Aceptación

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Lauren Mckenna PoV

Jueves 1 de octubre 2020
00:20 am

a veces no puedes entender cómo las personas pueden meterse bajo tu piel tan rápido, a veces solo se necesita un poco de tiempo para hacerlas lo más importante sin saberlo, a veces puedes enamorarte sin quererlo, sin creerlo y sin razón alguna de peso, pero sucede, cuándo sucede a menudo no te das cuenta hasta que esa persona está en peligro o sientes que estás a punto de perderle, a veces solo se necesitan unos pequeños actos para descongelar el corazón más frío.

El corazón más frío es el de un SEAL, un SEAL que había dejado de creer en el amor desde que su madre la abandonó cuando solo era una mocosa, pero mentía totalmente porque mi corazón no era un completo bloque de hielo; la única pequeña mujer que tenía mi corazón era mi hija, pero si había una mujer allí afuera que derritió el hielo haciéndome creer en todas esas cursilerías era solo ella, esa mujer tan prohibida...Gigi tenía que compartirlo con la mujer que la miraba como si fuera su propia hija, y no podía sentirme más asustada pero a la vez me daba esa paz.

esa paz de la que todo SEAL hablaba cuando estábamos en el campo, cuando sus hijos e hijas se quedaban a lado de sus madres o padres, sabiendo que allí estarían completamente seguros. pensar en Spenser cuidando de gigi, amándola como a su propia hija me daba esa paz que necesitaba, ahora necesitaba hacer todo para que ella sintiera la misma paz que sentía al pensar en una gigi a lado de Camila esperando por mi mientras miran películas de Disney.

las calles estaban bastante calladas a esta hora de la madrugada mientras mi camioneta acelera el paso, respiro hondo pisando de manera brusca el acelerador mientras ignoraba las señales de tránsito, sabía que iba al límite de lo permitido pero no...no podía tranquilizar nada de mi sabiendo que Spenser estaba en peligro. trago saliva sabiendo que nunca antes hice algo como esto, no de esa manera y por las razones obvias que me llevaban a sentir la ira creciendo en mi interior sin ningún control.

-llamar a Stone- digo oprimiendo el manos libres junto al tablero electrónico de la camioneta puedo contar los tonos hasta que contesta -¿como demonios la seguridad fue violada?- es lo primero que preguntó antes de que ella conteste -sabes que olvídalo llego en cinco y más vale que ella esté bien o te juro Stone que voy a partirte las piernas-

No digo nada más, cuelgo el teléfono sin esperar ninguna respuesta. había sido muy tosca...mejor dicho fui una idiota con Camila después de ese momento cuando hablaba de Oliver pero, tenia mis razones de peso para sentirme de esa manera, no había mucho que decir no había mucho que contar, pero si mucha culpa sobre mis hombros. incluso la culpa de estar sintiendo esto que estaba creciendo en mi interior.

Camila Spenser PoV.

podía sentir el frío recorrer mi cuerpo mientras el agua de la ducha se dejaba caer sobre de mi en una cascada más que fría, estaba aterrada, no podía dejar de sentir ese terror correr por mis venas cada que una puerta se abría no podía evitar pegar un brinco, mi mano estaba adolorida, morada y bastante hinchada, estaba segura que podía haberme roto dos dedos en el acto de que me defendiera de mi atacante.

escucho un auto quemar sus llantas y cierro los ojos con fuerza, la puerta de la entrada es azotada con violencia excesiva lo que hace que pegue un brinco sobre las frías baldosas, me tapo los oídos con ambas manos intentando aislar todo el ruido, puedo escuchar gritos abajo pero tapo mas mis oídos hasta que siento que podría sangrar por la fuerza excesiva con la que intentaba calmarme pero me era casi imposible.

-Spenser- escucho a unos centímetros de mi cuando el agua fría de la ducha se detiene -he tranquila- miro los ojos verdes esmeraldas de mckenna cuando intentaba defenderme de nuevo y no dudo en ese instante -shh tranquila, estás a salvo-

The Madam Secretary And The bodyguardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora