Touch Me

Encuentro.

Después de aquel encuentro el cual hizo que mi pecho diese un vuelco, intente levantarme a pesar de que lo tenia tan cerca de mi.

-Quítate por favor-aun ruborizada.

-Obligarme-su mirada fija en mi. Sentía mi cuerpo arder ¿Cómo puede ser posible que me altere con alguien que no conozco? Aun así el verle me causa esta sensación ¡¿Qué coño me pasa?! es mi hermano. 

De repente toma mi barbilla.

-¿Qué crees que haces?-Siento mi cuerpo arder, que se detenga, por favor, detente Niccolas.

-Tiempo sin verte y ¿Lo único que haces es caer en cima de mi?eh, muy mal hermanita, asi no se juega-De sus labios brotaba una picara sonrisa.

-¡Detente ahora!-Me siento extraña, su tacto me envuelve.

Se acerca mas a mi dejando un espacio mínimo entre sus labios y los míos, siento su cálida respiración acelerarse, intento empujarlo, pero es fuerte y sus manos me envuelven, veo de reojo como se muerde su labio interior y mi cuerpo entra en caos, como si fuese un animal salvaje me levanta con una rapidez increíble, me pone contra la pared dejando el mismo espacio entre nosotros.

-Esto aun no termina-se aleja dejándome roja como una manzana, al mismo tiempo alguien abre la puerta.

-¡P-papá!- he tropezado contra una mesa cercana-Bienvenido-aun con mi voz temblorosa, escuche una risa a lo lejos-Imbécil-susurre.

-Hola, Eli ¿Haz tenido un buen día?

-Si...-Solté una risilla.

-Esta lista la cena-Grito mi madrastra.

Después de comer una rica cena, debo admitir que ella cocina de maravilla, he subido a mi cuarto al tiempo de la lavar los trastes.

He decido tomar una ducha antes de dormir.

Se siente este olor a vainilla, me encanta este olor aunque huela a pastelería, me gusta. Mientras disfrutaba de mi baño recordé lo sucedido en el pasillo hace poco, y mi piel se torno roja, de nuevo.

-¡Esta loco!

¿Cómo pudo hacer eso con tanta naturalidad? y aun mas ¡conmigo!! no entiendo por que no grite, aun  peor por que estaba tan nerviosa, no se supone que te dabas sentir así con tu hermano ¿O si? mi ser ardía y yo de cierto modo sentí bien ese momento.

-Me debe faltar un tornillo de seguro-me puse una camisa de un gran largo, gris, para dormir, me peine y salí.

Senti que alguien me miraba y me gire.