Te quedaste en mi piel

Y PORQUÉ NO?

SALOMÓN

Cuando encuentro a Daiky en la discoteca, sé que Carolina está aquí.

He estado a punto de llamarla 20 veces estos días, pero algo me decía que si la presiono, todo se irá al garete.

Me sorprende cuando Daiky me pide emocionado que lo acompañe porque Carolina se pondrá muy contenta de verme.

Sé que son amigos íntimos y que se cuentan todo, por lo que esperaba que supiera que ella y yo nos habíamos visto, e incluso no me sorprendería que le hubiera contado detalles.

Lo sigo hacia su reservado, entra y dice:

-Mirad a quién me he encontrado!!- se aparta y entonces la veo.

Lleva un vestido corto que deja al descubierto esas increíbles piernas, no puedo evitar mirarla de arriba abajo con deseo.

Ella me mira fijamente, no sé si se alegra de verme o por el contrario mi presencia ha arruinado la noche ,así que me excuso con Daiky y sus amigos y vuelvo junto a mi hermana y el resto de mis amigos.

Pero no puedo dejar de pensar en ella, ese vestido...lo que daría por quitárselo y hacer con ella las cosas que me pasan por la mente cuando la tengo delante.

Un rato después la veo sola, camina por la zona que separa los reservados, en dirección al baño.
Pongo una excusa a mis amigos y me dirijo hacia allí, espero que pase y la cojo del brazo y la guío hacia mi, hacia la oscuridad.

Al principio parece asustada pero en cuanto ve que soy yo, se relaja.

-No puedes pedirme que me olvide de ti y mirarme como lo has hecho en el reservado Carolina.

Y antes de que pueda reaccionar se lanza en busca de mi boca.

Nos besamos como si hiciera años que lo esperamos, deslizo mis manos por su cuerpo, hasta el final de su vestido.

Acaricio su piel hasta que llego a su tanga, y entonces de un tirón se lo rompo y lo guardo en mi bolsillo.

Ella jadea, creo que le excitó lo que acaba de pasar, pero eso no es más que el comienzo.

Deslizo un dedo dentro de ella, está húmeda y eso me vuelve loco.
Introduzco otro de mis dedos, ella echa la cabeza hacia atrás disfrutando del placer que le doy con mis dedos, dándome así acceso a su cuello y sus pechos.

La beso por todas partes, mientras mis dedos le dan placer.

Noto mi pantalón apretado, esta mujer me mata.

Me excita como nadie lo había hecho antes sin necesidad de que me toque.

Un par de minutos después la miro mientras llega a un orgasmo que la hace gemir ,y juro que no he visto nada más bonito en mi vida.

Saco mis dedos de su interior y hago algo que estoy deseando hacer, probar su sabor de nuevo.

Me meto los dedos en la boca y los chupo bajo su atenta mirada.
Es lo más dulce y rico que he probado nunca.

-Que rico mi reina-le digo.

Me acerco, le doy un beso y me voy.

Quiero que sea ella la que me busque, la que me diga si quiere que demos rienda suelta a esto, sea lo que sea ,o mejor me alejo de ella.

Vuelvo con mis amigos y mi hermana, que no se han dado cuenta que me había ido y siguen bailando y bebiendo.

Unos minutos después mis amigos deciden irse a casa, hoy ha sido un día largo de grabación y están algo cansados.
Voy a decirle a mi hermana que nosotros también nos vamos, cuando aparece Daiky y pega un grito que se puede escuchar hasta con esta música .

-Manuuuuuuu, no me lo creooo,estás guapísimaaa!! -dice mientas abraza efusivamente a mi hermana.

Hablan un par de minutos y cuando creo que ya se van a despedir, los veo cogidos de la mano en dirección al reservado donde está Caro.

Pongo los ojos en blanco y los sigo hacia el reservado.
Entro justo después de ellos.
Bailan y bromean, todo ello regado por alcohol.
Cuando Daiky pregunta quién más quiere una copa, Carolina me mira fijamente y dice :

-No me pidáis una copa a mi esta vez , he bebido demasiado y estoy un poco mareada.
Creo que saldré a tomar un poco el aire.

-Yo te acompaño, igualmente quería salir a fumar un cigarro-digo automáticamente.

Nuestros amigos asienten y nosotros nos levantamos para salir del reservado.
Todos menos mi hermana,ella me mira con una sonrisa cómplice, porque sabe que yo no fumo.

Salimos por una puerta de emergencia al exterior y en cuanto la puerta se cierra, nos acercamos y nos besamos.

La sujeto por la cintura y la giro, paso mis manos por sus nalgas, que me vuelven loco.

Levanto un poco su vestido y la foto mental que hago no la pienso borrar.

Bajo un poco mi pantalón y libero mi erección, me acerco a ella que apoya sus manos en la pared y me deslizo en su interior.

Juro que es la mejor sensación del mundo, hundirme en ella, escuchar sus gemidos , verla entregada al momento, al aquí y al ahora.

Llegamos juntos a un orgasmo que me sabe a poco, no porque no me haya gustado, sino porque querría estar así , con ella el resto de la noche.

Nos ponemos bien la ropa y justo en ese momento sale Daiky ,llama a Carolina y me pide un cigarro, que obviamente no le puedo dar ya que no fumo.

Nos dice que ya se quieren ir así que entramos a despedirnos.

Cuando ya todos se han despedido, me acerco a Carolina, le doy un beso en la mejilla y le susurro:

-Todo depende de ti, me llamas o lo dejamos aquí.

Me voy a mi casa, donde después de darme una ducha intento dormir pero me es imposible.

Me levanto de la cama, cojo una libreta y un pequeño teclado y empiezo a componer.

Un par de horas después apenas tengo un par de frases, no me la puedo quitar de la cabeza.

Y entonces me acuerdo de algo, algo que tengo en el bolsillo de mi pantalón,y se me ocurre una idea.

CAROLINA

Estoy dormida cuando escucho que llaman a la puerta, me pongo una bata y bajo corriendo a abrir la puerta.

No estoy esperando a nadie y dudo que mis amigos se hayan levantando ya .

Y mucho menos que hayan salido de casa con la resaca que deben tener.

Cuando abro la puerta hay un mensajero que me da un ramo de Cataleyas, mi flor favorita.
Y una pequeña caja muy elegante de color blanco marfil.

Le doy las gracias y entro en casa, con los regalos, sin saber de quién son.

El ramo no lleva tarjeta, así que me siento en el sofá del salón y abro la caja.

Al abrirla veo otra caja en su interior, con el logo de la Perla, una marca famosísima y cara de ropa interior.

La abro y saco de ella un tanga de encaje blanco precioso,y entonces veo en el fondo de la caja una tarjeta.

A esas alturas ya me puedo imaginar de quién son las flores y el tanga, pero me muero por leer que dice la tarjeta.

"Te debía uno. Además me gusta imaginar como te verías con él puesto. Espero que tú imagines como te lo quito"

Salomón

Me hundo en el sofá, doy un pequeño grito y me tapo la cara con las manos.

Me pongo a pensar en lo que pasó la noche anterior, en esa nota, en las ganas que tengo de verlo de nuevo y pienso...
Y porque no??