Bienvenidos a otra tanda de esta historia.
Realmente agradezco el apoyo que se le ha estado dando, por parte de aquellos que comentan y votan.
Así que, me complace anunciar que finalmente estamos en uno de los puntos de transición de la misma.
Y me emociona aun más, sabiendo que la temporada 3 de Konosuba esta a la vuelta de la esquina.
Sin mas que decir, los dejo con el capítulo doble (Otra vez)
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Una dormitante Aqua se removió entre las sábanas, delatando que estaba a punto de llenar su amplia cuota de sueño.
Al abrir los ojos, rebelo que seguía usando su ropa de aventura en lugar de su pijama.
Cosa que le dio algo de lucidez junto con la confusión que le correspondía.
Luego miro su entorno en el mismo estado...
El espacio a su alrededor, era una habitación de paredes sencillas de madera, con un suelo de tablones y un amueblado común que se le hizo poco familiar al instante.
No las había visto tan a menudo, pero si llego a verlas en una ocasión.
Era una de las habitaciones de la posada de Axel...
"¡GHAAAAAAAAAGGGHHH!" Aqua grito al instante, despertando a Kazuma, quien dormía en una cama adyacente y se unió a los gritos al ser despertado.
"¡Cállense! ¡Intentamos dormir!" La voz de una mujer en la habitación vecina corto sus gritos.
"¡Perdón!" Ambos se disculparon al unísono, trayéndoles una sensación de horrible familiaridad.
Luego se miraron entre ellos con bastante complicación, antes de que la peli-azul se tumbara en la cama de nuevo con reniego.
Habian llegado a la posada de ultima hora... solo para descubrir que estaba congestionada y con solo una habitación doble disponible.
El aventurero, solo teniendo su conjunto de ropa de nativo japonés, se sintió fastidiado por la repentina irrupción.
Pero al menos Aqua se veía mas viva que las pocas horas que estuvieron en alerta después del estruendo de anoche.
Al ver el sol entrando por la ventana, Kazuma supo que debía ponerse en marcha, pues tenia una agenda apretada.
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Los aventureros solían beber y comer en el gremio, así que no solía estar en muchos bares.
Y la persona que quería hablar con el con urgencia, lo había citado en uno bastante elegante, en el que no encajaba en absoluto.
"Y eso fue lo que paso... realmente lo lamento" Kazuma bajo la cabeza a vista de su acompañante en la mesa.
Un aristócrata en traje azul y rojo, un hombre mayor, flacucho, rubio, piel blanca y arrugada.
Con una mirada de poco amigos, como la de la mayoría de los nobles.
Sain Hootrens, el hombre de la nobleza que, por medio de su mayordomo, les dio la misión de exorcizar la mansión en aquel entonces.
Y el dueño real de la misma.
"..." Este hombre hizo un sonido de disgusto, una vez termino de escuchar su relato.
Era la cuarta vez que narraba aquellos hechos.
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Una Ruta Para Esta Diosa Del Desastre: Konosuba
Fanfic"... Y si te atrevieses a mirar a una diosa con lujuria, una terrible maldición caerá sobre ti... ¿Me oíste verdad? ¡No finjas que no me escuchaste! ¡KAZUMA!"