Levi Loud es sin duda alguna la mayor mente científica que pudo haber parido el planeta Tierra, es un verdadero milagro y una gran marravilla. Sorprendentemente, sus padres Rita y Lynn, son bastante promedios en inteligencia, así que resulta increíble que de ellos haya salido alguien como Levi. Podría hacer una gran lista de sus logros, Y SOLO TIENE 6 AÑOS, pero lo que nos concierne ahora es su más reciente hazaña: El Otro Dimensionador (nombre robado de Phineas y Pherb, su película del 2011). Gracias a ese nuevo invento crear portales a otras dimensiones ya es posible, aunque parecía nada más que fantasía o ciencia pero de la ficticia. Está concentrada en una pulsera, es conveniente. Levi ya hizo los cálculos necesarios: El Otro Dimensionador solo lo conduciría a dimensiones donde el ser humano pueda coexistir, pues en esas mismas dimensiones la humanidad existe. Algunos sucesos históricos serán diferentes, las personas no serán las mismas, pero pro escencia serán dimensiones parecidas a la suya y no habrá ningún riesgo por el cual preocuparse. Podrá explorarlas él mismo sin la la presencia de algún peligro, es seguro. No obstante, pensó en sus hermanos, creía que ellos por meramente ser sus hermanos tendrían el privilegio de ser sus misioneros, junto con él mismo. Ya descartando a León, el bebé de la familia, los 10 irían a explorar y estudiar otras dimensiones. Tomarían un día completo para eso. Será divertido y educativo. Ese mismo día sus padres querían ir de viaje ellos solos. No suena bien salir solo con tu pareja después de tanto tiempo? Ciertamente los niños son un estorbo aveces. Así que todos en la sala estaban discutiendo sobre cómo convencerlos de llevarlos consigo. ¿En serio dejarían a sus padres ir sin ellos a Las Vegas?
Cuando Linka, la única mujer de los 11 se levantó para explciar su típico plan, en este caso cómo convencer a sus padres de llevarlos con ellos, Levi la interrumpió, insistiendo en que puedan hacer algo mejor que ir a las tan sobrevaloradas Vegas en compañía de mamá y papá.
Loki: Bien, habla...
Levi sacó del bolsillo su pulsera y les explicó las ya mencionadas marravillas que El Otro Dimensionador puede hacer. Nadie le creyó, hasta que oprimió un botón y un portal se manifestó para sus ojos. Inmediatamente Levi lo cerró.
En la otra dimensión, una rubia, la segunda mayor entre sus hermanas, creyó ver una luz extraña, que rápidamente se esfumó de su incrédula vista )y comprensió).
Levi: ¿Quieren venir conmigo y explorar otra dimensión personalmente?
Todos: ¡Sí!
Levi: ¡Excelente! Partiremos cuando mamá y papá se vayan, en 1 hora. Traigan una maleta, que nos quedaremos a dormir en un hotel, pasaremos una noche en otra dimensión, pero no se confundan, en menos de 24 horas vamos a volver a casa.
Loki: Pero, cuando llegue la hora no podemos volver aquí y seguir explorando por la mañana. Por qué gastar dinero en un hotel?
Levi: Te lo explico después, hermano mayor ―quería hacer suspenso y sembrar la incerdidumbre.
Loki: Es para ahorrar combustible, supongo.
Levi: ... Sí, prácticamente... *Je*.
Una vez despedirse de los padres, cada uno sentía que se les aceleraba el corazón de la emoción. Le preguntaron a Levi si era posible conocer a sus ontrapartes, justo cuando él estaba por abrir el portal. Ya ajustó todo para que el punto de partida sea en un lugar aislado, nadie los va a ver.
Levi: No, no lo considero prudente.
Una pena: ya habían teorizado bastante sobre cómo son en la otra dimensión o en varias otras. Lexx quería pensar que era un gran rey y gobernante, Lars quería ser un vampiro, Linka una superheroína, entre otros. Una interacción con sus contrapartes sería estupendo.
Cruzaron el portal, de su vivienda a un callejón grande. Los viajeros interdimensionales caminaban en la otra Oroville (llamada allí Royal Woods) como turistas. La ciudad conocía bien su propio nombre y lo que significaría, pues gozaba de muchos árboles por doquier, puntos verdosos, a diferencia de su homólogo Oroville que hace no mucho estaba desértica. La falta de árboles favorecía a la contaminación acústica y el riesgo de inundaciones. Y estéticamente era un buen detalle del que podía presumir Royal Woods pero no Oroville. A continuación se apoyaban de un taxi para su turismo interdimensional, pero también recorrían con sus propios pies en algunas partes. Los locales eran algo diferentes, para empezar existía Flips Food y Fuel, una tienda de conveniencia. El sustituto y homólogo de Snacks y Más. ¿El servidor? Bueno, remplazando a Michelle, la mujer joven, bella y considerada de su dimensión, saluden a Flip, un viejo gordo y soez (una pena, de joven era un papucho, su cara parecía tallada por los mismos ángeles, siendo complemententado por un comportamiento elegante y refinado). Ese hombre era tacaño y desconsiderado, se le notaba en la cara fácilmente. Seguro sería capaz de venderles su propia cobija, la cobija de León, si tanto quieren recuperarla... Cuando visitaron su tienda lo único que compraron fue un flip, para cada uno. A diferencia de Flip, Michelle no vendía smoothies, mucho menos unos con ese cautivante sabor. No era necesario conocer en persona a su otro padre para descubrir que es propietario de un restaurante: La Mesa de Lynn, mientras que su padre es gerente de Finanmex (nombre ficticio para un banco). Y ni si quiera le gusta la cocina, es su madre la que se ocupa de esa tediosa obligación doméstica. O, quizá solo sea otro individuo, con el mismo nombre. Pero mientras que Michael es un nombre muy popular, Lynn no, por lo que quizá no sea una coincidencia.
No obstante, no se puede pasar por desapercibido el cambio de sexo, pues ciertos transeuntes eran sospechosamente parecidos a ciertos conocidos. Mientras caminaba Linka pudo haber jurado que los chicos que pasaron al otro lado de la acera y que incluso voltearon a verla con ojos de "te pareces a alguien que conozco"
(... ¿no eres su gemela?)
eran su grupo de amigas. Era obvio que ese chico afrodescendiente con lentes era Claudia Male. Y él por su lado sospecharía que ella era **** fem. Ya alejados de su vista, se lo comentó a sus hermanos. Seguían recorriendo.
Loki: Sí, nosotros también los vimos, eran literalmente tus amigas versión hombre. Pero más aún, y espero ser el único que haya visto esta vez, hace un kilómetro les prometo que ví a una rubia que literalmente parecía el clon femenino de Carlos.
Carlos Prigney, un buen amigo para Loki, aunque solía tenerle envidia, pues lo creía mejor que él en todo y lo veía como un niño rico y malcriado. Paradójicamente Carlos era quien también pensaba que era Loki el superior entre los dos. Que verde es el pasto en el otro lado, ¿no? Cuando lo conoció mejor, ciertamente era mejor persona que eso.
Loki: ... Aunque no todos, con él estaba Baki.
Lane: ¿Baki no era tu amigo pelirrojo?
Loki: Sí. El otro Baki también es hombre.
Luke: Entonces, ¿Flip sería Michelle o no?
Levi: No, su retrato no coincide, es poco probable que sea Michelle si fuera de sexo masculino y estuviera envejecido.
Linka: La otra Linka quizá sea un chico ―propuso reflexiva.
Lane: Pues el otro Lane sería Lana y el otro Loki Loca, jajaja.
Loki: ―frunce el ceño.
Lynn: Bueno, ¿por qué no vemos nuestra otra casa ahora? Quizá sea diferente, quizá podamos ver a nuestros otros yo por las ventanas.
Levi: No, primero vayamos ya al hotel ―señaló arriba, apuntando que el sol se estaba ocultando.
Lexx: Ahg, tú y tu hotel, ¿por qué no regresar a nuestra dimensión y volver mañana?
Levi: No, es para ahorrar combustible ―esbozó una sonrisa inocente, que en verdad parecía ocultar algo. Y ellos lo sabían, pero sería inútil cuestionar al capital del viaje.
Tomaron un último taxi para ir donde el hotel. Allí finalmente conciliaron el sueño. No obstante, para Linka esta vez era mucho más que un sueño ordinario. En su sueño contempló a un chico, albino, de su edad. Tuvo visiones de él. Primero sonreía y reía, al lado de amigos y familia, pero luego...
Gracias por leer. Si te gusta esta lectura, agradecería tu voto como muestra de apoyo. Se despide Genófino.
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Después de la Tortura
أدب الهواة(No tanta suerte). La oscuridad te atrapa y te absorbe, pero algunas veces aún queda una pequeña luz, una luz que te saca de esa horrible oscuridad. Ese es el caso de Lincoln Loud, su familia, fervientes creyentes de la suerte y de que él es emisor...