Ámbar Y Xavier se conocerán por medio de Natanael. Al principio, a ella le caerá mal él, pero después se dará cuenta de que ese "odio" que siente hacia a él, no es odio del todo.
Después de darse cuenta, se empezarán a llevar cada vez un poco mejor...
Todos estaban muy tomados ya. Menos yo y Xavi. Quien seguía de hostigoso.
Pero bueno, olvidando eso último, no tenía idea de como íbamos a llevarlos a la casa.
Estuve pensando un rato, hasta que me acordé del guardaespaldas de Nata.
Rápidamente me dirigí hacia a él para pedirle su teléfono.
¡Nata! - le grite yo a lo lejos
No me escucho por lo fuerte que estaba la música, así que me acerque a él.
Préstame tu teléfono, por favor - le dije yo
¿Para qué lo necesitas? - pregunto él
Necesito hacer una llamada - le dije yo
Esta bien, ten - dijo él mientras extendía su mano con su teléfono desbloqueado hacia mi
Gracias - dije yo para después irme con Xavi de nuevo
Le llame a su guardaespaldas y le explique la situación.
Estaba esperando a que llegará.
Después de un rato lo vi entrar, y me acerque a él.
¿Qué pasa, señorita? - pregunto Alejandro
(se olvido poner que se llamaba Alejandro)
Nata y los demás están demasiado tomados - dije yo
Entiendo, ¿donde están todos? - pregunto él
Por acá, sígueme - dije yo para después empezar a caminar hacia la mesa siendo seguida por Alejandro
Al llegar a la mesa, lo primero que vimos fue que Junior se estaba peleando con alguien más y a los chicos tratando de separarlos, así que nos acercamos rápidamente.
¿Qué está pasando aquí? - pregunté yo poniéndome en medio de Junior y el otro chico
Pues él empezó - dijo Junior
A ver, ¿por qué empezaron a pelear? - pregunté yo
Pues es que mira, yo y los chicos estábamos aquí normal, y de la nada llego él, reclamando que por que esta era su mesa y que porque estábamos en su mesa. Entonces este wey, empezó a decirnos un chingo de cosas. Nosotros tratábamos de ignorarlo, pero la verdad a mi ya me estaba cansando. Así que le dije que esta mesa no era de él, y que además nosostros habíamos llegado primero, pero pues, yo se lo dije en buen plan, calmado. Pero él se enojo y me golpeó, entonces yo obviamente me enoje, y se lo devolví. Y ahí fue cuando empezamos a pelear - me explicó Junior
Mira, no se como te llames ni me interesa. Pero, ¿pelearte por una mesa. Es en serio? Que ridiculez. E igual, como te dijo él, la mesa no es de nadie, mucho menos tuya. ¿No pudiste simplemente irte a otra mesa? Aquí hay muchísimas otras mesas. Pero bueno, eso ya no importa, porque nosotros ya nos vamos - dije yo para después ir a decirle a Alejandro que se llevara a los chicos a la camioneta
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