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Cuando Hiashi supo que su hija pequeña había echo una nueva amiga se alegro bastante, él había notado el anhelo y las ganas de entablar amistades que se ocultaban tras esos ojos perlas tan parecidos a los suyos, pese a que Hanabi quería disimular para parecer más seria, muy en el fondo solo quería a alguien para jugar y compartir sus ratos libres.

Pero de todas las niñas que había en la aldea... ¿Justo tenía que acercarse a hablarle la mocosa Inuzuka?.
¿Era una maldición por los años en los que se burlo de Tsume?.
¿Estaba pagando alguna clase de karma con eso?.

Por qué si era así, ahora está completamente seguro de que la vida está en deuda con él... Muy endeuda.

Él, un patriarca fuerte y respetado por todos, con cientos de personas bajo su mando, con un aura aterradora, fría y seria. Un jodido hombre adulto, ¡Un Hyuga!. Se encuentra sentado en su patio con su largo cabello cubierto de moños de colores, con una especie de corona de cartón mal pintada sobre su cabeza, frente a él una mini mesa de madera en donde hay unas tazas de plástico y una tetera del mismo material y a su lado hay un par de osos de felpa que lo miran con burla.

—¿Quiere más té, Lord Hiashi?— una dulce y chillona voz lo saco de sus pensamientos, el Hyuga tiene una taza de verdad con té real por qué si, aunque fuera a jugar no iba a estar bebiendo té imaginario como un loco. Que eso lo hagan los osos de peluche.

-Si, por favor. Lady Sakura- Murmuro entre dientes, la nombrada le sonrió radiante antes de servirle a él y su pequeña hija a unos osos de distancia. Hanabi luce muy feliz y sorprendida de que su progenitor esté ahí con ellas jugando, hasta Hinata parece algo incrédula. La oji-perla mayor estuvo algo reacia e insegura al principio pero después de mucha insistencia por parte de la pelirrosa termino cediendo y acabo sentada jugando. Una tímida sonrisa adorna el rostro de la Hyuga de ocho años.

-¿Quiere té, señor Bunny?- la de ojos jades miro a un conejo de color rosa el cual está ubicado a un lado de la oji perla mayor.

-¿Que hay de mí?- Hiashi levanto su taza con molestia al verla vacía. -¿Ese sucio conejo tiene más privilegios que yo?- pregunto celoso. La Inuzuka lo miro seria por unos segundos.

-Usted está bebiendo demasiado Lord Hiashi. Eso es malo para su pancita y hoy no traje mí equipo de doctora- el mayor se sonrojo levemente cuando sus hijas se quedaron viéndolo igual que a un loco. Es decir su padre jamás había interactuado así con ellas y ahora hasta acabo jugando a la fiesta del té.

Pero, ¿Cómo llegaron a eso?.
¿Cómo terminaron los Hyuga sentados en el patio?.
¿Cómo llego la mini Inuzuka a su casa?.

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&&&&&FASH BACK&&&&&

######TRES HORAS ANTES:

-¡Cuida a mí hija o te las verás conmigo!- una muy hermosa Tsume apareció frente a la gran residencia Hyuga llevando consigo a su pequeña bola de pelos rosa la cual lo miro algo tímida desde atrás de las piernas de su loca madre. ¿Cómo algo tan tierno salió de esa mujer?.

-¿Disculpa?- pregunto el patriarca serio, a su lado Hanabi tironeo del borde de su yukata.

—Oto-san, ella es Sakura es mí nueva amiga. Tú dijiste que podía venir a casa hoy— escuchar eso fue como un balde de agua fría para el hombre de largos cabellos castaños quien no pudo evitar mirar con desagrado a la mini Inuzuka quien se removió incómoda en su lugar. ¿Enserio su pequeña se hizo amiga del engendro que salió del interior de la fémina más desquiciada de la aldea?.  Habiendo tantos mocosos en la academia ninja. 

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⏰ Última actualización: May 06 ⏰

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