Depuración

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Notas de inicio:

Ok, si algo he de decir de este capítulo es un: lo siento~

Primer aviso (?)


Depuración

Cuando despertó estaba en su cama, lo sabía por la textura de sus mantas, por el aroma de su almohada, había dejado un saco con la esencia de las flores del campo donde solía estar con Jungkook debajo de ella, eso lo había ayudado con las pesadillas.

—Tae...— Lo llamó alguien, Taehyung balbuceo el nombre del ángel, pero cuando su visión se aclaró descubrió que era Seokjin el que lo llamaba. —Soy yo, Jin... ¿Puedes escucharme? — Le preguntó su mentor con la voz suave pero firme.

—¿Qué fue lo que paso? — Preguntó Taehyung con la voz rasposa y pesada, le dolía todo el cuerpo, en especial sus alas ya que estaba acostado sobre ellas.

Estaba empezando a recordar, la caja de plumas, el campo de lirios de fuego y él, saturado en sustancia negra, esa que lo invadía cada vez que usaba sus poderes demoniacos. Que le quemaba el cuerpo y le consumía lentamente. Se sentía estar todavía en un charco de esa cosa.

—Estás en transición... Solo que es demasiado agresiva, tu cuerpo no lo está procesando bien— Explicó el mayor tomándole la mano y presionando poquito, Taehyung apenas sintió el contacto, demasiado adolorido para prestar atención a algo en especial.

—¿Transición? — Conocía de sobra la palabra, Seokjin mismo estaba atravesando una, pero Seokjin llevaba años con ello, Taehyung se sentía hundido hasta el cuello de un momento a otro.

También podía sentir sus labios retener unos colmillos afilados, podía sentir sus manos vueltas garras, pero lo más importante, podía sentir su interior saturado con la sustancia negra. Algo oscuro y liquido corriendo por cada vena de su cuerpo.

—Ay Tae... ¿Qué te estás haciendo? — Pero Taehyung no lo sabía, solo sabía que dolía, se llevó la mano a la cabeza y descubrió una protuberancia entre su cabello, lo delineó y descubrió a puro tacto lo que era, soltó un jadeo que le hizo consciente de su propia voz oscura y pesada, el pánico lo envolvió. —No, no, no... Tranquilo, vuelve a acostarte— Le ordenó Seokjin cuando Taehyung amago a levantarse de la cama para correr a un espejo y descubrir su aspecto, cuando el Nephilim trató de apartar a Seokjin, descubrió sus garras más afiladas que nunca y retrajo la mano de inmediato para no lastimar al mayor. Aquello lo descolocó de nuevo.

—¿Por qué estoy en mi forma demoniaca? — Preguntó con un nudo en la garganta, Seokjin lo miró con pena como toda respuesta.

—Tranquilo... ya pasará, has estado alternando entre tus dos formas, pero volver a tu forma normal te pone tan débil que pasas el mayor tiempo dormido... desde siempre esta forma ha sido tu método de defensa, imagino que es la respuesta de tu cuerpo ante el dolor que estas sufriendo— Taehyung asintió y se relajó en la cama ante la explicación y lo lógica que sonaba. O quizás era su propio cansancio que le estaba poniendo la mente en una nube de bruma mental, era difícil saberlo con exactitud.

—¿Dices que he estado durmiendo? ¿Por cuánto tiempo? — Preguntó mirando a su alrededor, tratando de adivinar la hora por medio de la claridad u oscuridad de las ventanas, también en busca de cierto consuelo que sabía bien que no estaba ahí.

—Unos tres días...— Taehyung entró en shock, trató de levantarse nuevo y Seokjin lo volvió a obligar a permanecer en cama.

—Tengo que ver a Jungkook...— Le dijo por completo alterado, había creído que solo se trataba de una hora o dos, pero tres días eran...

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