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Iseei y Ajuka se encontraban saliendo del orfanato
- Entonces, ¿cómo debo llamarte?
¿Ajuka-Otou-san?, ¿Padre?, ¿Aju-Otou-san?-
-No necesitas llamarme así caso
no lo quieras. Pude notar por tu
manera de hablar que no estabas
feliz en referirse a mí con un
honorifico paterno en aquella
oficina.-
Respondió el hombre peliverde,
que caminaba en una calle llena
de gente siendo seguido por un
niño castaño que tenía nada más
que las ropas del cuerpo y una
pequeña mochila con sus pocas
pertenencias. La gente reparaba
mucho en Ajuka, su apariencia
les recordaba un extranjero
misterioso, incluso a las mujeres le
pareció algo guapo y le comían con la mirada
- Lo siento, no tenía la intención
de...-
-Todo bien, eso no me molesta.
Reconozco que toda esa situación te
fue bastante inesperada, y que debe
ser difícil para ti llamar alguien
más de padre o madre. Por más que
legalmente yo sea tu padre, hasta
que nos conocemos mejor y yo gané
tu confianza puedes llamarme solo
de Ajuka, o de Ajuka-san caso lo
prefieras.
- ¡Gracias! Siendo así espero que
nos llevemos bien Ajuka-san.
- Habló Issei, asentido con la
propuesta del hombre.
Los dos siguieron caminando por
más algún tiempo, hasta que Ajuka
adentro en una calle algo oscura y
vacía e hizo un gesto para el niño
lo siguiera, cosa que Issei hizo sin
hecitar
- Por cierto Issei, aún no te agradecí
por seguir mi juego en el Orfanato.
Gracias a eso logramos salir por en
buenos términos, por más que vine
preparado para sacarte de allí a
cualquier costo.-
- ¿Tan determinado estaba en
adoptarme? - Preguntó el chico con
algo de sorpresa.-
Ajuka miro en todas la direcciones,
buscando señal de personas y al
tener certeza de que estaban solos
le respondió.
- Aquel sitio no era seguro, ni para
ti ni para las demás personas del
Orfanato. Tu aura ya era algo
fuerte, razón del porque todos
aquellos insectos eran atraídos
al edificio, los cuales felizmente
ayudaban a camuflar tu presencia
ante posibles ojos curiosos. Pero
ahora que despertaste la Boosted
Gear y agregaste la aura del Dragón
Rojo a la tuya, prácticamente
te convertiste en un gran faro
brillante. Tarde o temprano ibas
lamar la atención del Grigori, o
incluso de cosa peor.-
Issei no puso evitar tener una
expresión de espanto. No logro
comprender todas las palabras que
Ajuka menciono, pero sí de que él
y las demás personas estaban en
riesgo, y no tenía idea de que esa
posibilidad existía. Pero también
tuvo una frase que le llamó la
atención.
- Espera.. ¿Boosted Gear? ¿Acaso
te refieres al guantelete rojo y a
Ddraig-sama? - Preguntó. Ajuka
pareció levemente impresionado
Con su duda.
¿Entonces ya entraste en contacto
con tú Dragón? Teniendo el
potencial que tienes, eso no me
Sorprende de todo.-
Tales palabras solo traían más
dudas al niño, que ya estaba algo
harto de tantos misterios.
- Ajuka-san, usted me prometió
respuestas pero hasta ahora no me
dijiste nada. ¿Qué cuesta darme
alguna explicación?-
- Tienes razón, estoy divagando
mucho. Responderé a todas
tus dudas, pero no aquí. Hay
posibilidades de que oídos curiosos
nos escuchen. Primero regresemos
a tu nuevo hogar.-
- ¿Entonces que estamos
esperando? ¡Salgamos de esa
calle! - Habló el chico empezando
a caminar pero pronto sintió que
Ajuka lo detuvo con su brazo,
siendo que el otro estaba extendido
hacia los pies de ambos.
