oh por dios

Parte 5

En el auto que se dirigía al motel, se concentró en silencio en conducir. Después de despertarse, Woojin también miró por la ventana sin decir una palabra.

Estuvo a punto de encender la radio para romper el asfixiante silencio, pero su hijo abrió la boca primero.

— Papá... ¿Te arrepientes?

¿Arrepentirse?

¿Podía definir esa situación con esa sola palabra? Sin siquiera tener tiempo para responder, sus palabras continuaron.

— Yo no me arrepiento. Más bien, me alegro de que hayas sido tú, padre. Si alguien más me hubiera visto así, realmente hubiera querido morir.

¿Qué?

Miró a Woojin ante las palabras inesperadas, pero él seguía mirando por la ventana.

— Woojin-ah... Papá... Yo...

No supo qué responder. Mientras tanto, llegaron al estacionamiento del motel. Cuando se apagó el motor, solo se podía escuchar el sonido de la respiración de cada uno en el estrecho automóvil.

— Woojin-ah... no hiciste nada malo. Todo es culpa de tu padre. Entonces...

Woojin seguía diciendo que no se arrepentía de haber tenido sexo con él, pero lo dijo primero por qué no quería que se culpase. Entonces, antes de que pudiera terminar sus palabras, respondió Woojin.

— No es culpa de papá. Desde que era pequeño, he estado esperando el día en que me convirtiera en un Alfa dominante como mi papá. Pero no soy un Beta, soy un Omega... Al principio, estaba tan sorprendido y asustado... Pero ahora creo que está bien.

— ¿Qué? ¿Es...? ¿Está bien?

A diferencia de él, que estaba avergonzado por no saber cómo responder a esa situación, Woojin tenía una expresión tranquila y seria, como si ya hubiera organizado todos sus pensamientos y tomado una decisión. Pero las palabras que salieron de su boca fueron absurdas y sorprendentes.

— La seta Matsutake que comimos el primer día... Papá lo dijo. Dijo que eran un regalo de Dios a nuestra familia... Después de comerla, me sentí extraño.

De repente, su cabeza palpitó como si le hubieran golpeado con un martillo.

¡Cierto! La seta...

También sintió fiebre en su cuerpo después de comerlas, pero no fue como si estuviera enfermo, sino que solo afectó a sus rasgos...

Eso significaba que no era solo una seta Matsutake. ¿Qué demonios habían comido?

Poco a poco, las cosas empezaron a tener sentido. Woojin apareció de repente como un Omega, su RUT llegó y reaccionó a las feromonas de su hijo... Así que fue por esas extrañas setas que tuvieron sexo loco durante 4 días y 3 noches. Entonces no es culpa de nadie...

— ¿Qui... Quieres decir... que todo fue accidental?

Cuando hizo la pregunta en voz alta sin darse cuenta, Woojin le miró a la cara y sacudió la cabeza.

— Desde el momento en que me dijeron en el hospital que era Beta lo pensé. Si no podía ser como mi papá... Quería tener a mi papá... Pero la seta Matsutake hizo realidad mi deseo.

Al decir eso, Woojin sonrió brillantemente como si tuviera el mundo entero. Mientras lo miraba a la cara sin decir nada, su hijo de repente se emocionó y salió del auto, se acercó al asiento del conductor y abrió la puerta.