Hunter:
Faltaba poco para que se cumpliese una semana desde las pruebas de Oddy y su ingreso oficial al aquelarre. Cómo a todos, le habían dado una habitación y, por alguna razón, eligió la que estaba junto a la mía que, para su gran suerte, no la habitaba nadie.
Aún así, Oddy no dormía ahí. Si bien había pasado algunas de sus cosas para allá, incluyendo unas que el propio aquelarre le otorgaba, pero ella seguía quedándose en mí habitación. No le pregunté el por qué, sinceramente ya no me fastidiaba si estaba ahí o no; me daba igual.
Seguía sorprendiéndome su forma tan rápida de aprendizaje. Había memorizado a la perfección ciertas cosas que le señalé y a pesar de que las pruebas hubiesen terminado, ella continuaba las prácticas diarias. Me seguía a todas partes y cumplía al pie de la letra cualquier mandato que le daba, y hasta el momento, no habíamos tenido inconvenientes con nadie más en el aquelarre.
Eso me tranquilizaba, todo se había mantenido en calma y era lo que esperaba, sin embargo, debo decir que superó un poco mis expectativas.
A pesar de que normalmente estábamos juntos, ese día ella me dijo que se reuniría con los Blight a mediados del medio día, y como no tenía nada muy importante que hacer la dejé ir sin objetar.
Tenía como una de mis tarea revisar el funcionamiento del Conformatorio hasta ahora. Luego de lo que sucedió con la Dama Búho, su hermana y la humana, el comportamiento de los que seguían ahí nos estaba dando dolores de cabeza. Hacían bullicios y amenazas continuas, insultando al aquelarre e incluso al propio Emperador.
Aunque la verdad tenía el pensamiento de que eran inventos de quienes se suponía vigilaban el lugar, ya que, cuando fui, todos estaban en silencio, como solían estarlo siempre. Me dieron algunas explicaciones inconclusas que terminé ignorando completamente; cómo amaban hacerme perder el tiempo.
-Hey, amigo -me saludó Steve mientras cruzaba otro de los pasillos-. ¿Cómo va todo?
-Ah, pues, hasta ahora bastante tranquilo -respondí un poco orgulloso-. Vine a supervisar unas cosas pero ya me iba.
-¿Y Oddy? -preguntó-. ¿Cómo está ella?
Estaba notablemente preocupado por el estado en el que podría encontrarse ella. Me pareció extraño, en lo que sabía, Odette no había tratado formalmente con él, y de ser así, olvidó contármelo.
-Ella... está bien -dije, algo pensativo-. Está tranquila, aunque me parece que está un poco entristecida, pero está bien.
-¿Entristecida? -repitió-. Pues, me sorprende que no sea nada muy grave...
-¿Qué? -dije, sin entender.
-Conocía a su hermana, y estuve al tanto de lo que les pasó -dijo, nostálgico-. Su trauma con el aquelarre debe de seguir vivo y ardiente, más ahora que oficialmente vive aquí.
-¿Conocías a su...hermana? -repetí, atónito.
-Sí, bueno, estudiamos juntos una temporada...-respondió, su tono de voz aún sonaba extraño-. Colette era una buena persona. Oddy se parece mucho a ella.
-¿Colette?
-Ese era su nombre, ¿Oddy no te lo dijo?
-No, bueno, no cómo tal...-murmuré-. Recuerdo que el día que me habló de ellos se refirió a su hermana como "Lette".
-Ese era su apodo -ahogó una risa-. A diferencia de Odette, usar las primeras letras de su nombre para llamarle de cariño sonaba raro, así que comenzaron a llamarle "Lette", o "Letty", como yo solía decirle.
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Yin-Yang | The Owl House
Teen FictionDos polos opuestos que se complementan a la perfección. Hunter, Guardia Dorado y mano derecha del Emperador Belos, aparentemente llevaba una vida normal y completa, en sus pensamientos no existía cosa alguna que le faltara. Pero pasaba por alto el...