En la ciudad de Byzel todos observaban con gran emoción y expectativa a los últimos dos oponentes sobre el cuadrilátero del festival. Un festival que había hecho estremecer al público varias veces. Bueno no solo al publico, también a la montaña en sí.
Ahora. Al fin estaba a punto de terminar, estallaría la última batalla del festival y los oponentes ya estaban sobre la arena mirándose atentamente como leyendo la mente del contrario.
Por un lado estaba Meliodaz, un joven que pareció salir de la nada y se ganó el aprecio de los espectadores del torneo, pues sus peleas habían sido simplemente sorprendentes, además de verse realmente como un niño simpático. Era pequeño y parecía solo un chiquillo, pero no cabe duda que podría destruir ese lugar si se le antojaba.
En total contraste con lo anterior, Bardock el guerrero orgulloso y despiadado, que los espectadores tuvieron el lujo o el infortunio de ver pelear. Sus peleas... Si es que se le pueden llamar así, habían sido más bien humillaciones. Era la forma más fácil de describirlas. Cada oponente que Bardock enfrentó en el torneo había terminado magullado y noqueado al final de la batalla. Ese hombre no mostraba piedad.
Meliodas se mostraba relajado a simple vista, pero por dentro también estaba algo preocupado por el combate, pues su oponente era algo difícil. Bardock tenía expectativas sobre todo esto. No eran precisamente altas, pero estaban lejos de ser bajas.
"¡¡MELIODAZ CONTRA BARDOCK!!"
Gritó el referí anunciando el comienzo de la pelea, y todo estalló. Los gritos de la audiencia no se hicieron esperar. Toda la emoción acumulada explotaba en las gradas.
Todo comenzó con Meliodas lanzándose contra Bardock de forma apresurada. Sin titubear lanzó un puñetazo directo al rostro de su oponente, pero fue detenido en seco. El Saiyajin mantuvo su mirada imperturbable mientras sostenía el puño de Meliodas en su propia palma.
Por supuesto nada de esto detuvo al capitán de seguir intentando, se echo hacia atrás y al igual que había hecho con Ban, comenzó a lazar ataques a diestra y siniestra. Varios puñetazos más vinieron luego de eso y tuvieron el mismo destino. Desviados o bloqueados. Los golpes no generaban ningún tipo de efecto.
"¡Meliodaz se lanza contra Bardock, pero no tiene ningún efecto!"
Meliodas dio un salto hacia atrás ante la insuficiencia de sus esfuerzos.
"Vaya, eres más duro de lo que creí"
"Y tú eres mucho más idiota de lo que yo creía"
En las gradas los pecados capitales y los caballeros sagrados se mostraban un poco contrariados.
"Tiene completamente dominado al capitán..."
Habló King con un poco de preocupación.
"..."
Diana sé quedó callada pues ella había comprobado el poder del hombre y ni siquiera estaba segura si Meliodas podría ganar. No quería decir nada, pues sabia que su deber como pecado era apoyar a su capitán.
"Señor Meliodas..."
La batalla en la arena continuaba solo para ver cómo está vez Bardock había adoptado una postura completamente plana. Cómo si simplemente estuviese esperando algo, a simple vista bajando su defensa.
Meliodas captó la señal arrojándose directo a Bardock dando golpes por todo el cuerpo del guerrero. En su mente el Saiyajin corroboraba sus suposiciones.
'Es más fuerte que veloz, pero aún así no representa nada...'
Antebrazos, pecho, el rostro, cualquier punto que el pecado golpeaba se mantenía rígido al contacto incluso podía decir que sus nudillos comenzaban a doler.
ESTÁS LEYENDO
Saiyan: Bardock en Nanatsu no Taizai
ActionUn Saiyan, el soldado perfecto, no conoce el miedo, entre mas fuerte el enemigo, mayor es su emoción por derrotarlo o enfrentarlo. El soldado perfecto, una vez se recupera de sus heridas se hace aun mas fuerte de lo que era. Nunca paran de elevar su...