Obsesión (Jimin FF)

16

Llegamos a casa y, como siempre, mi mamá no está aquí, así que Jimin entra conmigo. Subo a mi habitación y me dejo caer en mi cama. Jimin aparece con bolsas llenas de hielo y se sienta a mi lado.

Jimin: "Esto ayudará".
Presiona una bolsa contra mi cara y mi estómago, yo siseo de dolor.
T/n: "Lo siento."
Jimin: "¿Para qué?"
T/n: "Por llamarte, sé que-"
Jimin: "No, ni lo pienses. Nunca dudes en llamarme si estás en problemas, nunca. ¿Entendido?"
Sus palabras me sorprenden.
T/n: "Entendido."
Jimin: "Ahora acuéstate, necesitas descansar, mañana será otro día".

Lo obedezco y me acuesto, sosteniendo las dos bolsas de hielo contra mi cara y mi estómago. Me cubre cálidamente con mis sábanas y lo observo en silencio. Olvidé lo hermoso que es. Te extrañé...

Cuando termina, parece listo para irse y el pánico me invade con miedo. Llamo su nombre sin darme cuenta.

T/n: "Jimin..."

Esos ojos suyos me miran esperando continuar, pero no sé cómo pedirle que se quede. ¿Cómo puedo pedirle que se quede cuando la semana pasada le dije que se fuera y no volviera nunca más? Pero no quiero estar solo, no puedo estar solo esta noche.

Jimin: "¿Quieres que me quede?" En serio, puede leer la mente.
T/n: "Sí... no es necesario que lo hagas si no quieres... estaré bien, yo-"

No me deja terminar y salta al otro lado de la cama. Antes de que pueda decir algo, me rodea la cintura con el brazo y me atrae hacia él, abrazándome por detrás.

"Ahora estás a salvo, T/N." Él susurra.
Jimin: "Duerme, no te dejaré solo".
T/n: "¿Lo prometes?"
Jimin: "Sí, no iré, esta vez no".

Sus palabras envían mariposas a mi estómago. Cierro los ojos, sintiéndome segura en su fuerte abrazo. Me llega el sueño y en ese punto medio consciente y medio inconsciente, hablo.

T/n: "Te extrañé..."

Siento su calidez mientras se acerca más a mí. Siento un suave beso detrás de mi cabeza y luego un suave susurro.

Jimin: "Yo también bruja, yo también".

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Me despierto cuando siento la luz del sol golpeando mi cara. Me toma un tiempo recordar todo lo que pasó ayer. Jimin...

Me siento rápidamente, mirando al costado de la cama. Esta vacio. Mi corazón se aprieta en mi pecho. ¿Se fue? ¿Qué esperaba? ¿Que despertaría acurrucado conmigo?

Camino al baño para darme una ducha, pero cuando me miro en el espejo, mis ojos se llenan de shock y grito. Me veo horrible. El lado izquierdo de mi cara está todo hinchado y tengo un gran hematoma. No tenía idea de que el hombre me golpeara tan fuerte.

Me estremezco al recordar lo que pasó. Finalmente me ducho, me cepillo el cabello y salgo del baño sin ropa interior mientras me seco el cabello con una toalla.

??: "¿Bragas Pokémon?"

Grito cuando veo a Jimin sentado en mi cama, una bolsa de comida y dos cafés en mi mesa. Me cubro con la toalla.

T/n: "Pensé que te habías ido."

Él sonríe, esa sonrisa que derrite mi corazón acelerado.

Jimin: "Te dije que no me iría, ¿no? Solo fui a buscarnos algo para desayunar. ¿Cómo te sientes?"
T/n: "Estoy mejor, gracias".
Jimin: "Vístete y baja a comer, a menos que quieras hacerlo así sin ropa, no me importaría nada".
Él sonríe y yo me río sarcásticamente.
T/n: "Ja, ja, muy gracioso..."

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Me visto y bajo las escaleras donde Jimin me está esperando. Me siento frente a él y empezamos a desayunar. Como mientras intento ignorar a la hermosa criatura que tengo frente a mí.

Toma un sorbo de café.

Jimin: "Tengo que decirlo, de lo contrario no podré vivir en paz".
T/n: "¿Qué?
Jimin: "¿Pokémon? ¿En serio? Ni siquiera sabía que existía la ropa interior Pokémon.
Pongo los ojos en blanco, sonrojándome.
T/n: "Es mi ropa interior, se suponía que nadie debía verla".
Jimin: "Bueno, lo he visto".
Sus ojos atrapan los míos y me da una sonrisa traviesa.
Jimin: "¿Por qué te sonrojas?"
Casi me ahogo con la comida.
T/n: "No lo soy."
Jimin: "Lo eres".
T/n: "Simplemente hace calor".

Él sonríe de nuevo, esa sonrisa astuta que hace que mi corazón lata con fuerza. Intento terminar de comer lo más rápido posible, mirando a cualquier otro lado menos a él. Puedo sentir su fuerte mirada sobre mí, y eso me sigue poniendo nerviosa.

Jimin: "¿Qué pasó ayer?"

Levanto la mirada y me encuentro con sus ojos oscuros, sintiendo que puedo decirle cualquier cosa. ¿Por qué confío tanto en él cuando me rompió el corazón? Nunca lo entendería.

T/n: "Salí del trabajo y elegí tomar un atajo a casa".
Me lanza una mirada de desaprobación.
T/n: "¿Qué? Estaba cansada y pensé que no pasaría nada.
Jimin: "Eres una chica y caminas sola de noche. Los atajos oscuros no son algo que debas considerar".
T/n: "Ahora lo sé... de todos modos, caminé por un túnel y tropecé con tres hombres".

'¿Quieres algo, niña bonita?'

Aprieto los puños al recordar sus palabras.
T/n: "Se llevaron mi teléfono y uno de ellos..."

"Eres muy bonita, no llores".

Sus palabras no dejan de atormentarme. Jimin coloca suavemente su mano sobre la mía.

Jimin: "Ahora estás a salvo, T/n".
Respiro profundamente y trato de continuar.

T/n: "Dos de ellos se fueron, pero el otro me arrastró a la oscuridad y me dijo que no gritara pero lo hice, por eso me golpea. Le devolví el puñetazo y luego me patearon. El hombre que te llamó. Me escuchó y ese bastardo rápidamente se escapó."

Jimin: "¿Te hizo algo?"
Sus ojos muestran un atisbo de rabia y locura que me sorprende.
Jimin: "¿Te tocó?"
Miro hacia abajo y sacudo la cabeza.
T/n: "No, por suerte me escucharon justo a tiempo".
Estornuda en mi mano, claramente aliviado en su expresión.
Jimin: "Ya se acabó, estarás bien".

Él me sonríe. Por primera vez, no es una sonrisa arrogante o traviesa. Es una sonrisa genuina, una sonrisa que nunca me había mostrado antes, una sonrisa hermosa que me hace sentir un hormigueo por dentro y me aprieta el corazón.

Se ve tan sinceramente agradecido de que esté bien, que siento este estúpido impulso de besarlo.

Entonces es cuando me doy cuenta de que nunca nos hemos besado, aunque hayamos hecho otras cosas. ¿Por qué nunca me besó? Quiero pregúntaselo pero no tengo el valor de hacerlo.

Ha sido muy amable conmigo, pero eso no significa que sus sentimientos hayan cambiado, los míos tampoco. Jimin traza círculos en mi mano con su pulgar.

T/n: "Gracias, de verdad, no tenías que hacer todo esto, muchas gracias".
Jimin: "Estoy a tus órdenes, siempre, bruja.

Siempre...
Eso hace que se me revuelva el estómago y se me acelere el corazón. Se acerca y sostiene mi barbilla.

T/n: "¿Q-qué estás haciendo?"
Gira ligeramente mi cara para ver los moretones.
Jimin: "No creo que tengas que tomar nada, pero si te duele mucho, podrías tomar un analgésico para el dolor, pero estarás bien".
T/n: "¿Ahora eres médico?"
Se ríe un poco.
Jimin: "Aún no".
T/n: "¿Aún no?"
Jimin: "Quiero estudiar medicina cuando termine la secundaria".
T/n: "¿En serio?"
Jimin: "¿Por qué tan sorprendido?"
T/n: "Pensé que estudiarías derecho o administración como tu padre".
Jimin: "¿Para trabajar en la empresa de mi padre?"
T/n: "Sí, nunca te imaginé como médico".
Aunque serías el doctor más sexy y atractivo.
Jimin: "Eso es lo que todos piensan, estoy segura que mi padre también piensa lo mismo".
T/n: "¿No saben que quieres estudiar medicina?"
Jimin: "No, tú también eres la primera persona a la que le digo esto".
Eso me sorprende.
T/n: "¿Por qué? ¿Por qué yo?"
La pregunta sale de mis labios antes de que pueda detenerla. Jimin mira hacia otro lado.
Jimin: "No lo sé".
Me muerdo la lengua para no preguntar nada más. Él se pone de pie.

Jimin: "Bueno, debería irme".
Él me mira.
Jimin: "Espero que te mejores pronto. Si necesitas algo, llámame ¿vale?"
T/n: "Estaré bien."

Ni siquiera tengo un teléfono para llamarlo, pero no digo nada, no quiero parecer necesitada. Jimin se va y observo mientras cierra la puerta. Suspiro ruidosamente.