DxD: Una Nueva Oportunidad

[19]

Era temprano por la mañana, se podría decir que era una excelente mañana para algunos, pero no para el hogar de Alexander, que a este se le podía ver con un rostro impasible, el pequeño peliplata usaba lentes oscuros y un traje completo de negro, hoy era el funeral de Shuwen Li.

El cuerpo habia sido transportado hacia la ciudad donde el residía junto a su difunta esposa, todo fue organizado por Mary, que esta le tuvo aprecio ya que le enseño cosas a su hijo, no siendo solamente artes marciales.

La familia Igarashi no era la única que estaba ahí, la secretaria de Mary, Medusa, estaba ahí, Alice había llegado junto a su madre, que a pesar de no conocer al fallecido, estos asistieron en forma de acompañar el luto, e igualmente los profesores del dojo Ryozanpaku iban llegar por su cuenta al lugar como algunos conocidos de Mary.

Al salir de la mansión Igarashi todos los presentes se subieron a sus respectivos vehículos, donde la mayoría eran autos de lujo, en el que iban Alexander era un Bentley Flying Spur S en color negro, algo que Mary tenía en su cochera.

Era un viaje silencioso, donde Nabe era la conductora, Mary era la copiloto y Alexander junto a Medusa iban en los asientos traseros, el peliplata miraba por la ventana, observando el camino, realmente sabían que el mayor afectado era él.

Pronto se llego al cementerio, los transeúntes se sorprendieron ya que vieron entrar algunos carros de ese estilo. Al llegar Alexander se bajo del vehículo caminado por el pasto hasta estar en la zona donde se enterrará el cuerpo.

Alexander noto que los profesores del dojo ya estaban sentados, Hayato se levantó de su asiento al sentir la presencia de Alexander, asi que levanto a encontrarlo, al tenerlo frente a frente se puso a su altura y lo abrazo, Alexander devolvió el abrazo.

Alexander: ¿Lo sabía verdad, Hayato-san?

Hayato: Lo sabía, pero no era mi responsabilidad revelarte eso, él no quiso revelártelo para no preocuparte.

Alexander: Entiendo, gracias.

Hayato igualmente saludo a Mary y sus acompañantes, él noto a la niña y mujer de cabello blanco y supo quién era de inmediato.

Hayato: (El clan Nakiri, interesante...)

Alexander junto a su madre se sentó en los primeros asientos, él saludo a los acompañantes, que eran veteranos del ejército, altos funcionarios y dirigentes actuales del ejercito Japones. A pesar de Alexander no era full creyente, estos eran sus creencias, la misa era cristiana, a cualquier medio demonio o demonio le haría daño estar cerca de cosas relacionadas con la iglesia, pero Alexander al ser portador de la True Longinius esto no aplicaba para él.

Sacerdote: Hoy nos reunimos aquí para despedir a un ser querido, Shuwen Li. Aunque la tristeza nos embarga en este momento, también debemos recordar que su vida ha dejado una marca indeleble en cada uno de nosotros.

El sacerdote tomo la palabra e inicio la misa para pronto dar sepultura

Sacerdote: Shuwen era más que un nombre, era un vínculo, un amigo, un compañero y un ser humano amado. En cada sonrisa que compartió, en cada gesto de bondad que ofreció, Shuwen tocó nuestras vidas de maneras que son difíciles de expresar con palabras. Igualmente, un hombre que lucho por nuestro país, alguien con un grandes valores y orgullo, su partida nos deja con un vacío, pero también nos brinda la oportunidad de reflexionar sobre el impacto que tuvo en nosotros y en el mundo que lo rodeaba.

Recordemos su pasión, su alegría y su amor por la vida. Que su memoria nos dé fuerzas para seguir adelante y honrar su vida viviendo la nuestra de manera significativa y plena.

Que Shuwen descanse en paz, que se pueda reunir con su esposa e hija en el paraíso, y que su luz continúe brillando en nuestros corazones por siempre".