Capítulo 14 ☆彡

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El día de hoy la menor celebraba sus dieciséis años. Su mamá pensó que su hija haría una celebración grande en su casa, pero para su sorpresa la única invitada era Mina. No era que le molestara, al contrario, amaba ver a su hija feliz junto a la japonesa. Si Chaeyoung era feliz, ella también lo era.

Mina llegó a la casa de la menor alrededor de las cuatro de la tarde, se había demorado un poco porque primero debía terminar sus deberes. Para buena suerte, ella vivía frente a la coreana.

— Chaeng, ¿no invitaste a nadie más? — preguntó confundida, según Mina, la menor habría invitado a muchas personas en su cumpleaños.

— No — respondió con simpleza, regalándole una tierna sonrisa a la mayor.

— ¿Ni a Dahyun?

Chaeyoung negó con su cabeza.

— Solo a ti. ¿Te molesta? — capaz a su unnie no le gustaba la idea.

— Para nada, Chaeng.

— Yo...Solo quería pasar mi cumpleaños contigo — comentó con las mejillas levemente ruborizadas.

Mina se acordó de algo, tapándose la boca con sorpresa al olvidarse de su regalo para la menor.

— ¿Qué pasó, unnie?

— Olvide tu regalo de cumpleaños, Chaeng — comentó avergonzada. — Pero prometo que mañana...— fue interrumpida.

— No quiero un regalo, Minari, solo quiero que me cumplas cinco deseos — Mina quedó confundida. — No te preocupes, no es nada en que debas gastar o algo así.

— Comprendo...

— Mamá me dio dinero para ir al parque de diversiones. ¿Crees que podamos ir, Mina unnie? Esta es la primera cosa que te pido, me quedan cuatro más.

— Por supuesto que iremos pequeña — no se negaría a nada, era el cumpleaños de su persona favorita.

Chaeyoung fue a buscar un abrigo. Se irían caminando hasta el parque de diversiones.

— Mina...— llamó la menor. Ambas caminaron por un largo rato en silencio.

— Dime, Chaeng — Mina puso ambas manos en los bolsillos de su chaqueta. Cada día se ponía más frío en Seúl.

— ¿Me puedes tomar de la mano? — Mina tragó saliva. — Esta es mi segunda petición — Chaeyoung esperaba que su unnie accediera.

— Claro, pequeña — Mina sacó una mano de su bolsillo, entrelazándola con la de la coreana.

En lo que restaba de camino Mina fue haciendo pequeñas caricias que su dedo pulgar en la mano de la menor.

Posiblemente si la veías de lejos, parecían una adorable pareja.

[🍓]

Chaeyoung arrastró a Mina hasta unos juegos donde si ganaban, podían obtener un peluche.

— Minari, ¿me sacas ese peluche? — apuntó al tierno osito que sostenía una fresa en una de sus manos.

— Por supuesto, Chaeng.

Para ganar el peluche, Mina debía derribar tres latas con tres pelotas. Mina le rezó a todos los dioses, quería a ver a Chaeyoung feliz.

Agarró la primera pelota y analizó bien la distancia entre los objetos. Con fuerza lanzó la pelota, derribando la primera lata.

— ¡Solo dos más unnie! — alentó la menor.

Se le fue entregada la segunda pelota. Una vez más analizó más o menos la fuerza con la que debía lanzar la pelota. Ya hecho, tiro de esta, derribando la segunda lata.

My Little Dream ⁞ MiChaengDonde viven las historias. Descúbrelo ahora