Poner un pie en la reserva es inimaginable, toda su vida se ha tenido que mantener lejos de ahí, ni la sola idea era permitida por su padre, lo cuál es raro: el nació en ese lugar.
Realmente nunca quiso ir en contra de él, no tenía porque, bueno, es...
Salía de la escuela a mi encuentro con Aria, afortunadamente esta salida no sería clandestina, por fortuna mamá cedió a cubrir mi espalda después de decirle donde estaría y con quién, fue un poco difícil más no imposible.
En un tramo del camino fui detenida por Tyler, un chico de ojos azules, rubio oscuro y piel ligeramente bronceada, compartíamos una que otra clase pero no lo había visto hace unas semanas, dato importante que olvide: es primo de Mike.
—Ey, Clock.
—¿Si? — acomodé mi mochila esperando que siguiera pero en su lugar solo tenía una gran sonrisa —. ¿Estás bien Newt?
—Solo tenía ganas de verte — metió las manos a su chaqueta —. Regresé hoy.
—Oh, ¿te habías ido? — ahora explicaba su ausencia —. No tenía ni idea, me alegra verte por aquí de nuevo.
—Si, tuve que quedarme en cama y ahora que estoy bien me gustaría saber si te gustaría ir a comer. Ya sabes, me podrías poner al día de los partidos que se han hecho.
—Lo siento pero no he ido a uno últimamente y... — encogí mis hombros viendo a mi motocicleta encontrando a Aria para mi sorpresa —. Tengo planes con mis amigas.
—Será para la otra entonces.
El abrió sus brazos con la intención de acercarse, me dedique a sonreír dando un paso para retroceder elevando mi puño a lo que el rápidamente capto.
Momento incómodo.
—Mejor así.
El asintió sin quitar su sonrisa, suspire siguiendo mi camino a la castaña.
—¿Qué fue eso? — una risa nerviosa acompañaba sus palabras.
—No importa — buscaba las llaves en mi bolsillo, no quería hablar de eso —. ¿Y Bella? ¿No viene?
—No pude contactarla — ya estaba sobre el vehículo, tendí el casco en una instrucción silenciosa que se lo pusiera —. Gracias, ¿no es mejor que te lo pongas tú?
—Créeme, lo necesitas más que yo, anda, necesito la dirección.
—Ups, creó que tenemos un problema.
La vi esperando que se tratará de una broma porque de verdad que no le encontraba la gracia.
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—¿Estás nerviosa? — su voz me hizo cosquillas sobre el cuello.
—Pfff, ¿por qué? — moví mis hombros tratando de quitar la tensión en ellos —. Estoy de maravilla.
Conduje sin una dirección fija, esperando que en un punto Aria reconociera algo pero al no tener éxito me detuve viendo sobre mi hombro a mini Swan quién lucia confundida.
—Llama a Haz y dile lo que pasa.
—Podemos llegar sin ella, solo confía en mi.
—Lo siento pero no creó que eso pase, anda o llegaremos tarde.
