CAPITULO 25

657 83 37
                                    

By Bill

Termine de comprar en la joyería, y ahora mismo tenía una cajita de color Rojo decorado con amarillo, muy radical pero hermoso

Lo malo es que soy demasiado impaciente, y cuando soy impaciente el tiempo se pasa demasiado lento así que es hora de tranquilizarse, dormír es la única solución a si que llame a Scotty para que viniera a dormir conmigo

Me encanta acariciarlo antes de dormir ya que su pelaje es muy suave y esponjoso que parece un peluche para no decir pequeño ya que a crecido y bastante, creo que sí se llega a poner encima mio me quedo sin aire

Cerré poco a poco los ojos y me quedé profundamente dormido hasta que mi alarma me despertó, eso significa sacar a Scotty a pasear pero lo principal el desayuno, le eche las croquetas a Scotty y yo me preparé un tazón de leche

Al terminar le puse la correa a Scotty y lo saqué a pasear, después de un largo paseo nos dirigimos de regreso a casa y me puse el uniforme para dirigirme al trabajo, sin olvidarme el regalo que compré para Tom

Llegué en unos minutos como siempre y al entrar me puse a hacer lo que debía terminar y pasarme por la habitación de Tom ¡Que ilusión! ¿Me preguntó que cara pondrá? Una de sorpresa, alegría, se quedará sin palabras no lo sé pero miles de formas se me pasa por la cabeza

Y en cuanto me doy cuenta ya estoy llendo a ver a Tom ¡Que emoción!

Abrí la puerta y como de costumbre estaba en la puerta esperándome, guarde la cajita rápidamente sin que Tom se diera cuenta

- Ya te echaba de menos, se siente muy solitario cuando no estás tú ¿Que preguntas me harás hoy?

- WoW, relájate, primero vamos a acomodarnos y después empezamos ¿Entendido?

- Entendido- me dio una gran sonrisa a la que yo no me nege a responder con otra

- Acomódate, quiero darte algo- me miró solprendido y me obedeció, saque la caja que tenía en el bolsillo y se lo puse para que lo viera, sus ojos brillaron como nunca, ese brillo que era tan hermoso que mi corazón empieza a latir rápidamente, abrí la cajita que contenía dos collares de un sol y una luna que se podía juntar ya que tenia imanes - ¿Te gusta?

- No me gusta... ¡Me encanta! De verdad es hermoso, no pensé que por primera vez me iban a dar un regalo y encima el primer regalo que me dan y es ¡Hermoso!- se levantó y me intento dar un abrazo ya que no podía bien a lo que yo le correspondi el abrazo alegremente

- Me alegro demasiado que te allá gustado, ahora déjame ponerte tu collar, el tuyo será el sol y el mío será la luna- le coloque el collar y en cuanto termine de ponérselo me puse el mío y juntamos los collares - ¿Siempre juntos?

- Siempre juntos- los dos nos quedamos mirándonos un rato y nos dimos un pequeño beso

- Bueno, pues comencemos- me senté en la silla mientras Tom se acomodo en la cama con las piernas cruzadas y la espalda apoyada contra la pared

- ¿Como estas?

- Bien y ya sabes que es gracias a ti

- jaja me alegro mucho ¿Crees que te sientes capaz de contarme lo que te pasó en el pasado, aunque sea una parte?

- Si, puede ser sobre mi colegio si no te molesta

- Claro que no me molesta

- Bien

- ¿Te han tratado bien o mal, especialmente profesoles y alumnos?

- Mal y mas mi profesor como mi supuesto tutor

- ¿Te hizo algo bastante malo para tener gran odio hacia el?

- Si, yo era nada más que un crío de 9 años apuntó de cumplir los 10.. cuando empecé otro curso con los mismísimos compañeros y diferente tutor, este se presentó y llevo su vista hacia mi, al parecer me cogio un poco de mania por qué dijo que no se permitia tipo de pelos raros, como tenia las rastas el se enfurecio, me dijo que me quitara esas rastas o me los cortaría el, yo no quería que hiciera eso a si que le alce la voz a lo que se enojo y cogio su regla, y me empezó a pegar las muñecas que para asi comenzar con una nueva manía, me arruino mas la infancia que ya tenia perdia y cuando perdi mi control intente eliminarlo pero al parecer eso no pasó, cuando me llevaron y me trasladaron aquí se enteró y nunca paró de verlo a lo lejos

- ¿Estás diciendo que lo ves constantemente?

- Si y justo ayer entro a mí habitación

- ¿Ayer?

- Si, como dije se enteró de que me trasladaron al hospital psiquiátrico y empezó a trabajar aquí, al parecer no se cansa de intentar joderme la vida

- Y... ¿Yo lo e visto?

- Demasiadas veces, como ayer que se paró a hablar contigo cuando te ibas a ir y si hablo del mismísimo David

Amor psicologíco // TollDonde viven las historias. Descúbrelo ahora