Si tienes corazón

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¿Siquiera sientes amor por mí?

Quizás no, pero podrías intentarlo.

Es fácil, solo basta con brindarme una caricia o algún cumplido.

Te enseñaré, no te preocupes.

Hemos pasado por tanto que está situación no nos dañará.

Sé que tienes un corazón dispuesto a amar.

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No hay excusa para justificar lo que anteriormente sucedió. Cualquier argumento será infundado si lo utilizas para defender un acto aberrante.

Sí, sucedió una vez, existe la posibilidad de que no vuelva a suceder, pero quién te acredita, quién te certifica que él no volverá a arremeter en contra de tu voluntad.

No sé trata de obtener una disculpa, no cuando la persona que te dañó es incapaz de aceptar su culpa. Esto no es un juego en dónde tu victimario encuentra rendición, recapacita sobre sus actos, y el cielo se ilumina para servirle de guía en su proceso de sanación.

Él no sé convertirá en lo que has anhelado, él ni siquiera será capaz de brindarte el cariño que tanto necesitas. Sí, sé que es el hombre que has esperado, lo que el destino te envió, pero se equivocó, ahora no es más que una pesadilla.

Sabes que la serenidad de su relación no volverá, que esos días de dulzura no encontrarán espacio en este nuevo comienzo. Solo mírate, observa tu reflejo para darte cuenta que tu bonito engaño no podrá mantenerse con el tiempo.

“Él me quiere”, repites pausadamente, “Él me ama”, es la siguiente frase que intentas pronunciar, pero el dolor afecta la articulación. Sabes que tus palabras no tienen el efecto que necesitas, tu corazón se aferra a un amor inestable.

Tus intentos están condenados al vacío. Así repitas tales palabras hasta quedarte sin aliento, no lograrás tu cometido. No lo harás, no lo harás, porque el amor te puede cegar, te puede convertir en un fiel creyente de lo inexistente, pero la realidad, la realidad siempre estará ahí y aunque intentes vivir en tu burbuja construida a base de engaños, no podrás escapar de ella.

¿A quién quieres convencer con esa mentira?

Explícame, brindame aunque sea un motivo, porque con lo vívido créeme que me asusta la forma en que deseas confiar en él. No hay fundamento que sea de apoyo  para defender tu delirio, así que deja de aferrarte a una ilusión que solo te llevará a la desdicha.

Sí, mi vida, sé que tu amor te imposibilita apreciar la realidad. Te comprendo, pero ayúdame, despierta para darte cuenta que este fuego inconmensurable está acabando con lo que tanto amas, se encendió y está destruyendo todo lo que a su paso logra tocar.

Mírate, por favor. Observa el estado de tu rostro, tan siquiera atrévete a revisar las heridas que lo adornan. El espejo está ahí, no es tu enemigo, solo te ayudará a ver en lo que él te convirtió. Duele, sé que estás sufriendo a cada minuto, pero debes observar tu reflejo. Atrévete a visualizar la realidad, sé que es difícil, pero debes hacerlo.

Ten piedad por ti, y por todo lo que una vez sucedió. Ten compasión por tu alma que clama una dosis de racionalidad. Sobre todo, ten amor por tu vida que está llena de vigorosidad, pero si te quedas junto a él, si no te alejas en este momento, cuando tienes oportunidad, ten por seguro que se marchitara.

Hazme caso, no regreses a su lado. Estás a dos puertas para encontrar la paz, estás a dos puertas para resguardar tu bienestar, y estás a dos puertas para salvar tu vida. Hazme caso, él no te detendrá, ni siquiera se atreverá a mirarte, estás a tiempo de alejarte de este infierno.

Sé que eres capaz, solo confía en ti, aprovecha está oportunidad. Lo lograrás, no habrá reproches, solo habrá tranquilidad.

Hazlo, por favor. No debes culparte sobre lo sucedido. Tú solo has confiado en una persona que te otorgó afecto, entregaste tu voluntad porque quisiste asegurar tu felicidad a su lado, e intentaste que el universo lo mantuviera con bien. Tú solo has confiado, y si te han engañado, no eres culpable, así que tus lamentos no tienen razón.

Lágrimas recorren tu lastimado rostro, te has convertido en una mezcla de afirmaciones inconclusas. No debes agobiar tu cabecita de pensamientos negativos, si estás llorando es porque tu corazón agoniza.

Recuerda tu valor, piensa, sé que puedes, piensa en ti, y en lo que verdaderamente necesitas.

Sergio, tienes una vida esperándote en el exterior, afuera de esta habitación está todo por lo que te has esforzado, no dejes que tu mente te abandone. Has luchado más de lo que has querido, y has conseguido todo lo que una vez soñaste. Sé que podrás diferenciar entre lo que necesariamente debes proteger y lo que urgentemente debe desaparecer de tu vida. Solo así podrás sentir liberación, solo así podrás sentir tranquilidad.

Quisiera ser tu voz, y no solo es un pensamiento, quisiera ayudarte, brindarte la fuerza que tu alma necesita. Servirte de guía en este pesado mundo, orientar tus movimientos para que finalmente puedas librarte de aquella oscuridad. Pero sé que no sucederá, has nublado tu verdadero juicio dejándote llevar por un sentimiento que en algún momento te ahogará.

Incluso así, sabiendo que nada logrará remediar las consecuencias, eliges confiar. Quizá tu motivación se enfoca en los sentimientos que tu alma alberga, algún tonto enamorado que justica la verdad a través de la mentira.

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Sí, cariño, tú tienes corazón, tú sientes al igual que yo, entonces, ¿Por qué no eres capaz de comprender mi dolor?




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Ni idea

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⏰ Última actualización: Mar 31 ⏰

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Mi voz de dolor || Chewis Donde viven las historias. Descúbrelo ahora