Cuando la razón falla libro III

Capítulo 113 : Portavoz de lo Alto

Notas:

Originalmente se suponía que este sería el capítulo 114, pero decidí que publicarlo justo después de que Nedzu mencionara que Overhaul no podrá lograr nada incluso si lo intenta (y cómo Ryukyu dejó en claro que lo considera una suposición estúpida) va a ayudar. ser simplemente... mucho más apropiado.

Había varias formas de viajar a través de las tierras salvajes que solían ser Hosu. Sin embargo, la mayoría de ellos no estaban disponibles para la mayoría de sus habitantes. Para ellos, la única forma de llegar del punto A al punto B era usar los propios pies.

Después de todo, tenían que estar constantemente en guardia. Constantemente conscientes de lo que podría esperarles más allá de la siguiente curva de la carretera. Viajar más rápido era correr el riesgo de toparse con algo mortal antes de que sus instintos naturales pudieran advertirlo.

Sin embargo, ni siquiera eso pudo detener el deseo natural de la humanidad de avanzar con rapidez.

El segundo "nivel" de velocidad de desplazamiento implicaba montar animales. Cuando quedó claro que no llegaría ayuda y que sus vehículos no podrían durar para siempre, el gobierno militar temporal de Hosu, más tarde reemplazado por el Frente de Liberación de la Humanidad, terminó requisando todos y cada uno de los caballos presentes en la prefectura.

No eran muchos. Menos de dos mil en total, al menos después de contar todos los caballos que murieron en las partes de la prefectura que los humanos ya no controlaban. Hoy en día eran un bien precioso y valioso en Hosu, especialmente considerando la cantidad de ellos que se perdieron en los años posteriores.

Una vez más, la cría de caballos se consideró un elemento crucial del esfuerzo bélico de la humanidad. Es curioso cómo funciona la historia, ¿eh?

Quince años fue mucho tiempo. Me sentí como toda una vida, especialmente considerando lo cortos que pueden ser en Hosu. Pero algunos vehículos todavía estaban en condiciones de funcionar. Principalmente gracias a los equipos de reconocimiento y recuperación del FML que recogen piezas de vehículos abandonados en el resto de la prefectura.

La gasolina era un problema mayor. Con su vida útil contada en meses, toda la gasolina "normal" que estaba presente en la prefectura se había estropeado hacía tiempo. El optimizado para el almacenamiento a largo plazo y el diésel también murió hace años.

Como resultado, los automóviles que todavía funcionaban en Hosu funcionaban casi exclusivamente con etanol, siendo la producción de etanol quizás la industria más importante que quedaba en Hosu, además de la producción de armas y municiones improvisadas.

Incluso entonces, la cantidad de automóviles disponibles para la población de Hosu era extremadamente mínima, y ​​el combustible que quedaba estaba racionado, y tratar de robar u ocultar algo se castigaba con la muerte.

A menos que fueras un magister. O un semipoder. Eso cambió mucho.

Como resultado, Overhaul pudo disfrutar del privilegio de ser conducido a su destino, con dos autos más, uno delante de ellos y el otro directamente detrás de ellos, llevando a su escolta y a su propio chofer en el asiento delantero.

Había algo profundamente extraño en tratar un Honda CR-V de 2001, y cerca de doscientos mil kilómetros recorridos, como un privilegio que requería ser un dios literal para disfrutarlo, pero bueno, Hosu .

Sólo Hosu.

Su chófer llevaba una máscara antigás. Overhaul no tenía que hacer eso, gracias a su naturaleza actual. Y a pesar de no tener sentido del olfato, debido a que decidió no tenerlo, todavía encontraba irritantes las cosas que ocasionalmente se arrastraban de su compañero y luego se extendían por el piso del auto y el asiento entre ellos.