ᴅᴇꜱᴛʀᴜɪᴅᴏꜱ

Capítulo 3

El sábado, el baile de caridad, no quería ir, pero sabía que no ir era tener una charla con mi madre a través de la madre de Nick lo cual era lo suficientemente incómodo como para que me dieran ganas de ir.

Los días en la escuela no habían mejorado para nada, pero mínimo ya no éramos tanto el foco de atención desde que a una chica desgraciadamente se le hayan filtrado unas fotos íntimas.

La verdad es que no había visto el vestido que había escogido mi madre para mí, lo deje ahí en mi habitación colgado dentro de su saco. No me faltaba casi nada para estar lista, las maquilladoras que trae para mí la mamá de Nick se habían encargado de hacerme parecer más humana y solo ellas lo habían visto para poder hacerme el maquillaje de los ojos.

El verlo colgado era simplemente espectacular, era un verde esmeralda con corte de sirena lleno de pedrería y con un escote hermoso, esa cosa iba a ser difícil de poner en mí. Era delgada, pero no sabía si tanto para no morir asfixiada en esa preciosidad.

Y le atine un poco, si batalle lo admito, las chicas del maquillaje dos de ellas me tuvieron que ayudar a ponérmelo y también a ponerme los tacones ya que al ser muy apretado temía que al agacharme a ponerme los tacones se rompiera.

Al bajar Nick ya estaba esperándome, llevaba un smoking negro con un moño verde tan oscuro que si no te fijabas tanto como yo lo estaba haciendo, pasaba por un moño negro. Él estaba concentrado en su celular, entonces tuve que hacer como que aclaraba la garganta para que me hiciera caso.

- ¿Ya estás... ¡wow! Te vez...preciosa - okey, eso fue lindo.

- También te ves bien Romeo, pero ya tenemos que irnos si no queremos que tú madre nos maté - le extendí mi mano y él al instante la entrelazó con la mía, para este punto ya era algo común entre nosotros.

Sus padres nos habían ofrecido irnos con ellos, pero la verdad tanto Nick como yo preferimos ahorrarnos los comentarios de sus padres tan siquiera por el camino. Nos subimos al coche de Nick y partimos al dichoso baile.

Llegamos y nos recibieron con unas copas de vino que rápidamente aceptamos, creo que ambos queríamos llevar esto lo más tranquilo posible y el vino debía de ayudar en algo.

– ¡Aw! Te ves hermosa - dice la madre de Nick apenas me ve - tu mamá hizo una buena elección, queda hermoso con tu cabello pelirrojo.

– Gracias señora Smith - ni como negarme, mi madre hizo una muy buena elección.

– Dime suegra, cariño - el sorbo que acababa de tomar de mi vino se me fue mal y ahora estaba dando un mini show ahogándome y Nick golpeando mi espalda.

– Creo que es hora de bailar - dice para alejarme de los comentarios tan inesperados de su mamá - lo siento, ella cree que ya estamos enamorados solo porque me quedo en tu casa - me lleva al centro de la pista, toma una mis manos y la otra la pone en mi cintura acercándome a él, nos empezamos a mover al ritmo lento de la canción, ha de ser viejísima porque no la reconozco.

- A veces me da miedo los comentarios que me pueda decir, es tan espontánea que da miedo - digo sin miedo a que se ofenda, él también la crítica conmigo.

- Aunque algo de razón tiene - lo miro confundida, que ni piense que ahora a él le voy a empezar a decir amor - te ves muy hermosa, te queda espectacular ese vestido - claramente me sonroje, no estaba acostumbrada a ese tipo de cumplidos, ni siquiera Oliver me decía ese tipo de cosas.

- Eres muy distinto a Oliver - fue lo primero que pude decir, no sabía qué más decirle, no soy muy buena recibiendo cumplidos.

- No estoy muy seguro si esto es un insulto o un halago sabiendo que sigues enamorada de él - su sonrisa era muy contagiosa, sus mejillas incluso se veían más grandes y sus ojos más pequeños, no lo veía sonreír hace tanto.