Ser amado -COMPLETO-

Capítulo 3

Severus Snape era un hombre muy confundido, y solo había una razón para ello: Harry James Potter, el engendro de su némesis de la infancia. Deseaba odiar al niño. El odio fue fácil. Podía lidiar con el odio, pero sus sentimientos con respecto al niño eran más complicados. Había intentado durante once años odiar al hijo de James Potter, pero no pudo odiar al hijo de Lily Evans, la única persona que se hizo amiga de él y de la mujer que aún amaba.

Aunque nadie más se dio cuenta, salvo quizás Dumbledore, Shape estaba increíblemente nervioso cuando los primeros años fueron introducidos dentro del castillo para la Clasificación. Nunca había visto al niño, y temía lo que sucedería cuando se conocieran. Cuando lo vio entrar en el Gran Salón por primera vez, su resentimiento de la infancia brotó en su pecho. El niño borracho era una réplica exacta de su padre.

Excepto por sus ojos. Tenía los hermosos ojos verde esmeralda de Lily Evans. Y ese era su dilema. No podía amar la imagen de James Potter más de lo que podía odiar los ojos de Lily Evans. Severus Snape solo estaba vivo debido a su capacidad para enmascarar sus emociones y pensar rápidamente, pero no pudo, por su vida, decidir cómo manejar a Harry Potter.

El niño que fue clasificado en Ravenclaw solo sirvió para complicar aún más el asunto. James Potter era un Gryffindor hasta la médula, mientras que Lily habría prosperado en cualquiera de las Casas. El tiempo que le tomó al sombrero a Sort Potter sugirió que también podría haber cabido en más de una casa. Hubiera sido mucho más fácil odiar a un Gryffindor Golden Boy.

Al final, decidió que no podía soportar ver los ojos de Lily Evans mirarlo con malicia. Le daría una oportunidad al niño, pero aún tenía que demostrar su valía.

Sus emociones conflictivas cruzaron su rostro antes de reemplazar rápidamente su máscara cuando Harry Potter entró en su salón de clases para su primera lección de Pociones. Snape intentó mantener su neutralidad habitual cuando trataba con los Ravenclaws y Hufflepuffs. Mientras polarizaba a los Gryffindors y Slytherins, las otras casas generalmente proporcionaban un término medio que no odiaba ni favorecía.

Se obligó a resistir la necesidad de insultar a Potter cuando verificó la asistencia, pero aún tenía que probar al niño. Dio su discurso habitual glorificando el arte de la elaboración de pociones, y comenzó el interrogatorio. "Señor Potter, ¿qué obtendría si añadiera la raíz en polvo de asfodel a una infusión de ajenjo?"

"Librado de la Muerte Viviente, señor."

"Dónde buscarías si te dijera que me encontraras un bezoar?"

"El estómago de una cabra, señor."

"Cuál es la diferencia entre monkshood y wolfsbane?"

"No hay diferencia, profesor."

Quizás, él pensó, es más como Lily que su padre. "Usted está... correcto, Sr. Potter." Fue entonces cuando Severus Snape decidió ignorar su sorprendente parecido con James Potter y tratarlo como el hijo de Lily Evans.

Las cosas habían caído en una rutina para Harry. Conocía su camino alrededor del castillo y disfrutó de la mayoría de sus clases, aparte de Defense Against the Dark Arts. Había esperado que Defense fuera emocionante, pero era terriblemente aburrido. Su clase de Historia de la Magia no era algo que considerara particularmente estimulante, pero al menos era educativo. Algo era extraño sobre Quirrell; simplemente no estaba seguro de qué. El hombre parecía tener miedo de su propia sombra, pero Harry no pudo evitar ser escéptico. Su tartamudeo parecía ser forzado. Harry decidió vigilar muy de cerca al profesor de Defensa.

Tuvo problemas para leer a Snape. Según todos los informes, el hombre era un talentoso Maestro de Pociones, uno de los mejores del mundo, pero la forma en que miraba a Harry era un poco desconcertante. Era un maestro competente, suponía Harry, pero lo hacía sentir mal a gusto. ¿Por qué Snape lo soltó el primer día de clase? Harry inicialmente creía que Snape estaba tratando de prepararlo para que fracasara, pero el hombre parecía extrañamente complacido después de que Harry respondiera sus preguntas.