Verte morir

GENESIS

-Buen día señor 

-Buen día Sabrina, por favor tráeme un café... Necesito centrarme de una vez, aun estoy cansado 

-Vale, no se preocupe señor, sin embargo lo esperan en la sala de conferencias 

Bien, mi nombre es Abiel Bancroft tengo unos 23 años, cabello negro, ojos azules y piel blanca, nací de una familia humilde y tranquila en España, mi padre sin embargo es Ingles así que ya sabrán de donde viene el apellido, en fin mi vida ha sido una lucha constante para lograr obtener mi propia compañía, al final lo conseguí tengo dinero, tengo autos, tengo chicas, soy buen mozo lo tengo todo ¿No? ¿Que mas podría desear? Mi madre no para de decir que de seguro tengo todo esto gracias a mi nombre "Abiel" Que significa hijo de dios, pero... La diferencia es que... 

Parezco el mismo hijo de satanás 

-Señor Abiel ha llegado-Dice un hombre al final de la sala, diría que unos 43 años calvo, moreno y aun se mantiene en forma, ojos oscuros, nariz obviamente pasada por cirugía y dientes finamente arreglados a juzgar por su voz autoritario, dulce y seguro de si mismo, por cierto queridos míos mas adelante se darán cuenta de porque mi revisión tan exhaustiva  

-Oh si eh llegado denme adelantos... ¿Que ha pasado?-Dije con una sonrisa, no debería asesinar a los socios...Pensé 

-Dos horas y cuarenta minutos mas tarde-

Por fin acabé con esa junta de locos, vaya idiotas, bien... Hora de divertirme, monté mi motocicleta y me fui directo a mi casa... Bueno, realmente casa es un termino inapropiado es una Mansión en realidad, me encanta pensar en el sótano es la parte mas divertida de toda la casa.

Al llegar rápidamente me dirigí al sótano, estaba tan feliz y mantenía una sonrisa de oreja a oreja 

-¡Llegué preciosas!- enseguida se escucharon los llantos de agonía y desesperación- ¿Será posible? ¿Cantan para mi? ¡Que hermosas!

Bien, déjenme describirles mi sótano, un suelo hecho de madera y paredes llenas de porcelana roja y negra, un estante lleno de herramientas medicas y de tortura, mis juguetes, sillones acolchados los cuales mantienen a mis victimas cómodas y dispuestas para todo, en este caso tengo a dos chicas... Las dos tiene solo 19 años y cayeron en mis garras... Que pena.

-A ver preciosas ¿Como nos divertiremos hoy? 

-¡Déjanos ir!-gritó una de las chicas... Sara, ojos azules y piel blanca, un tanto rubia

-¿Que? No, nada que ver... De igual manera sólo tienes una pierna y todos los dedos amputados... ¿O no recuerdas el dolor que te hice ver ayer?

-Matame de una vez... No quiero seguir sintiendo esto-Dijo la otra... Oriana, piel morena de ojos marrones y cabello negro 

-Si me lo pides así solo me provoca hacerte sufrir mas... Bueno, Ya que quieres morir ¿Que tal si... Cumplo tu deseo? Pero a mi manera- le quité la venda de los ojos y dejé que viera a su compañera de frente.. Su rostro de horror era hermoso-Te mataré Oriana... Pero antes, no quiero que olvides tu muerte 

Tomé un cuchillo y abrí el estomago de Sara, sus viseras cayeron al suelo y las dos no hacían mas que gritar, las tomé y las enrollé al rededor del cuello de Oriana, continué apuñalando a a Sara hasta que dejó de respirar, me di la vuelta y vi que las lagrimas de Oriana caían una y otra vez... No sentí nada. 

 -Y bien... ¿Te gustó eso?

-¡¿Como no puedes sentir nada por ella?! 

-No siento nada por nada ni nadie... Ella sólo fue una mas de mis muñecas y tu también, por mis venas sólo corre agua helada y mi corazón el hielo que bombea todo eso... Los únicos sentimientos en mi alma son la frialdad y la diferencia, ustedes son solo juguetes que me ayudan a sentir excitación y poder que puedo añadir a la mezcla de mis emociones, ahora... Despídete nena-Logre atravesar su cráneo de un solo tajo y simplemente murió, llevé sus cuerpos a sus cuartos... La familia se llevaría una sorpresa... 

-Dentro de unas semanas buscaré nuevos muñecos para jugar-Susurré para mis adentros mientras limpiaba-Nos vemos luego bellezas...

Frialdad

"Es un muro que no sonríe , son los ojos que no quieren ver , son unos labios que no quieren besar . Son unos brazos rígidos, paralizados , rotos de cariño y de pasión. La causa de la frialdad es lo más contradictorio y lo absurdo , es el miedo al Amor , nada más distante, nada más lejano de la realidad. "

La soledad del alma