, como le informó Hatsume cuando le preguntaron al respecto, el retroceso causado al golpear a un demonio contaba como daño infligido por este. E Izuku prefirió no sufrir el dolor eterno en su mano.