En el asiento trasero del coche de Killian, mi mente sigue procesando todo lo que acaba de suceder hace unos minutos. En un mes, conocí a un chico totalmente diferente a los demás y me hace sentir especial. Gracias a él soy más segura de mi misma. El cree en mí, entre otras cosas, pero resulta que Ethan es uno de los criminales más buscados de los Latin Serpents Disciples. La mafia que papá está buscando... Si averiguan que mi papá es un policía, estaré en graves problemas y no quiero desafiarlos. Tengo miedo de lo que me puedan llegar a hacer. Lo único que puedo hacer por el momento, es actuar normal y aguantar la noche.
— ¿Kira? —Alguien me pregunta a la distancia. No logro distinguir la voz pero inmediatamente volteo a ver a Ethan y recuerdo que me encuentro sentada en el auto de Killian. Me distraje durante unos minutos.
— ¿Qué? ¿Qué pasó? —Trato de mantener una postura serena, pero me termino sobresaltando ante la voz de Ethan.
— Nada... Solo quería avisarte que ya llegamos.
Killian baja la velocidad en cuanto el coche gira hacia la izquierda en una esquina y nos quedamos parados para que nos abran el garaje. El lugar se llama 'Auto lavados de Killian'.
— Hogar dulce hogar. — Killian comenta en un suspiro. Nos bajamos del coche. Killian permanece en el coche para poder meter el coche al garaje. Mientras tanto, Ethan me mira de una forma extraña. Me observa con detenimiento y estudia mi rostro.
— Kira... ¿Te encuentras bien?
— Si... Lo que pasa es que se me acaba de bajar la presión. Me mareo con facilidad cuando me subo a un coche. Ya se me pasará.
— ¿Te mareas estando en un coche? —Pregunta desconcertado.
— ¿Si?
— Qué curioso... Te veías bien hace media hora durante la carrera con Mason. También estabas en perfectas condiciones ayer en la noche cuando escapamos de los policías... ¿Me estás ocultando algo?
— Si... ¡Digo, no! No sé...
— ¿Estás segura que estás bien?
Asiento y le dedico una sonrisa falsa a Ethan. Afortunadamente una mujer nos abre el garaje antes de que pueda decir otra tontería.
— Bienvenido de nuevo, jefe.—La chica le dedica una sonrisa.
El lugar cuenta con un techo alto y grande. Las paredes están adornadas de arte callejero con colores brillantes. También hay coches elegantes de diferentes marcas estacionados a lo largo del garaje.
— Así que, ¿trabajas aquí?
— Algo así, Kira. Solo ayudo a Killian a ordenar algunas cosas de este lugar. La mayoría del trabajo lo hacen mis compañeros.
— ¿Y qué tipo de trabajos haces?
— La mayoría de las veces reparo autos, los pinto y hago promoción a las piezas más caras. Es por eso que se usar todo tipo de motores, frenos, entre otras cosas.
— Si. Ya me di cuenta.
Killian mete el coche al garaje y se despide de nosotros. Acto seguido se dirige hacia una oficina que se encuentra en la esquina. Una mujer alta de alrededor de 1.80 metros se acerca a mí y me mira durante un largo tiempo
— ¿Ethan? ¿Me vas a presentar a está chica?
— Evelyn. Esta es, Kira. Mi cita.
— ¿Tienes una cita? No me lo puedo creer. Para empezar, no se me ocurre ni una razón por la que una chica querría salir contigo. —Evelyn lo molesta.
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Destinados a ser cómplices: ¿vivir o morir?
AcciónEn Nueva York, una chica que parece ser inocente, está por conocer a Ethan, un chico que guarda muchos secretos y es un prófugo de la policía. Ethan termina desafiando a Kira y la envuelve en su mundo mafioso. ¿Podrán salir de esto juntos o alguie...