DESTINOS CRUZADOS

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En medio de la frenética energía del escenario, Jeonghan y Mingyu, dos de los miembros más carismáticos de Seventeen, se encontraban en su elemento. Con cada paso de baile y cada nota cantada, el público enloquecía, atrapado por el encanto de los dos ídolos. Sin embargo, detrás de las luces brillantes y las sonrisas radiantes, se ocultaban secretos y tensiones que amenazaban con desestabilizarlo todo.

̶̶  ¿Estás listo para esto, Mingyu? - preguntó Jeonghan, ajustando su micrófono mientras observaba el mar de fans que esperaban ansiosos su actuación.

̶̶  ¡Claro que sí, hyung! -respondió Mingyu con una sonrisa confiada, aunque en su interior sentía un nudo de nerviosismo.

El concierto comenzó con una explosión de energía, y pronto Jeonghan y Mingyu se vieron envueltos en la magia del escenario. Sin embargo, a medida que avanzaba la noche, las tensiones comenzaron a hacerse evidentes.

Durante la presentación de "Holiday", Jeonghan y Mingyu estaban especialmente cerca el uno del otro intercambiando roses inocentes y otros no tanto y susurros que erizaban la piel del otro sin ser concientes de las miradas que tenían encima

A medida que el concierto llegaba a su clímax, Jeonghan y Mingyu se encontraron cada vez más cerca, tanto física como emocionalmente. En medio de la pasión del momento, se permitieron perderse en la intensidad del espectáculo, olvidando por un instante las complicaciones de sus vidas personales.

Al final del concierto, con el sudor aun goteando por sus rostros, Jeonghan y Mingyu se miraron el uno al otro con una mezcla de confusión y deseo. Sabían que lo que acababa de suceder entre ellos era peligroso y prohibido, pero no podían negar la atracción que los había consumido.

̶  Esto... esto no debería haber pasado -murmuró Jeonghan, apartando la mirada con pesar.

̶  Lo sé, hyung, lo siento... -susurró Mingyu, su voz llena de falso arrepentimiento.

En la privacidad de uno de los baños del lugar, Jeonghan y Mingyu se encontraron solos por primera vez desde el tumultuoso concierto. A pesar de la carga emocional que pesaba sobre ellos, la chispa de deseo seguía ardiendo entre ellos.

Con miradas cargadas de intensidad, se acercaron lentamente el uno al otro, dejando a un lado por un momento el raciocinio. Sus labios se encontraron en un beso ardiente, hambriento de la pasión que habían reprimido durante tanto tiempo.

Las manos de Jeonghan se deslizaron por el cuerpo de Mingyu con urgencia, mientras que Mingyu respondió con igual fervor, perdido en la sensación embriagadora de tener a Jeonghan tan cerca.

Con hambre Mingyu apretó los muslos de jeonghan mientras lo levantaba para ponerlo encima del lavamanos, el mayor apretó sus piernas en la cadera de mingyu haciendo que sus bultos se rozaran haciéndolos gemir

La habitación se llenó de gemidos ahogados y susurros desesperados mientras se entregaban al deseo que los consumía. Cada caricia, cada beso, era una promesa de liberación, un escape momentáneo de las complicaciones de sus vidas.

Mingyu quitó desesperadamente la camisa y pantalón de jeonghan mientras se deshacía de su propia vestimenta; Por un momento quedo estatico por la vista de su Hyung sonrojado con una fuerte erección viéndolo con sus ojos dilatados, lo besó ardientemente enrollando su lengua junto a la de su mayor, acaricio el bulto de jeonghan provocando un gemido ahogado en sus labios, lamio y mordio suavemente el cuello de Han sin dejar marcas pero en cambio apretó fuertemente el trasero del rubio quitó la ropa interior del chico y sin pensarlo un segundo lamio el miembro que goteaba con deseo, luego lo metió por completo en su boca, mientras continuaba su labor, ingreso un dedo en la entrada del rubio haciéndolo casi gritar desesperadamente

Jeonghan movía sus caderas expectantes por más de ese tacto que lo estaba drogando, pero mingyu se detuvo cuando ya había logrado introducir 3 dígitos y lo bajó de su improvisado asiento

̶ Quiero tu boca acá Jeonghanie- Dijo el chico alto mientras sostenía su miembro erecto

El tono dominante de Mingyu cautivo a Jeonghan haciéndolo caer de rodillas casi instantáneamente engullo el miembro con hambre movió su lengua en la punta haciendo que Mingyu apretara su cabello y lo introdujera completamente marcando el ritmo acelerado para después obligarlo a pararse y besándolo sin importarle que hace unos segundos tenia su miembro en la boca, levantó una de las piernas de jeonghan mientras alineaba su polla en la entrada palpitante del mayor, enterrándola lentamente hasta tocar el fondo de Jeonghan los dos gimieron con éxtasis para seguir el vaivén rápido y luego lento, para después voltearlo obligándolo a poner sus manos en la pared, mientras las grandes manos de mingyu acariciaban su abdomen y pezones apretándolos y masajeándolos, al mismo tiempo que volvía a introducir su hombría rudamente.

Y en ese momento, en medio de la oscuridad y el éxtasis, Jeonghan y Mingyu se encontraron a sí mismos completamente perdidos el uno en el otro, sin pensar en las consecuencias de sus acciones, solo viviendo el presente con una pasión desenfrenada que los consumía por completo hasta que ambos llegaron al éxtasis

Por unos segundos solo se escucharon los ruidos lejanos y sus respiraciones agitadas y risas cómplices se dieron un último beso y comenzaron a cambiarse; Sin embargo, antes de que pudieran decir algo más, fueron interrumpidos por la llegada de sus parejas.

Seungcheol y Wonwoo, los novios de Jeonghan y Mingyu respectivamente, abrieron la puerta y se acercaron con expresiones de sorpresa y decepción en sus rostros. Habían presenciado los toques y susurros entre Jeonghan y Mingyu en el escenario, y sus corazones se llenaron de dolor al darse cuenta de que habían sido traicionados.

̶  ¿Qué está pasando aquí? -preguntó Seungcheol, intentó mostrarse fuerte, pero fue traicionado por su voz temblorosa de emoción contenida.

̶  Lo siento, Seungcheol... Wonwoo... Yo... -balbuceó Jeonghan, incapaz de encontrar las palabras adecuadas para explicar lo que acababa de suceder.

̶  No hay nada que explicar -intervino Wonwoo, su tono helado mientras apartaba la mirada de Mingyu.

Los dos implicados intentaban acomodar su ropa Seungcheol no apartaba la mirada de Jeonghan pero Wonwoo lo tomó del hombro y así los dos hombres salieron del lugar dejandolos atras

En medio del silencio incómodo, Jeonghan y Mingyu se enfrentaron a las consecuencias de sus acciones. Sabían que habían herido profundamente a las personas que más amaban, y no había vuelta atrás.

̶  Lo siento, hyung... Lo siento mucho... -susurró Mingyu, con los ojos llenos de lágrimas.

̶  Lo siento también, Mingyu... No sé cómo pudimos llegar a esto -respondió Jeonghan, su voz llena de pesar.

Pero, aunque lamentaban profundamente lo que había sucedido, sabían que las heridas causadas por su traición no se curarían fácilmente. Habían cruzado una línea que nunca deberían haber traspasado, y ahora tendrían que enfrentar las consecuencias de sus acciones, sin importar lo dolorosas que fueran.

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No sean infieles 

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