light; nishinoya yuu

03 | mirrorball

"im still tryin' everything
to keep you looking at me"

el partido fue bastante parejo a decir verdad. el primer set lo ganó el Seijoh y el Karasuno remontó en el segundo, aunque ya para el tercer set las cosas se pusieron un poco intensas, sin embargo el partido culminó con el Aoba Johsai llevándose la victoria.

junto a Yachi y Kiyoko-san nos dispusimos a repartir botellas de agua y toallas limpias para todos. no se veían tristes, pero tampoco estaban tan contentos y era totalmente comprensible, aunque personalmente pienso que deberían estar orgullosos, su desempeño en la cancha fue genial, y a pesar de que aún soy inexperta en el volley, noté que les dieron problemas al equipo contrario.

traté de consolarnos aunque sea un poquito con algunas palabras de ánimo, sin embargo era evidente que no era nada buena en eso.

Azumane-san me dio unas palmaditas en el hombro y me sonrió ligeramente cuando le pasé una de las toallas para su sudor. detrás de él se encontraba Nishinoya dando unos respiro profundos, probablemente aún intentaba recuperar su aliento. di unos pequeños pasos hasta llegar a lado suyo.

—Noya-san, aquí tienes – le pasé una botella con agua helada a lo que él me sonrío a la vez que tomaba un sorbo, yo le devolví el gesto antes de hablar por segunda vez – al final sí pudiste parar el saque demoníaco de Oikawa, ¡fue genial! de seguro ni él se lo esperaba.

él llevó su cabeza a un lado. —sí, eso es algo... aunque aún no es suficiente. debo esforzarme más la próxima vez, entonces tal vez ganemos. – pude notar por su tono de voz que se encontraba un poco deprimido. era raro verlo así, el comportamiento que estaba teniendo ahora hacía mucho contraste con el de siempre, tan animado y ruidoso todo el tiempo.

—no seas tan duro contigo mismo. deberías reconocer tus avances en lugar de concentrarte en lo negativo, Noya-san... estoy segura que muy pocos han podido parar ese saque, a mí me hubiese arrancado los brazos. – reí suavemente.

—mhm, creo que tienes razón. Gracias, Haerin, de verdad lo aprecio – él me miró mientras sus labios se alzaron en una expresión alegre.

—no me agradezcas – alcé ambas comisuras de mis labios, devolviéndole el gesto a la vez que él colocó una mano sobre mi hombro con gratitud.

サイレントボイス

antes de subir al autobús de nuevo para ir de regreso, pasé por el tocador de chicas para arreglar mi cabello un poco. cuando estaba saliendo, me topé con el castaño alto que conocí antes del partido.

—Felicidades por la victoria, Oikawa-san – le dije en un gesto amable. él se dirigió hacia mí, provocando que deje de caminar.

—qué considerada, Haerin-chan. ¿no se molesta tu equipo si te ven hablando conmigo? – él alzó una ceja, yo hice lo mismo y usé un tono que tenía un rastro de obviedad en mi voz para contestarle.

—¿y por qué se tendrían que enojar? Somos civilizados, ¿o no? – argumenté mientras acomodaba mi mochila.

—Por supuesto... – él cruzó los brazos y pude notar que me analizó con la mirada. luego, habló con una expresión sonriente. – cambiaste mucho este tiempo, Haerin-chan.

chasqueé la lengua ligeramente. — bueno, pues sí. existe algo llamado pubertad, ¿lo conoces?

él puso sus manos en su cintura mientras una sonrisa molesta se formó en su cara. – cambiaste físicamente, pero sigues siendo esa niña molesta que recuerdo muy bien. aún me debes una caja completa de crayones, no creas que se me olvidó.

rodé los ojos, ¿de verdad aún se acordaba de eso? resulta que, cuando éramos pequeños, yo había visto un tutorial en el que se supone que si derretías crayones, podías obtener una especie de labial de colores. obviamente no me quedé con la curiosidad y lo intenté. salió bastante bien y fui feliz por 10 segundos... hasta que Oikawa notó lo que hice con su caja de crayones nuevos y comenzó a lloriquear.

—¿la de superar no te la sabes?

—me conoces, Haerin-chan. por supuesto que no. espero con ansias mis crayones.

—pues sigue esperando, porque no desperdiciaré mi dinero en una caja de crayones. – alcé mis hombros.

—uh, qué cruel te has vuelto, Haerin-chan. A puesto a que eres un dolor de cabeza para tu noviecito.

carcajeé sarcásticamente. —sí, claro. me encantaría ver a ese noviecito.

—¿entonces estás soltera? no me sorprende, seguro nadie te soporta con este temperamento tuyo.

rodé mis ojos. —definitivamente no te extrañé ni un poquito... ojalá y el Altísimo no quiera que nos encontremos seguido.

—hmm, yo creo que será lo contrario. no es fácil escapar de mí, además me encantaría ponerme al día con tu hermano.

suspiré pesadamente. —vaya, realmente estás en todos lados.

—claro que lo estoy.– él más alto sonrió ladinamente y fue interrumpido por Shimizu-san antes de agregar algo más a su oración.

—Haerin-chan, ya debemos irnos. – dijo ella en un tono suave. arreglé mi compostura antes de dirigirme a Oikawa por última vez en el día.

—nos vemos, Oikawa. no fue un gusto verte.– después de acabar mi frase, me fui de ahí a paso acelerado, pero pude escuchar que me gritó algo en respuesta, aunque no me molesté mucho en contestar, únicamente reí un poco para mis adentros.

サイレントボイス

narrador omnisciente;

de vuelta en el autobús, la pequeña castaña se acomodó junto a su mejor amiga.

no iba a admitir en voz alta que tenía muchas ganas de sentarse junto al pequeño líbero de nuevo, y mucho menos iba a admitir que se sintió un poco decepcionada cuando el chico no tomó la iniciativa de pedirle sentarse junto a él.

miró a su compañera, quien estaba recostada contra la ventana. la castaña puso su cabeza sobre el hombro de su amiga y cerró los ojos, cayendo en los brazos de morfeo casi instantáneamente.

-gery ♡