One shots Liga BBVA

Marcelo Flores || 1

PoV Samara

Ser jugadora de Rayadas y que tu novio sea jugador de los Tigres es complicado, pero gracias a eso existe cierta paz entre los equipos, claro que aun existe cierta rivalidad, pero eso es otra historia.

En este momento me estoy preparando para jugar un clásico en el estadio universitario mientras mi novio trata de adivinar a cual equipo apoyar, si a Rayadas, donde están su hermana mayor Silvana y su novia, o a las Amazonas, donde juegan el y su hermana menor Tatiana.

— Honey, which jersey do I wear? —me pregunto Marcelo angustiado mientras me enseñaba la jersey de rayadas y la de tigres.

— Con el que mejor te sientas amor, ni Silvana ni yo nos vamos a enojar si apoyas a Tati y a las demás — dije peinándome.

Sabia de antemano que Marcelo estaba en un conflicto sobre a quien apoyar.

— How are you so sure? Silvana has her character, she will probably hit me if she sees me wearing Tatiana's shirt —dijo con un puchero.

— Cariño, Silvana los ama tanto que es imposible que los golpee —dije acomodando su cabello.

Al final Chelo se decidió por la camisa de Tigres.

Cuando llegamos al estadio, Marcelo me acompaño hasta los vestidores, donde nos encontramos con mis cuñadas.

— Hola hermosas —dije saludando a mis cuñadas.

Pude ver a Silvana con el uniforme ya puesto y a Tatiana con su camisa ya puesta.

— Hola guapa ¿cómo estás? ¿Como te ha tratado Chelito? —me pregunto Tatiana abrazándome.

— Bien, hace sus berrinches, pero es soportable jajaja —dije riéndome

— Amoooor —me reclamo Marcelo al haber ventilado con sus hermanas que era como un niño pequeño.

— Marcelo, no tienes porque quejarte, ya te conocemos —le dijo Silvana.

En ese momento llegaron los directivos a decirnos que comencemos a cambiarnos, por lo que Marcelo se fue al palco junto con las demás familias de las jugadoras.

En el vestuario me puse mi uniforme con el dorsal número 6 y en la espalda decía "S. Arteaga" algo que no les dije es que mi hermano es el "gran" Gerardo Arteaga, que acaba de ser la nueva adquisición de los Rayados, por lo que ahora voy a tener que aguantar que me ponga gorro todos los días.

En fin, estábamos en el túnel esperando el llamado para salir a la cancha tomadas de las manos con unos pequeños por la conmemoración del 21 de marzo que es el Día Mundial del Síndrome de Down. A mi lado estaba Tatiana, la cual veía algo nerviosa.

— Tranquila, es tu primer clásico, disfrútalo —le alcancé a decir antes de que comenzáramos a caminar hacia la cancha.

El protocolo se inicio y el tiempo transcurrió, por lo que comenzamos a jugar.

En el minuto 15 mi gran amiga Burkenroad la que me dió un pase para gol, logre alcanzar el pase y paso lo feo.

Una de las Amazonas llego y se barrio directo a mi tobillo, ni siquiera toco el balón y la árbitro no marco nada, estaba tendida en el pasto escuchando los reclamos de mis compañeras y logre ver a Tatiana, Jana y Lizbeth conmigo preguntándome si estaba bien y moviendo mi pie, llegaron los médicos y me revisaron el tobillo, resulta que tenia Tendinitis, que es una inflamación debido a la tensión o rotura de los tendones en el tobillo, lo cual me dejara sin jugar un buen tiempo.

Llamaron al carrito de las desgracias y me llevaron a la banca, solo para después llevarme a los vestidores, donde ya se encontraba Marcelo.

En los vestidores logre ver que llamaron a la árbitro al VAR y resulto que si era penal, y expulsaron a la jugadora de Tigres que me lesionó.

— Honey, how do you feel? —me pregunto Marcelo abrazándome por los hombros mientras los doctores seguían revisándome.

— Bien, me duele, pero es soportable.

Al final me llevaron al hospital para ver si no tenía otra cosa, solo para descartar sospechas, Marcelo fue conmigo en la ambulancia.

Resultó que perdimos el clásico, 2 a 1, el único gol fue el penal de mi lesión y lo hizo la capi Bernal, ahora solo me queda recuperarme mientras mi novio y mi hermano me ponen gorro.

Estaba en mi casa, y justo llego el gorrón de mi hermano con tres botes de nieve de vainilla y seis paquetes de galletas Chips Ahoy.

— Que onda familia ¿cómo estas hermanita mía? —dijo poniendo todo en la mesa.

— Uno, estoy bien, gracias por preguntar. Dos, ¿como vergas entraste a mi casa? Y tres, ¿que es eso que tienes ahí? —pregunte enumerando con mis dedos.

— Uno, que bueno que estes bien. Dos, Marcelo me dió llaves de la casa. Y tres, es nieve y galletas para el Chelito, para ti y pa mi —dijo con voz graciosa.

Marcelo iba saliendo del baño cuando vió a mi hermano, lo saludo y luego luego se agarro un bote de nieve y dos paquetes de galletas.

— Mira, el Marcelo si le sabe —me dijo señalándolo.

El día lo pase con mi hermano y Marcelo, por lo que estuvo lleno de risas, al final mi recuperación no iba a ser tan mala como creía.

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Bueno, cuatro shots hechos en un día, nuevo récord

Oigan, saben que pueden hacer pedidos verdad? A lo mejor me tardo en hacerlos y publicarlos, pero háganme pedidos 😿😿

(Por cierto, gracias por los votos, los amu 🫶🏼🫶🏼)